Mientras los estudiantes de Florida tienen dificultades para graduarse, los legisladores buscan una ‘solución temporal’

Alrededor de 4,000 alumnos de último año de las preparatorias públicas de Miami-Dade corren el riesgo de no graduarse el próximo mes, pero, luego de un cambio de última hora a un proyecto de ley de educación de gran alcance el martes, eso podría cambiar.

La Cámara de Representantes votó a favor de suavizar los requisitos puntuación para graduarse en las pruebas que estaban programadas para entrar en vigor este año. El cambio —dirigido por Ralph Massullo, presidente de la Comisión de Educación de la Cámara. y republicano del Condado Citrus, al norte de Tampa— atrajo el apoyo bipartidista en vista de que los legisladores habían oído hablar de las preocupaciones de miles de estudiantes que luchan por cumplir los nuevos estándares de graduación.

La propuesta —escondida en el proyecto de ley HB 1537— retrasa el requisito de obtener una mayor puntuación en las pruebas SAT y ACT, que los estudiantes pueden usar en lugar de sus evaluaciones de décimo grado para cumplir los requisitos de graduación por lo menos durante dos años. La medida también permite a los estudiantes que se gradúan este año que aún no han conseguido aprobar Álgebra 1 y Artes del Lenguaje en décimo grade cumplir los requisitos para graduarse usando la puntuación del SAT y los requisitos de ACT del año pasado.

Los requisitos de este año, si no se retrasan, por ejemplo, exigen una mayor puntuación en Lectura y Redacción para el SAT y requiere que los estudiantes aprueben tanto la Lectura y el Inglés, no solo la lectura en el ACT, según informa el Tallahassee Democrat.

Gran parte de la conversación en el pleno de la Cámara se centró en las preocupaciones sobre las interrupciones y contratiempos causados por la pandemia, que cerró las escuelas y presentó desafíos para las pruebas durante el aprendizaje híbrido, un tema que superintendentes de todo el estado han mencionado en sus solicitud para retrasar los aumentos.

“Esto es lo que [los estudiantes] necesitan para llegar a la meta”, dijo el martes la representante Kelly Skidmore, demócrata de Boca Ratón. Los cambios propuestos abordan las preocupaciones planteadas en todo el estado sobre las próximas graduaciones.

Massullo calificó al cambio de una “solución temporal”.

Las autoridades escolares de Miami-Dade dijeron que el superintendente José Dotres también ha abogado en nombre de los estudiantes. La clase de 2023 es “la última que ha tenido interrupciones significativas en su experiencia en la escuela secundaria como resultado del COVID”, dijeron las autoridades.

La cuestión podría plantearse de nuevo en la Cámara el miércoles y a continuación sería enviada al Senado.

Puntuaciones después de la pandemia

La Junta de Educación de la Florida adoptó el requisito de puntaje de prueba más alto en 2018 —antes que la clase graduada de este año empezara la escuela secundaria— y se pretendía que entrara en vigor el curso escolar pasado.

Sin embargo, citando preocupaciones por la pérdida de aprendizaje durante la pandemia, la Junta de Educación de la Florida retrasó la implementación un año.

Sin embargo, los requisitos de evaluación estandarizada en todo el estado —históricamente necesarios para graduarse— habían sido suspendidos durante dos años durante la pandemia, pero fueron reinstaurados el curso pasado. Como resultado, la tasa de graduación del estado disminuyó en 2.8 puntos porcentuales, de 90.1% el año escolar 2020-21 a 87.3% en el año 2021-22.

En las escuelas de Miami-Dade, la tasa de graduación disminuyó por primera vez en cinco años durante el curso escolar 2021-22 a 88.2%, una disminución de 1.9 puntos porcentuales, de 90.1$ el año anterior.

La reportera de Miami Herald Ana Ceballos contribuyó a este artículo.