El mismo juzgado que ha absuelto a la infanta Cristina condenó hace un mes a un joven a 3 años de cárcel por robar una bicicleta

La Infanta Cristina, a su llegada a los juzgados en 2016 (AP Photo/Emilio Morenatti)
La Infanta Cristina, a su llegada a los juzgados en 2016 (AP Photo/Emilio Morenatti)

Miquel Roca, abogado de la infanta Cristina, decía “levitando” (así dice que se sentía tras la absolución de su cliente) que si algo se había demostrado con la sentencia del Caso Nóos es que “está garantizada la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley”. La declaración se entiende al ver cómo la mujer de Diego Torres, en una posición similar a la de Cristina, tampoco irá a la cárcel (aunque tendrá que pagar más dinero a la justicia), pero hay detalles que la opinión pública no entiende, que tampoco nadie desde arriba se los explica y que, desde que se ha conocido la sentencia, están debilitando la imagen de la Justicia.

Prueba de ello, esta historia: hace prácticamente un mes, la misma Audiencia Provincial de Palma que ha absuelto a la infanta Cristina y ha reducido la pena solicitada por la Fiscalía Anticorrupción contra Urdangarín, condenaba a 3 años y medio de prisión a un joven de 26 años por robar una bicicleta en un domicilio de la capital balear.

En este caso en particular, el acusado vio incrementada su pena porque era reincidente ya que en 2012 ya había sido condenado por un delito de robo con fuerza. Aún así, en este primer delito, ya había pena de un año y medio de prisión. La sentencia se recurrió por parte de la defensa, pero finalmente fue confirmada por el tribunal.

“UNA MUJER QUE NO SE ENTERABA DE NADA”

Las comparaciones son delicadas, más cuando aquí se enfrenta un delito doméstico con una trama de corrupción con delitos de prevaricación, malversación, fraude o tráfico de influencias, delitos sobre los que, según el texto de la sentencia, la infanta Cristina, “desconocía de su existencia”, por lo que “no participó en su ejecución”.

Para el juez Castro, encargado de la instrucción del caso, la sentencia “da por bueno que la Cristina de Borbón no se enteraba de nada, que firmaba el autoalquiler de su palacete de Pedralbes sin saberlo, que estaba en la empresa Aizzoon siendo una ingenua”, algo con lo que no está de acuerdo, según ha contado al diario El Mundo. “Cuando la interrogué me contestó mil veces con evasivas y así es muy difícil que me pudiera convencer”, sentenciaba.