Los esfuerzos por reestablecer la paz, eje del encuentro entre el papa Francisco y el primer ministro de Ucrania

El papa Francisco recibió en el Vaticano al primer ministro de Ucrania, Denys Shmyhal. (Vatican Media via AP)
El papa Francisco recibió en el Vaticano al primer ministro de Ucrania, Denys Shmyhal. (Vatican Media via AP) - Créditos: @Vatican Media

ROMA.- Los esfuerzos para reestablecer la paz y la ayuda del Vaticano para lograrlo, estuvieron hoy al centro de la conversación de media hora que el papa Francisco tuvo con el primer ministro de Ucrania, Denys Shmyhal, a quien recibió justo en vísperas de su viaje de tres días a Hungría, donde se reunirá mañana con el premier Viktor Orban, uno de los pocos aliados de Vladimir Putin en Europa.

“Hablamos de la fórmula de paz del presidente Volodimir Zelensky, pero discutiendo más detalladamente los pasos que podría dar el Vaticano, ayudándonos a llegar a la realización de todos los puntos. Pedí la participación y asistencia de los cardenales y de Su Santidad para el retorno de los niños huérfanos que fueron deportados a Rusia y, además, invité a Su Santidad a visitar en persona Ucrania”, contó Shymhal, en una conferencia de prensa que concedió después del encuentro en la sede de la Asociación de la Prensa Extranjera, en la que no dio más detalles.

El Papa y Denys Shmyhal, en el Vaticano. (Photo by Handout / VATICAN MEDIA / AFP)
El Papa y Denys Shmyhal, en el Vaticano. (Photo by Handout / VATICAN MEDIA / AFP) - Créditos: @HANDOUT

Aunque siempre se manifestó abierto a una mediación, en diversas entrevistas Francisco hizo saber que estaba dispuesto a viajar a Kiev, pero sólo con la condición de ir antes también a Moscú.

Shmyhal, que había estado en 2021 en el Vaticano –antes del comienzo de la guerra-, fue el primer funcionario de alto rango del gobierno de Zelensky que se reunió con Francisco, que desde la invasión de la exrepública soviética por parte de la Federación Rusa, intenta, hasta el momento, sin resultados, frenar una guerra “insensata”, que ya entró en su segundo año sin solución a la vista. El Papa habló al menos dos veces por teléfono con Zelensky, mientras que nunca logró hacer lo mismo con Putin.

“Me reuní con Su Santidad en el Vaticano. Le conté cómo los ucranianos tienen que luchar por sus vidas todos los días en la guerra comenzada por Rusia”, tuiteó Shmyhal, después del encuentro con el Papa, que tuvo lugar en la biblioteca del Palacio Apostólico. “Apreciamos los esfuerzos de la Santa Sede para que termine la guerra. El mejor camino a la paz es la fórmula del presidente de Ucrania”, agregó.

A la hora del intercambio de regalos, Francisco le donó una placa de bronce con una flor y la leyenda “La paz es una flor frágil”, su mensaje de la paz de este año, el documento sobre hermandad humana y otros dos libros. Shymal, en tanto, le obsequió espigas de grano de Ucrania, una jarra con forma de gallo que resistió a un bombardeo cerca de Kiev y un libro de fotos sobre la guerra y la resistencia ucranianas.

Shymhal, que viajó para asistir a una conferencia bilateral con Italia sobre la reconstrucción de su país, se reunió luego con el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado y con el arzobispo británico Paul Gallagher, “canciller” del Vaticano.

“Durante los cordiales coloquios en la Secretaría de Estado se han destacado las varias cuestiones relacionadas con la guerra en Ucrania, reservando una particular atención al aspecto humanitario y a los esfuerzos para reestablecer la paz”, indicó un comunicado del Vaticano. “En el mismo contexto, también han sido tratados temas relacionados con la vida y la actividad de las iglesias en el país”, agregó.

En la conferencia de prensa que concedió más tarde en la sede de la Asociación de la Prensa Extranjera, Shmyhal contó que, en el marco de negociaciones en curso, en el Vaticano también pidió que la Santa Sede pudiera ayudar a Ucrania para que funcione “sin limitaciones” un corredor europeo de exportaciones.

El primer ministro -que habló a través de una intérprete- se mostró evidentemente satisfecho de la conferencia bilateral sobre la reconstrucción de su país, en la que participaron ayer centenares de empresarios italianos y ucranianos.

“En cuanto a las conclusiones de la conferencia organizada personalmente por la primera ministra Giorgia Meloni y Zelensky, quiero subrayar que firmamos seis memorándums y que ya trazamos las líneas principales de reconstrucción que necesita Ucrania en cuanto al restablecimiento de la capacidad energética, la bonificación de terrenos minados, la reparación de viviendas y de infraestructuras críticas”, dijo Shmyhal.

“Los empresarios italianos demostraron interés en participar en la reconstrucción de Ucrania y con Italia nuestro principio, que siempre fue estar unidos en la defensa, ahora es estar unidos en el futuro y en la reconstrucción”, subrayó.

Consciente de que se trata de un tema más que delicado, ante preguntas sobre una eventual mediación de China para detener el conflicto, a la luz de la conversación telefónica que tuvieron ayer el presidente Xi Jinping y Zelensky –la primera desde el inicio de la guerra- y la noticia de la visita de una delegación china a Kiev, Shymal fue diplomático.

“Ayer hubo una conversación telefónica muy productiva entre Zelensky y su par chino. Esta conversacion para mí esta abriendo una nueva etapa de nuestras relaciones y estoy convencido de que es un buen inicio para un desarrollo positivo de nuestras relaciones en el futuro”, se limitó a decir, sin querer profundizar más.

Ante otra pregunta sobre una mediación del presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, en cambio, fue lapidario. “Un ejemplo simple: si una banda criminal invade tu casa, mata a miembros de tu familia, viola a tu mujer, deporta a tus hijos para que sean educados mejor en otro país y ocupa tu casa, ¿es realista discutir un acuerdo con estos bandidos, con la participación de tus vecinos? Antes que nada, estos bandidos deben salir de tu casa. Y quizás después se pueden discutir principios de convivencia”, graficó.

Lula había propuesto que Kiev cediera la península de Crimea para facilitar el fin de guerra, algo totalmente inaceptable para Ucrania, que exige el respeto de su integridad territorial y reclama que las fuerzas rusas se retiren de Crimea y de los demás territorios ocupados.

El premier ucraniano, que no mencionó lo anterior, “saludó”, de todos modos, “los esfuerzos del pueblo brasileño y de su presidente de sostener al pueblo ucraniano”, recibiendo a refugiados ucranianos.