Explosiones en Brasilia: quién era Francisco Wanderley Luiz, el hombre que murió en el atentado suicida
BRASILIA.- El hombre que intentó irrumpir en la sede del Supremo Tribunal Federal de Brasil (STF) y luego se suicidó con artefactos explosivos afuera del edificio había publicado mensajes que anticipaban sus intenciones, según las primeras investigaciones. Además, el objetivo de su ataque era juez de la Corte Alexandre de Moraes, considerado el mayor enemigo del expresidente Jair Bolsonaro, según reveló su exmujer.
El atentado se produjo antes de que Brasil acoja la semana que viene en Rio de Janeiro la cumbre de líderes del G20 y de una visita de Estado del presidente chino, Xi Jinping, a Brasilia.
“Primero hubo la explosión” de un auto. Después, “un ciudadano se aproximó al Supremo Tribunal Federal, intentó entrar, no lo logró y ocurrió la explosión en la puerta”, dijo en conferencia de prensa la gobernadora en funciones de Brasilia, Celina Leao.
Este jueves, la policía precisó que investiga las explosiones ocurridas como actos “terroristas”. “La investigación sobre el ataque terrorista se justifica por el carácter político de esta acción”, dijo al canal Globo el director general de la policía federal, Andrei Rodrigues.
Según el informe policial, el autor del ataque fallido es Francisco Wanderley Luiz, también dueño del vehículo que explotó. Su cuerpo todavía no había sido retirado el jueves por la mañana de la Plaza de los Tres Poderes de Brasilia, mientras avanza la investigación.
Luiz, 59 años, era de Santa Catarina (al sur de Brasil) y fue candidato a concejal del Partido Liberal, actual fuerza política del expresidente Jair Bolsonaro, en 2020.
Se postuló con el nombre de Tiü França para ser concejal de su ciudad, Rio do Sul, a 200 kilómetros de Florianópolis, pero recibió solo 98 votos y no fue elegido.
En su declaración ante el Tribunal Superior Electoral, declaró bienes por valor de 263.000 reales (45.000 dólares), además de una moto, tres autos y un edificio de dos pisos en Rio do Sul, según medios locales.
Luiz, que era cerrajero, había alquilado una casa en Ceilandia, ciudad satélite de Brasilia, “hace unos días”, según la policía. En el inmueble, los policías encontraron su licencia de conducir y más artefactos explosivos, dijo el jueves un portavoz de la Policía Militar del Distrito federal, el mayor Raphael Van Der Broocke, a Globonews.
Según el informe policial, Luiz había publicado una serie de mensajes en las redes sociales que anticipaban una actitud amenazante y fuertes críticas a la Corte Suprema, entre otras instituciones, y contra los “comunistas”. Sus páginas de Facebook e Instagram ya fueron eliminadas.
“En los mensajes compartidos a través de WhatsApp, se puede observar que algunos de ellos tienen contenidos que anticipan lo sucedido hoy, expresando previamente la intención del autor de practicar el autoexterminio y los ataques con bombas contra personas e instituciones”, dice el informe.
Uno de esos mensajes contenía una foto de él mismo adentro de la Corte Suprema que decía: “Dejan entrar al zorro en el gallinero. O no saben el tamaño de la presa o es realmente estúpido. Proverbios 16:18 (El orgullo va antes de una caída)”.
“Estamos atravesando un período muy turbulento y degenerativo en nuestro país… Hay varias razones, pero una de las principales es sin duda que las armas pesadas están en manos de gacelas saltarinas. ¡Levántate cuartel! No te dejes manipular”, había escrito en otro posteo. “El soldado demuestra tu valor”, continuó.
Además, había mencionado sobre un “juego” que comenzaría el miércoles por la tarde -cuando fue el ataque fallido en Brasilia- y terminaría el sábado. “Tenga cuidado al abrir cajones, armarios, estanterías, guardamateriales, etc. Comienza a las 5:48 pm el 13/11/2024… El juego termina el 16/11/2024. ¡¡¡Buena suerte!!!”, escribió.
“¡¡¡Todo lo que ya se ha hecho para obtener mejoras en nuestro país y nada ha dado resultados!!! ¡¡¡Es hora de cambiar nuestros caminos y acciones!!! ¿Dónde está el gran problema? En el poder judicial (STF)”, también había publicado.
Además, escribió mensajes amenazantes en los que decía haber colocado bombas en casas de periodistas y políticos. “Policía Federal, tiene 72 horas para desactivar la bomba en la casa de los comunistas de mierda”, decía uno de ellos.
“Lo sentí alterado”
El diputado Jorge Goetten, también de Santa Catarina, dijo en una entrevista con CNN Brasil que conocía al sospechoso desde su juventud.
“França, su familia, un querido amigo de Rio do Sul, mi ciudad natal, lo conozco a él y a su familia desde mi juventud”, dijo el diputado del partido Republicanos, y agregó que Luiz era un emprendedor exitoso en su ciudad.
“Siempre ha sido un tipo vanguardista, un tipo muy actualizado, acorde con las tendencias del mercado. Y dominó la vida nocturna de Rio do Sul durante mucho tiempo”, afirmó Goetten.
El diputado agregó que el estilo de vida de Luiz cambió desde que se separó de su esposa, según percibió cuando se reunieron en su despacho de la Cámara de Diputados, justamente en Brasilia, en mayo del año pasado.
“Me sentí muy feliz con su visita. Pero lo sentí, incluso se lo comenté a mis compañeros de la oficina, un poco alterado, con un problema mental. Me habló de la separación y sentí que realmente le afectó. No era ese amigo de Rio do Sul que yo conocía”, dijo.
El ataque
Las explosiones se produjeron en un intervalo muy breve hacia las 19.30 y no dejaron ningún herido.
La sede del Supremo Tribunal Federal está en la Plaza de los Tres Poderes, donde se encuentran también el Palacio de Planalto, sede de la Presidencia, y el Congreso. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva ya había salido de Planalto en el momento de las explosiones.
El sargento Rodrigo Santos explicó que varios agentes estaban haciendo una ronda cuando vieron un auto en llamas, con humo. “El individuo salió corriendo del interior del vehículo”, dijo, en relación a Luiz.
El auto tenía “una especie de bomba, varios explosivos fraccionados, atados con ladrillos”, agregó el sargento, que contó que personal del Congreso salió con extintores y ayudó a apagar el fuego.
“La Policía Federal está trabajando rigurosamente para dilucidar rápidamente los motivos de las explosiones”, dijo en un comunicado el ministro de Justicia, Ricardo Lewandowski.
Según declaró un guardia de seguridad del STF que presenció el momento de las explosiones frente a la estatua de la Justicia.
“El individuo llevaba consigo una mochila y se encontraba en actitud sospechosa frente a la estatua, colocó la mochila en el suelo, sacó un extintor, sacó una remera del interior de la mochila y la arrojó contra la estatua. El individuo sacó algunos artefactos de la mochila y cuando se acercaron los guardias de seguridad del STF, se abrió la camisa y les advirtió que no se acercaran”, dice un extracto de la declaración de Nataniel Camelo.
“El individuo se tumbó en el suelo, encendió el último artefacto, se lo colocó en la cabeza con una almohada y esperó la explosión”, dijo.
La exmujer de Wanderley Luiz señaló que que su exmarido solo se quitó la vida porque había sido descubierto.
El objetivo
Por su parte, Alexandre de Moraes –el juez que habría sido el objetivo del ataque- vinculó las explosiones con los ataques del 8 de enero de 2023, cuando los partidarios de Bolsonaro invadieron y saquearon las sedes de las instituciones de la capital, y rechazó la posibilidad de una amnistía para las personas acusadas de atentar contra la democracia.
“Lo ocurrido ayer no es un hecho aislado en el contexto que comenzó entonces, cuando el infame gabinete del odio comenzó a destilar discursos de odio contra las instituciones y la autonomía del poder judicial”, dijo Moraes durante un acto en Brasilia.
Como “gabinete del odio” fue bautizado un grupo de asesores que manejaban las redes sociales de Bolsonaro durante su mandado, encabezados por su hijo Carlos, que atacaban virtualmente a opositores, a la prensa y a sectores de la justicia.
“Esta escalada se desarrolló bajo el falso disfraz de uso criminal de la libertad de expresión, lo que resultó en el 8 de enero”, dijo el juez.
Según Moraes, una posible amnistía para los golpistas solo generaría “más ataques, como ocurrió ayer”. “No hay posibilidad de pacificación con amnistía para los criminales. Creen que pueden venir a Brasilia e intentar volar la Corte Suprema porque fueron instigados por personas, muchas de ellas en altos cargos”, añadió.
Partidarios de Bolsonaro impulsan en el Congreso una ley de amnistía para los implicados en el levantamiento del 8 de enero.
Agencias AFP, AP y diario O Globo