Esperan que paquete de ayuda de 800 millones de dólares de EEUU a Ucrania incluya munición de racimo

Por Mike Stone y Michelle Nichols

WASHINGTON, 7 jul (Reuters) - Se espera que Estados Unidos anuncie el viernes que enviará a Ucrania municiones de racimo, muy cuestionadas, como parte de un paquete de seguridad de 800 millones de dólares, una medida que, según Ucrania, tendría un "extraordinario impacto psicoemocional" en las fuerzas rusas de ocupación.

Las municiones de racimo están prohibidas en más de 100 países. Suelen liberar un gran número de pequeñas bombetas que pueden matar indiscriminadamente en una amplia zona, y las que no explotan suponen un peligro durante décadas después de que finalice un conflicto.

Los grupos de derechos humanos se oponen a la decisión de Washington, pero las municiones podrían dar un impulso a la contraofensiva ucraniana para recuperar el territorio arrebatado por las fuerzas rusas desde que lo invadieron en febrero de 2022.

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, está en contra del uso continuado de municiones de racimo, dijo un portavoz de la ONU el viernes cuando se le preguntó sobre el anuncio previsto de Estados Unidos.

Alemania, aliada de Estados Unidos, declaró el viernes que se opone al envío de municiones de racimo a Ucrania, según declaró la ministra alemana de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock. Alemania es uno de los 111 Estados parte en la Convención sobre Municiones de Racimo. Estados Unidos no forma parte de la Convención.

Ucrania ha solicitado municiones de racimo para disparar contra posiciones rusas con tropas atrincheradas. Ha instado a los miembros del Congreso estadounidense a que presionen a la administración del presidente Joe Biden para que apruebe su envío.

"Sin duda, la transferencia de más volúmenes de proyectiles a Ucrania es una contribución muy significativa a la aceleración de los procedimientos de desocupación", declaró el viernes el asesor político presidencial Mykhailo Podolyak.

"Especialmente si hablamos de munición de racimo, que sin duda es capaz de tener un extraordinario impacto psicoemocional en los ya desmoralizados grupos de ocupación rusos", dijo.

(Reporte de Mike Stone en Washington y Michelle Nichols en Nueva York; editado en español por Javier López de Lérida)