El entusiasmo de Vélez y Ricardo Centurión por los avances en su recuperación y su regreso a las canchas tras 10 meses de inactividad

Centurión, otra vez enfocado en el fútbol
Centurión, otra vez enfocado en el fútbol

Ricardo Centurión volvió a sonreír dentro de un campo de juego. Si bien no ingresó en el partido que Vélez le ganó a Sportivo Las Parejas, de Santa Fe por 2 a 1 (y avanzó a 16vos de final de la Copa Argentina), el hecho de sentarse otra vez en el banco de suplentes lo motiva a seguir por la senda que eligió transitar junto al club para reencauzar su vida, y al mismo tiempo su carrera profesional.

En diciembre pasado, mientras conducía su auto, fue interceptado en un control de División Intervenciones Rápidas y Servicios Especiales, en Villa Soldati, Buenos Aires. Dio positivo de cocaína. Fue en ese instante en que en el club de Liniers decidieron actuar de manera conjunta con el jugador. Por eso, mucho antes de que el técnico Gustavo Quinteros decidiera incluirlo en la nómina del encuentro de anoche, hubo un trabajo interdisciplinario para que diversos profesionales evaluaran los pasos del delantero en su reinserción al plantel profesional, algo que el club de Liniers explicó en un comunicado. El futbolista de 31 años, que no tiene acción de forma oficial desde el 16 de abril de 2023, parece haber asimilado que esta vez sí es la última chance de alejarse de los vicios, que tantas veces astillaron su camino. Por eso la alegría de todas las partes involucradas, que Vélez hizo público.

Hablé con él, le voy a dar una oportunidad más como persona y como jugador, creo que todos lo merecen. Le dije que, cuando esté bien, lo voy a contar como un jugador más”, había anticipado el DT tras la victoria sobre Huracán.

“Primer objetivo cumplido. Desde su regreso al club, Ricardo está a disposición del cuerpo técnico para una competencia oficial. ¡Felicitaciones Ricky!”, se leyó en la cuenta oficial del club en Twitter, con una foto del jugador en el entrenamiento.

Además, en un breve comunicado, destacaron: “A partir del trabajo conjunto de distintas áreas (Comisión Directiva, Legales, Departamento y Comisión Médica, Departamento de Fútbol, Dirección Deportiva), desde diciembre se viene realizando un abordaje interdisciplinario clínico y deportivo de la situación de Ricardo Centurión, del que también participan especialistas externos idóneos en el tema”.

Según se detalla en el texto publicado en la página oficial del club, “el principal objetivo es y será ayudar al deportista, brindándole herramientas y contención para recuperar primero al ser humano y luego, de ser posible, al futbolista. Esta decisión fue también consensuada con el propio jugador, quien siempre mostró una gran predisposición y compromiso con el trabajo propuesto.”

El comunicado finaliza con los próximos pasos: “Sabemos que será un camino largo y un gran desafío para Ricardo y nuestra Institución. Como también sabemos, que cada paso es muy importante. Hoy se pudo cumplir el primer objetivo: por primera vez desde su regreso al Club, Ricardo está a disposición del Cuerpo Técnico para una competencia oficial. A seguir adelante. ¡Felicitaciones Ricky!”

La decisión de Vélez de enfocarse en la persona más allá del deportista no solo habla bien del club, sino también (y fundamentalmente) de la voluntad Centurión de aceptar esa ayuda, después de encadenar a lo largo de estos años conflictos varios, que lo único que hicieron fue astillar su promisoria carrera y condicionar su vida fuera de las canchas.

Entre 2016 y 2017, durante su paso por Boca, el hombre surgido en Racing estuvo implicado en dos situaciones vinculadas con el consumo de alcohol. En la primera, el delantero fue protagonista de un choque múltiple en Avellaneda. Con su BMW chocó con tres autos y luego se fugó. En el otro se lo vio alcoholizado en un boliche de Lanús, donde participó en una pelea que terminó con intervención policial. Además, por esa época se viralizó una foto suya con una escopeta y su expareja, Melisa Tossi, presentó una denuncia por agresiones físicas y violencia de género. “Me astilló tres dientes y me ahorcó. No entiende que yo ya no quiero estar con él y se pone agresivo”, declaró la mujer. Todo ese combo derivó en que el club de la Ribera, conforme con sus actuaciones (8 goles en 24 partidos), finalmente decidiese adquirir su pase, por lo que el jugador debió regresar a Genoa de Italia.

Un año más tarde, el delantero volvió a la Argentina. En Racing tuvo poco rodaje, consecuencia de problemas de indisciplina (se agarró a trompadas con Juan Cáceres en una práctica) y ausencias varias a los entrenamientos. Además, fue detenido por pasar dos semáforos en rojo con su auto, se negó a someterse al test de alcoholemia e intentó sobornar al oficial para evitar la multa. Una recordada pelea con el técnico Eduardo Coudet (el jugador lo empujó cuando el DT decidió reemplazarlo en medio de un River-Racing) decretó su desvinculación.

Por entonces se dio una recordada charla con Oscar Ruggeri en ESPN, en donde el campeón del mundo quiso ayudarlo y aconsejarlo al aire y él reconoció: “¿Sabés qué pasa Cabezón? Que yo a la noche no tengo sueño, tengo ganas de salir a tomar algo todos los días”.

Tras un paso discreto y con polémica en San Luis, de México, en ene ro de 2020 Ricky se incorpora a Vélez. Entonces fue clave el técnico Gabriel Heinze, que declaró: “Todo lo externo lo sabemos. Yo me voy a hacer responsable. Estoy con muchas ganas de poder ayudarlo”. Jugó ocho partidos y convirtió dos goles. La recuperación era evidente, pero llegó la pandemia y seis meses de inactividad. En ese lapso, Vélez le compró su ficha a Racing.

La chance de dejar atrás los fantasmas y volver a brillar en el fútbol llegó en enero de 2022, cuando el delantero acordó su incorporación a San Lorenzo. Sin embargo, nada cambió: apenas un semestre en el club de Boedo, poca acción y ausencias injustificadas a las prácticas sentenciaron su regreso a Vélez, donde trabajó lejos del plantel de Primera División. Incluso, en horarios diferentes.

La anteúltima chance se dio hace poco más de un año, cuando en enero de 2023 se anunció su arribo a Barracas Central. Aunque Centurión solamente jugó 10 partidos y terminó desafectado del plantel por el director técnico Sergio Rondina.

Centurión, con la indumentaria de Barracas
Centurión, con la indumentaria de Barracas - Créditos: @Twitter @barracascentral

El hecho de haber sido padre también influye positivamente en este nuevo proceso de Ricky para reencauzar su vida personal y que eso ayude a relanzar su carrera profesional. El 16 de junio de 2021 nació Emma. “Llegaste a nuestras vidas hija mía. Te amamos y te vamos a cuidar siempre”, escribió ese día Ricky en Instagram, junto a una fotografía de ambos junto a la mamá, Jenifer.

Lo único cierto es que tanto Vélez como Centurión están enfocados en recuperar a la persona, alejarlo de las sombras y que vuelva a brillar. Si eso, además, le permite seguir jugando de manera oficial al fútbol, bienvenido.