El arte que logra transformar hoyos de balas en un mensaje de paz

La huella de la violencia que se sufre a diario se percibe en hoyos de balas que hacen parecer las paredes a un queso gruyere. Y el desafío más grande pasa por salvar a las futuras generaciones, para que no se vean absorbidas por los malos hábitos sin siquiera tener una oportunidad de una vida mejor.

Estos creativos de la agencia McCann México encontraron la mejor forma de hablarle a los niños en su mismo idioma: el juego. Para eso, contrataron un talentoso artista urbano que con destreza logró ver una posibilidad en medio de tantos signos de violencia.

El artista llegó al sitio con sus herramientas y de inmediato supo lo que tenía que hacer. Sin prisa pero sin pausa, comenzó a marcar con números los agujeros en paredes y persianas. Y no se trataba de un peritaje balístico ni mucho menos, sino que estaba creando una versión de calle del popular juego “unir los puntos”.

De a poco los niños fueron acercándose y se entusiasmaron con la propuesta, y a medida que unían los puntos se iba dibujando una enorme paloma. Gracias a los pinceles y los colores que aportó este artista, estos chicos se sintieron parte de la acción mientras modificaban el paisaje para dar un mensaje de paz.

Una forma alegre y llamativa de atacar el problema desde la raíz, haciendo que los niños (el futuro) no se vean contaminados por un entorno que los lleva por el mal camino como única opción. Enseñándoles que no están condenados a reproducir el presente en que viven, y otra salida es posible.

La organización The-Non Violence Project trabaja incansablemente y desde hace años por un futuro mejor, sin fines de lucro, y con la única misión de ayudar a resolver los conflictos de manera pacífica. Fue fundada en el año 1993 en Suiza, y ha logrado establecer sedes en los distintos continentes y principales focos de conflicto.

¿Qué te pareció esta forma de combatir la violencia?