El día que Don Juan de Borbón renunció oficialmente a ser rey de España
El 14 de mayo de 1977, en un protocolario acto celebrado en el Palacio de la Zarzuela, Juan de Borbón y Battenberg, hijo de Alfonso XIII y padre, del por aquel entonces ya rey de España, Juan Carlos I, renunciaba pública y oficialmente a sus derechos dinásticos a reinar el país tal y como la ley de sucesión (anterior a la dictadura franquista) había establecido.
Se trataba de un esperado acto (llamado por algunos ‘de generosidad’) que se producía un año y medio después de que su hijo hubiese sido coronado nuevo rey tras el fallecimiento del anterior Jefe del Estado, Francisco Franco.
[Te puede interesar leer: Cuando Franco ordenó fusilar a su propio primo hermano]
Lo que algunas personas calificaban como ‘un simple paripé’ (sobre todo tras haber esperado a hacer la mencionada renuncia casi dieciocho meses después de la coronación de su hijo) era para otros un acto lleno de simbolismo, siendo alabado el conde de Barcelona por la generosidad de cara a su hijo y, sobre todo a la estabilidad del país que se encaminaba a su transición política.
Don Juan, a pesar de renunciar a ocupar el trono retendría el ostentar el mencionado título de ‘conde de Barcelona’, el cual por tradición debía corresponder al monarca o aspirante.
Ese acto de renuncia, para facilitar el reinado de su hijo, se hizo esperar, pero tras el mismo había una larga historia que había durado varias décadas.
Juan de Borbón fue el sexto hijo nacido del matrimonio formado por Alfonso XIII y Victoria Eugenia de Battenberg (de los siete que tuvieron) y, por tanto, no ocupaba el primer puesto en la línea de sucesión. Por delante tenía al primogénito del matrimonio llamado Alfonso y que renunció a heredar el trono en 1933 (una vez en el exilio con su familia) para poder contraer matrimonio con una mujer consideraba como ‘plebeya’. A continuación, en orden de nacimiento estaba Jaime, sordo de nacimiento y a quien se le obligó a renunciar a ser sucesor debido a la mencionada disfunción auditiva, le seguía Beatriz (sin derecho al trono por ser mujer), Fernando, quien falleció en el nacimiento y finalmente María Cristina, a quien también se les privó de la oportunidad de reinar o ser sucesora al trono debido a su condición de mujer.
Cuando Alfonso XIII se exilió de España en 1931, debido a la proclamación de la II República su heredero era el mencionado Alfonso, pero tras la renuncia de éste (que además falleció en 1938 a consecuencia de las heridas provocadas por un accidente automovilístico, debido a que era hemofílico) Juan pasó automáticamente al primer puesto en la línea sucesoria.
Desde el exilio se convirtió en sucesor al trono de España tras la abdicación de su padre Alfonso XIII, el 15 de enero de 1941 (quien fallecería un mes y medio después) y se quedó a la espera de que se pusiera fin al régimen recién instaurado en el país, tras haber acabado la Guerra Civil un par de años antes.
Durante el conflicto militar había intentado en vano que tras el fin de la guerra se restituyese la monarquía en el país, pero no tuvo buena sintonía ni entendimiento alguno con Franco, a pesar de haber dado, inicialmente, claros apoyos al régimen e incluso proponer reinar con un gobierno controlado por el propio dictador.
[Te puede interesar: Cuando Hitler planeó derrocar a Franco con la ayuda de un insigne falangista]
Ante los desaires de Franco, Juan de Borbón decidió hacer público un manifiesto el 19 de marzo de 1945, en el que criticaba con dureza el régimen dictatorial (el cual comparaba al Tercer Reich alemán y la Italia fascista que había imperado en los últimos años) e instaba a cederle el control del país para convertirlo en una ‘monarquía constitucional’.
Al dictador no le sentó demasiado bien las exigencias y decidió hacer oídos sordos a esas peticiones. Dos años después (el 31 de marzo de 1947) Franco le hacía saber a Juan de Borbón (a través de un intermediario, que en aquellos momento era Luis Carrero Blanco que ocupaba la subsecretaría de Presidencia) que en breve se daría a conocer la nueva Ley de Sucesión en la cual sería rey quien el dictador decidiera y no quien se erigía como ‘legítimo heredero al trono’.
Una semana después, Don Juan volvía a hacer público otro manifiesto (esta vez desde Estoril, Portugal) donde cargaba duramente contra Franco y el régimen, lo que terminó de romper las maltrechas relaciones entre ambos y lo dejaba sin ni una posibilidad de reinar en España.
Se convocó un referéndum en el que, según el escrutinio, sospechosamente el 89% de los españoles votaron a favor de la ‘Ley de Sucesión en la Jefatura del Estado’ propuesta por Franco.
No sería hasta dos décadas después, en 1969, cuando el dictador designase a Juan Carlos (hijo de Juan de Borbón) como su sucesor y, por tanto, sería nombrado rey de España tras su fallecimiento.
El deceso de produjo el 20 de noviembre de 1975 y la coronación de Juan Carlos I se realizaría dos días después.
[Post relacionado: El hombre que fue Jefe del Estado Español tras la muerte de Franco (y no era el rey Juan Carlos)]
Pero en ese brevísimo periodo de tiempo de 48 horas hubo quien creía que el sucesor designado por Franco cedería su lugar al legítimo rey (su padre, que hubiese reinado como Juan III), pero tal gesto no fue realizado por el joven heredero.
Para que Juan Carlos I fuese legítimo rey faltaba un importante detalle: la renuncia oficial al trono de España por parte de Juan de Borbón, quien acabó aceptando (no de buen grado) que al final se llevase a cabo lo establecido por el dictador Franco y no la tradición sucesoria borbónica.
No fue hasta un año y medio después (y tras muchas presiones y solicitudes) cuando, el 14 de mayo de 1977, Don Juan pronunciaría un breve discurso de apenas cinco minutos en el que expresaba publica y oficialmente que renunciaba a su derecho de sucesión a favor de su hijo Juan Carlos.
Dicho discurso podéis visionarlo en el siguiente vídeo
Fuentes de las imágenes: Hemeroteca ABC / Captura YouTube
[Te puede interesar leer: Cuando Frank Sinatra le deseó la muerte a Franco y prometió no volver nunca más a España]