Europa podría enfrentarse a un invierno más frío que el del año pasado debido a 'La Niña'
Algunas zonas de Europa se enfrentan a un invierno más frío que el año pasado tras un verano de temperaturas extremas en todo el continente. Francia, el Reino Unido y Escandinavia serán las regiones más frías en octubre, mientras que el sudeste de Europa y España seguirán siendo cálidos.
Aunque es probable que este invierno las temperaturas sean más bajas que el año pasado -en parte, según los meteorólogos, debido al fenómeno de 'La Niña'-, en general podrían seguir siendo más cálidas que las medias a largo plazo. Europa occidental y central también se verá afectada en las próximas semanas por la cola de varias tormentas procedentes del Atlántico.
Las condiciones al oeste de África obligan a estas tormentas a atravesar el Atlántico Norte y podría aparecer un nuevo sistema cada pocos días hasta mediados de octubre. Esto crea una gran incertidumbre en los modelos meteorológicos y dificulta la predicción de las condiciones en Europa durante las próximas semanas.
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¿Qué es 'La Niña' y por qué traerá un invierno más frío y húmedo a Europa?
'La Niña' es un patrón climático natural que se produce cuando las temperaturas de la superficie del mar en el Pacífico central y oriental descienden por debajo de la media, lo contrario de la fase cálida de 'El Niño'. Tiene amplias repercusiones en los patrones meteorológicos mundiales, incluidos los de Europa.
Los expertos de la Organización Meteorológica Mundial han pronosticado un 60% de probabilidades de que se produzcan condiciones de 'La Niña' entre octubre y febrero. Este invierno se espera un fenómeno de intensidad débil a moderada, que se debilitará a principios del año próximo.
'La Niña' suele traer temperaturas más frías de lo normal en Europa occidental, y los meteorólogos prevén un descenso de las temperaturas hacia noviembre y diciembre. Por lo general, este patrón climático también trae condiciones más húmedas y frías a los Alpes, lo que puede dar lugar a nevadas más frecuentes y abundantes.
En el resto de Europa, los modelos meteorológicos pronostican menos nieve de lo normal, salvo en algunas zonas del norte y del centro de los Alpes. El noroeste y el sureste de Europa tienden a ser más secos de lo habitual, mientras que el suroeste suele ser más húmedo.
Pero, a medida que nos alejamos del epicentro en el Pacífico, los impactos de 'La Niña' y 'El Niño' se ven más fácilmente alterados por los patrones meteorológicos locales. Esto hace que sus efectos exactos en Europa sean difíciles de prever, ya que no hay dos fenómenos completamente iguales.
El cambio climático también está intensificando la gravedad de otros fenómenos meteorológicos extremos. Las precipitaciones se han vuelto más variables, desviándose de las medias históricas y de los patrones esperados.
Según el Sexto Informe de Evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), el aumento de los gases de efecto invernadero provocado por el hombre ha incrementado la frecuencia e intensidad de los fenómenos meteorológicos extremos. Con estos patrones meteorológicos "normales" alterados por el cambio climático, puede resultar difícil predecir lo que nos deparará el futuro.