Fútbol femenino: un partido se retrasó porque tuvieron que ir a la tienda del rival a comprar medias para poder jugar

Beth Mead, de Arsenal, pelea por la pelota con Melanie Leupolz, de Chelsea, en un partido por la Women's Super League inglesa.
Beth Mead, de Arsenal, pelea por la pelota con Melanie Leupolz, de Chelsea, en un partido por la Women's Super League inglesa. - Créditos: @Nigel French

El comienzo de la fecha 16 de la Women´s Super League inglesa tuvo un condimento extra insólito con la demora de media hora en el inicio del partido entre Chelsea y Arsenal. En el Stamford Bridge, 32.970 aficionados esperaban por el ingreso de las jugadoras y el pitazo de la jueza, pero los asistentes del equipo visitante estaban en la tienda oficial del conjunto local para comprar las medias que iban a usar las “Gunners”.

El plantel de Chelsea llegó al estadio e inició el precalentamiento en el campo de juego con su camiseta tradicional azul y las medias blancas. Y las futbolistas del Arsenal, que lucían su reconocida remera roja, también aparecieron con su color de medias habituales, las blancas. Pero debían ser rojas. Ante ese error reglamentario, que indica que no pueden ser iguales, el staff de las visitantes necesitó solucionar el problema de inmediato. Y la idea fue ir a la tienda que estaba en el propio estadio de sus adversarias para adquirir algunas de las variantes alternativas que utilizan las “Blues”.

Erin Cuthbert lleva la pelota marcada por Stina Blackstenius en el partido entre Chelsea y Arsenal por la Women's Super League.
Erin Cuthbert lleva la pelota marcada por Stina Blackstenius en el partido entre Chelsea y Arsenal por la Women's Super League. - Créditos: @Nigel French

Lo que podía ser un trámite rápido, sin necesidad de trasladarse demasiado, encontró otro obstáculo cuando ya habían pagada las tres decenas de medias negras, para diferenciarse de las rivales. A Arsenal lo viste Adidas y, entonces, los utileros tuvieron una tarea extra: tapar el logo de Nike con varias vueltas de cinta adhesiva negra sobre la prenda para no tener problemas con su patrocinador.

“Esto es vergonzoso. Ridículo”, criticó la situación públicamente Ian Wright, un exfutbolista que hoy es comentarista de una de las cadenas que emite los partidos. La espera pareció enojar a las jugadoras de Chelsea, que anotaron tres goles en los primeros 32 minutos y se llevaron el duelo por 3-1, en un juego que incluyó dos tantos en contra.

Leah Williamson, de Arsenal y con las medias con cinta adhesiva, lanza el centro ante la presión de Lauren James, de Chelsea, en el Stamford Bridge.
Leah Williamson, de Arsenal y con las medias con cinta adhesiva, lanza el centro ante la presión de Lauren James, de Chelsea, en el Stamford Bridge. - Créditos: @Nigel French

Uno, de la arquera visitante, Manuela Zinsberger, que intentó desviar con los puños un remate de Lauren James y la pelota terminó tomando un efecto que se metió en su propio arco. Un blooper. El otro, el descuento de Arsenal, cuando la estadounidense Catarina Macario quiso despejar de cabeza tras un córner, pero la peinó y puso el balón junto a un palo.

El resumen de Chelsea - Arsenal

Para la mayoría de los aficionados, pese al frío, resultó un tema risueño. Incluso, desde las redes sociales del conjunto ganador, y con el respaldo de haber vencido, se permitieron una broma después del triunfo y la celebración en el campo: “Estamos listas para quitarnos las medias”.

La victoria le permite a Chelsea seguir como líder, con 40 puntos, a seis fechas del final del torneo y dejar ahora a seis puntos a Arsenal, el tercero, detrás de Manchester City (37), que tiene un partido menos. Es un momento del torneo que deben ir por todo. Ya no sirven las cosas a medias.