El fallecido gobernador Bob Graham será velado en Tallahassee. Planean servicio conmemorativo en Miami Lakes

El ex gobernador de la Florida Bob Graham, fallecido el martes por la noche a los 87 años de edad, será velado en Tallahassee, en el Museo Histórico del Capitolio de la Florida, el 26 de abril de 11 a.m. a 1 p.m.

Los restos Graham estarán en un ataúd cerrado acompañado por guardias de honor militares y de las fuerzas del orden del estado. Se invita al público a asistir en persona o a ver la ceremonia por internet en The Florida Channel.

Después, Graham tendrá un entierro privado solo para la familia.

El sábado 11 de mayo se celebrará un funeral público en Miami Lakes, ciudad natal de Graham, en la Miami Lakes United Church of Christ. La hora del funeral público se dará a conocer después de su entierro privado la próxima semana, según un comunicado de prensa compartido con el Miami Herald.

Por orden del gobernador Ron DeSantis, las banderas de Estados Unidos y la Florida ondearán a media asta hasta la puesta de sol del 26 de abril. Durante una reciente conferencia de prensa, DeSantis dijo que Graham “sirvió a este estado con honor e integridad y realmente hizo una gran contribución”.

La familia está pidiendo que en lugar de flores, se hagan donaciones al Centro Bob Graham para el Servicio Público en la Universidad de la Florida. El número de teléfono del centro es 352-273-1080.

Graham fue elegido gobernador 1978 y ocupó el cargo durante ocho años. Posteriormente fue senador federal durante tres mandatos, siendo elegido en 1986. Marcó el comienzo de la era de los exámenes de aptitud escolar en el estado, sentó las bases de sus modernas políticas medioambientales y enfrentó la llegada masiva de cubanos que huían a través del estrecho de la Florida a principios de la década de 1980.

Graham dejó su huella en todo el estado a lo largo de sus más de cuatro décadas en la política de la Florida, durante las cuales se hizo famoso por su enfoque pragmático y centrista. Como gobernador, su programa de restauración “Salvemos nuestros Everglades” de 1983 sirvió de base para cuatro décadas de esfuerzos estatales y federales por recuperar y preservar el caudal natural del River of Grass.

Como senador, impulsó una mayor transparencia en torno a los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, y se ganó la reputación de objetor de conciencia, convirtiéndose en uno de los 23 senadores federales que se opusieron a la petición del entonces presidente George W. Bush de autorizar el uso de la fuerza antes de la guerra de Irak de 2003.

Y en la tribuna, sus “días de trabajo” —una serie de más de 400 actos de campaña que le acercaron a los floridanos trabajando en empleos corrientes como cargador de basura, cocinero y fabricante de chalecos antibalas— crearon un modelo para los políticos deseosos de parecer obreros.

“Bob Graham dedicó su vida a mejorar el mundo que le rodeaba”, declaró su familia el martes por la noche al anunciar su muerte. “Los monumentos conmemorativos de esa devoción están por todas partes: desde los Everglades y otros tesoros naturales que estaba decidido a preservar, hasta los institutos superiores y universidades que defendió con su compromiso con la educación superior, pasando por el entendimiento global que ayudó a fomentar a través de su trabajo con la comunidad de inteligencia, y tantos otros”.

Lawrence Mower y Romy Ellenbogen, redactores del Herald/Times, contribuyeron a este artículo.