Elon Musk cede en su disputa con la Justicia brasileña y X se acerca a la reanudación

Manifestantes marchar exigiendo el juicio político al juez de la Corte Suprema Alexandre de Moraes, quien está enfrentado con el magnate Elon Musk
Manifestantes marchar exigiendo el juicio político al juez de la Corte Suprema Alexandre de Moraes, quien está enfrentado con el magnate Elon Musk - Créditos: @Ettore Chiereguini

BRASILIA.- La disputa entre el Supremo Tribunal Federal brasileño (STF) y la plataforma X, del magnate Elon Musk, se encamina a su desenlace tras un duro enfrentamiento que llevó a la suspensión de la red social en el país.

La empresa retrocedió en su postura y decidió nombrar el viernes un representante legal en Brasil, tal como exigía el máximo tribunal, y quedó más cerca de reanudar su funcionamiento, tras haber sido bloqueada el 30 de agosto.

Los abogados de la compañía de Musk se presentaron ante el STF la noche del viernes para manifestar que habían cumplido con las exigencias para que se levante el bloqueo del servicio.

X nombró como su representante legal a la abogada Rachel de Oliveira, quien ocupaba ese mismo puesto antes de que Musk decidiera cerrar sus oficinas en Brasil.

Elon Musk habla durante la final del US Open de tenis en Nueva York, el 8 de septiembre pasado
Elon Musk habla durante la final del US Open de tenis en Nueva York, el 8 de septiembre pasado - Créditos: @Kirsty Wigglesworth

Una decisión del juez Alexandre de Moraes, ratificada luego por la primera sala del STF, había determinado la suspensión de X hasta tanto la empresa efectúe el pago de multas millonarias, nombre un nuevo representante legal en el país y bloquee media docena de cuentas de usuarios investigados por diseminar desinformación y atacar a las instituciones democráticas.

La conducta del empresario, reticente a obedecer las determinaciones en un primer momento, pasó a ser investigada por los posibles delitos de “obstrucción de investigaciones de organización criminal” e “incitación al delito”.

Rechazo y bloqueo

La disputa entre X y el STF comenzó cuando la red social se negó a suspender cuentas usadas para incitar ataques a las instituciones. La empresa llegó a acumular una deuda de más de tres millones de dólares y cerró su oficina en Brasil para evitar medidas coercitivas contra sus representantes.

Esto llevó al bloqueo de la red social, y luego el congelamiento de recursos de cuentas de la proveedora de Internet satelital Starlink, controlada también por Musk, para abonar el saldo a la Justicia.

El magnate llegó a tildar a Moraes de “dictador de toga” y compararlo con villanos de películas, además de asegurar que el juez merecía ir preso “por sus delitos”.

El presidente del Supremo Tribunal Federal de Brasil, Alexandre de Moraes
El presidente del Supremo Tribunal Federal de Brasil, Alexandre de Moraes - Créditos: @Eraldo Peres

Idolatrado por parte de la derecha brasileña -que el 7 de septiembre con el expresidente Jair Bolsonaro a la cabeza pidió el juicio político de Moraes-, Musk se había negado a cumplir con decisiones que consideraba contrarias a la libertad de expresión y una persecución política. Además, la empresa había comenzado a compartir en sus perfiles decisiones bajo secreto de sumario.

Pero la postura del empresario sudafricano y de la empresa cambió en las últimas horas. Según el analista político Caio Junqueira, de CNN Brasil, Musk fue convencido por su equipo asesores jurídicos en Estados Unidos de que no quedaba más alternativa que cumplir con lo determinado por la corte para volver a funcionar en Brasil, donde la red cuenta con más de 20 millones de usuarios.

El STF confirmó este sábado los movimientos de X en búsqueda de una normalización del servicio, pero exigió, en un plazo de cinco días, la presentación de más documentos que comprueben el vínculo entre la presunta representante legal y la empresa, según una decisión a la que tuvo acceso LA NACION.

Moraes aseguró que la exigencia no fue “debidamente cumplida”, pidió que complemente la información presentada el viernes con nuevos documentos y también ordenó a la agencia tributaria brasileña y al Banco Central que informen a la corte la situación legal de la representación de X en Brasil.

Alexander de Moraes y Lula da Silva asisten a un desfile en Brasilia
Alexander de Moraes y Lula da Silva asisten a un desfile en Brasilia - Créditos: @Eraldo Peres

Una vez que la empresa complemente los documentos, el juez debe evaluar si fueron cumplidas todas las órdenes de bloqueo de perfiles y todas las multas fueron abonadas. Luego, estará en condiciones de decidir si levanta el bloqueo, y eventualmente comunicar la decisión a la Anatel, que a su vez debería notificarlo a las operadoras de Internet.

Según el analista André Cesar, de la consultora legislativa Hold, la controvertida decisión de la Justicia dio combustible para movilizar políticamente a la derecha y también podría anticipar las discusiones parlamentarias sobre reglas para el funcionamiento de las redes sociales. “La Justicia brasileña alimentó políticamente a la derecha, así como la necesidad de que se discuta una reglamentación de las redes sociales. Es un debate que está a la vuelta de la esquina”, dijo Cesar a LA NACION.

El conflicto entre X y el STF había vuelto a escalar esta semana. La aplicación volvió a funcionar para algunos brasileños el miércoles luego de que la empresa cambiara su dirección IP en Brasil, suscitando una nueva multa de cerca de 900.000 dólares diarios fijada por Moraes. La Justicia interpretó el episodio como una nueva afronta y desacato a la corte.

El presidente de la Agencia Nacional de Comunicaciones de Brasil (Anatel), Carlos Baigorri, dijo que la compañía usó de forma “deliberada”, para burlar el bloqueo, la misma “medida que usan los piratas (informáticos)”. El gobierno del presidente Luiz Inacio Lula da Silva, que tomó partido por Moraes en la pelea, volvió a defender las medidas restrictivas esta semana.

El ministro de Justicia y exministro de la corte, Ricardo Lewandowski, comparó la pelea entre la Justicia de Brasil y la empresa de Musk con la propia entre TikTok y Estados Unidos, ante la preocupación del gobierno de ese país sobre la seguridad nacional y la privacidad de datos en la plataforma china.

“Es el mismo brazo de hierro que Moraes está teniendo con X de Musk, que supuestamente estaría al servicio de grupos de extrema derecha, para divulgar esa ideología extremista”, dijo Lewandowski.