Expremier de Pakistán Imran Khan y su esposa, condenados por violar ley matrimonial

ISLAMABAD (AP) — Un tribunal de Pakistán condenó el sábado al exprimer ministro Imran Khan y a su esposa a siete años de cárcel porque su enlace en 2018 violó la ley, según funcionarios y el abogado defensor.

El fallo se produce luego de que Khan y su esposa, Bushra Bibi, fueron sentenciados el miércoles a penas de 14 años en prisión en un caso de corrupción. Y llega también en vísperas de las elecciones parlamentarias del 8 de febrero a las que el exmandatario no podía presentarse por sus condenas por corrupción.

El abogado de la pareja, Intisar Panjutha, dijo que el juez Qudrat Ullah anunció el veredicto un día después del final del juicio. Khan y su familia insisten en que el caso tiene motivaciones políticas.

Según la fiscalía, Khan y su esposa infringieron la ley que exige que una mujer espere tres meses antes de volver a casarse.

La del sábado fue la cuarta condena para Khan desde su destitución en 2022. Las penas se cumplirán de forma simultánea.

Su partido, Pakistan Tehreek-e-Insaf, condenó la sentencia y el jefe de la formación, Gohar Khan, dijo a reporteros que Khan recurrirá el fallo.

“Es un caso falso contra Imran Khan y Bushra Bibi, pero aun así el tribunal les ha impuesto la pena máxima de prisión”, afirmó.

Bibi, la tercera esposa de Khan, era una sanadora espiritual que estuvo casada con un hombre que había afirmado que se divorciaron en noviembre de 2017, menos de tres meses antes de su enlace con Khan. Bibi afirma que su divorcio se produjo en agosto de 2017.

Khan estuvo casado antes con la celebridad Jemima Goldsmith y con la periodista Reham Khan. Durante el juicio, la pareja negó repetidamente que incumplieran el período de espera de tres meses exigido por la ley islámica que se sigue en el Pakistán.

El exmandataro y su esposa recibieron también una multa de 500.000 rupias (1.800 dólares) cada uno.

Khan está cumpliendo varias condenas en la prisión de Adiala, en la ciudad fortificada de Rawalpindi, donde, por motivos de seguridad, se juzgan sus causas pendientes.