Fallece en Miami el periodista Enrique Flor, figura destacada del periodismo de investigación

El periodista peruano Enrique Flor, de el Nuevo Herald, figura destacada del periodismo de investigación en español, falleció en la noche del 13 de marzo, en el Centro Médico Perdue del Jackson Memorial de Miami, a consecuencia de las secuelas de varios derrames cerebrales. Tenía 50 años.

Ganador de varios premios por sus reportajes investigativos en Latinoamérica y en el sur de la Florida, Flor (Lima, 1972) destacó por su sentido de la justicia, su tenacidad para indagar en la corrupción y sus diferentes caras y por hacer rendir cuentas a políticos e instituciones que engañan a la ciudadanía.

“Enrique se sentía orgulloso de hacer un periodismo de investigación contra la corrupción en Miami. Siempre nos decía: ‘Sean valientes, que usted es periodista para hacer su deber, y su deber es cuestionar”, dijo la reportera Erika Carrillo, que comenzó a colaborar con Enrique cuando era reportera de América Tevé y después de Univisión.

Enrique Flor, Erika Carrillo y Brenda Medina, entonces reportera de el Nuevo Herald, llevaron adelante el proyecto Condos de pesadilla, una serie en colaboración entre el Nuevo Herald y Univision que destapó fraude electoral masivo y corrupción en elecciones de las juntas directivas de las asociaciones de condominios, malversación de fondos y licitaciones fraudulentas para otorgar contratos.

Además de lograr varios premios periodísticos y de dar voz a los residentes de condos que veían cómo las juntas se apropiaban y administraban incorrectamente el dinero recaudado, Condos de pesadilla resultó en un proyecto bipartidista en la legislatura de la Florida que cambió la ley de condominios en el estado.

La investigación comenzó en el 2015 cuando le llegaron “quejas de un condominio en el vecindario de Fontainebleau de que habían robado una elección y que estaban en juego $4 millones”, recordó Carrillo, que con Flor y Medina revisaron 1,000 votos y firmas y descubrieron que había 200 firmas falsas.

“Cuando publicamos la primera historia, los vecinos del condominio protestaron y la Junta renunció”, dijo Carrillo.

Medina atribuye las primeras indagaciones en la situación de los condominios al “olfato periodístico” de Flor, que mientras cubría quejas comunitarias empezó a notar y documentar patrones de problemas en condominios.

“El nos inculcó la importancia de colaborar con todos nuestros colegas, incluso de otros medios. Gracias a su iniciativa trabajamos con Carrillo como “hormiguitas”, como siempre decía él.

Después de tocar miles de puertas y convencer a las personas afectadas para que denunciaran las irregularidades, Condos de pesadilla logró amplia divulgación en los medios del sur de la Florida y comenzó su camino a cambiar la ley de condominios en el estado.

Varios legisladores se acercaron a Carrillo, Medina y Flor preguntando cómo podían ayudar. El senador René García y el hoy ex senador José Javier Rodríguez lideraron el proyecto de ley en el Senado de la Florida y el ex representante José Félix Díaz en la Cámara.

En mayo del 2017 se aprobó en Tallahassee la primera reforma a la ley de condominios, que trajo una alegría a Enrique Flor, quien entonces se recuperaba del primer derrame cerebral que le afectó parte de la movilidad, a principios de ese año.

Enrique Flor (centro) con los periodistas Jay Weaver y Brenda Medina, que trabajó con él y Erika Carrillo, en la investigación ‘Condos de Pesadilla’, en la antigua redacción de el Nuevo Herald, Miami Herald en el Doral.
Enrique Flor (centro) con los periodistas Jay Weaver y Brenda Medina, que trabajó con él y Erika Carrillo, en la investigación ‘Condos de Pesadilla’, en la antigua redacción de el Nuevo Herald, Miami Herald en el Doral.

Condos de pesadilla ganó el primer lugar como reportaje de noticias en el concurso de la Sociedad de Editores de Noticias de la Florida en el 2017. También obtuvo ese año el premio President’s Awards, que otorga la compañía de medios McClatchy, matriz de el Nuevo Herald y Miami Herald.

“Con su fallecimiento el Herald y el mundo del periodismo han perdido a un gran nombre. Hemos perdido a un hombre compasivo, a quien extrañaremos mucho”, dijo Alex Mena, subdirector de el Nuevo Herald y el Miami Herald.

“Al caminar por los pasillos, Kike nunca desaprovechaba la oportunidad de saludar y entablar una conversación”, añadió Mena, resaltando su optimismo y disposición de ayudar.

De Lima a Miami, una vida entregada al periodismo

Flor estudió Periodismo en la Universidad de Lima y trabajó más de una década en la unidad de investigación del diario El Comercio, de Perú.

“Era un gran reportero. Tenía perspicacia y persistencia. Cuando proponía algo ya lo había estudiado y, finalmente, al cabo de la búsqueda, generalmente esta era exitosa”, señaló el periodista Ricardo Uceda, que lo llamó para integrar el equipo de investigación de El Comercio en 1995.

“ ‘Te llevas al mejor’, me dijo el subdirector de entonces, Alejandro Miró Quesada”, apuntó Uceda, indicando, que además de las cualidades como profesional de Flor, al conocer la noticia de su muerte, expresó: “Fue una de las personas con mayor calidad humana que he conocido”.

El Nuevo Herald y el Miami Herald ganan premios de periodismo

Enrique Flor llegó al sur de la Florida con su familia en el 2004. Desempeñó labores de valet parking hasta que comenzó a trabajar en el periodismo, en El Sentinel, la sección en español del diario Sun Sentinel.

Comenzó en el Nuevo Herald en el 2010 invitado por el entonces director del periódico, Manny García, que conocía su reputación como periodista de investigación en Perú.

“El impacto que ha tenido su trabajo en el sur de la Florida queda como legado”, dijo García, indicando que Flor era un reportero que siempre estaba trabajando en la calle, cerca de la gente y de sus problemas.

“Kike era un bello ser humano que ejercía el periodismo. Los políticos podían atacarlo, pero él no perdía la sonrisa”, apuntó, indicando que Flor tampoco perdía su garra para llegar al fondo de la noticia, como cuando investigó el caso de un candidato que afirmaba vivir en un distrito de Hialeah y allí solo tenía una oficina.

Enrique Flor (centro) con los reporteros José Iglesias y Matías Ocner en la redacción del Herald.
Enrique Flor (centro) con los reporteros José Iglesias y Matías Ocner en la redacción del Herald.

Enrique filmó un video del lugar, era un taller con un bañito, que obviamente no era la residencia oficial del candidato, señaló García.

Flor se enfocó en las comunidades de Hialeah y Doral, y su cobertura de la noticia siempre estaba por delante de otros medios, señaló Carrillo, apuntando que como reportero “manejaba muy bien sus fuentes”.

Flor también formó parte del equipo que cubrió uno de los hechos sangrientos más dramáticos en el sur de la Florida, el tiroteo en un edificio en Hialeah en el 2013, en el que murieron siete personas, entre ellas el responsable de la masacre.

En el 2012 Flor recibió el premio Herald Hero Award, que se otorga como reconocimiento especial el Nuevo Herald y el Miami Herald al periodista que ha hecho un trabajo excepcional en ese año.

Un gran colega con cualidades humanas extraordinarias

Daniel Shoer, periodista de el Nuevo Herald, destacó el compañerismo y disposición a ayudar de Flor, sus trabajos de impacto comunitario y sus “valerosas victorias”.

“En una ocasión viajó a Colombia, donde los médicos cubanos estaban varados tras desertar de sus misiones en Venezuela y Brasil. Como resultado de sus reportajes, que destaparon las condiciones bajo las cuales se encontraban detenidos los galenos, el gobierno de EEUU les otorgó visados y pudieron emigrar”, dijo Shoer, señalando que Flor deja “un doloroso vacío, pero también un legado de humanidad, virtudes y grandezas”.

Premian a periodistas de El Nuevo Herald y el Miami Herald en los Sunshine State Awards

Flor también fue ojo y oídos para los cubanos que no pueden visitar la isla, porque, en su condición de peruano, pudo entrar a Cuba y hacer reportajes que el gobierno cubano no le hubiera permitido a otros periodistas nacidos en la isla. Destaca una visita al santuario de El Cobre, de donde trajo historias de devoción de los cubanos a su patrona, la virgen de la Caridad.

Flor desempeñó además una actividad intensa con organizaciones periodísticas de investigación en Latinoamérica, como el Instituto Prensa y Sociedad (IPYS) y la Conferencia Latinoamericana de Periodismo de Investigación (COLPIN).

“Fue un colaborador muy activo del IPYS. Era pieza clave para el Jurado en la selección y valoración de los trabajos que concursan al Premio Latinoamericano de Periodismo de Investigación y de la COLPIN”, dijo la periodista Adriana León, del IPYS.

“Era un periodista sigiloso, humilde, discreto, observador y muy inteligente. En el Perú era muy respetado y querido por todos los periodistas. En El Comercio hizo investigaciones muy potentes vinculadas al poder político en la década de los 1990 y principios del 2000”, añadió León.

Los amigos de Flor destacan además su sentido del humor y su entrega a su familia, en especial a su hija Mariana, de 17 años.

“Kike me decía que hacía su trabajo con la comunidad también para darle un ejemplo a su hija”, dijo García.

“Era un ser humano con un gran corazón, que no le cabía en el pecho, una persona tan justa”, expresó la vicealcaldesa de Doral, Digna Cabral. “Era la voz de muchos que no tenían voz. Buscaba traer la verdad y la justicia sin importarle cuáles eran las consecuencias”.

“Enrique era un periodista comprometido, incansable. Decía que en Miami faltaba un periodismo en español que luchara contra la corrupción, y sembró una semilla que no teníamos hace una década”, dijo Carrillo.

Enrique Flor con su hija Mariana. Flor destacó por la dedicación como padre.
Enrique Flor con su hija Mariana. Flor destacó por la dedicación como padre.

El periodista Roberto Rodríguez Tejera, que lo tuvo varias veces como invitado en la emisora Actualidad 1040 AM, concordó con Carrillo en que Flor “nos hizo mejores periodistas, nos hizo mejores seres humanos”.

Brenda Medina resume el sentimiento de muchos colegas del medio: “Fue un mentor, maestro y gran amigo para mí y otros periodistas del sur de la Florida. Sé que hablo por muchos colegas al decir que siempre estaremos agradecidos por sus enseñanzas y por creer en nosotros”, concluyó Medina.

A Enrique lo sobreviven su hija Mariana, su mamá, Lucía, que vive en Perú, y cuatro hermanos, que viven entre Perú y Argentina.

El periodista Enrique Flor, figura destacada del periodismo investigativo en Latinoamérica y Miami, falleció la noche del 13 de marzo en un centro de atención del hospital Jackson, a consecuencia de las secuelas de varios derrames cerebrales.
El periodista Enrique Flor, figura destacada del periodismo investigativo en Latinoamérica y Miami, falleció la noche del 13 de marzo en un centro de atención del hospital Jackson, a consecuencia de las secuelas de varios derrames cerebrales.