El anuncio que los espectadores no han logrado prohibir (pese a recibir cientos de quejas)

Un hombre vestido con americana y corbata pasea tranquilamente por la cuidad, pero hay algo en él que llama la atención: lleva unos pantalones cortos exageradamente ceñidos y calza zapatos de tacón de mujer. De repente, se pone a bailar agitando el trasero al ritmo de Pussycat Dolls, ante la mirada estupefacta de los transeúntes.

Así es el anuncio que más quejas recibió el año pasado en el Reino Unido, según acaba de desvelar la ASA (el organismo que regula la publicidad). Nada menos que 1.513 personas pidieron que se cancelase su emisión, al considerar que su contenido es abiertamente sexual.

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Pese a esta avalancha de protestas (más del doble que el segundo anuncio con más quejas), la petición popular no ha conseguido el efecto deseado. El organismo regulador afirma que el spot puede ser considerado de mal gusto pero no es ofensivo, por lo que no ven necesario retirarlo de la circulación.

Como es normal, toda la polémica generada le ha venido de perlas al anunciante, ya que su campaña ha dado mucho que hablar. Por cierto, la intención de la pieza es dar a conocer el supermercado Moneysupermarket, aunque no quede del todo clara la relación que existe entre un comercio y un hombre moviendo el culo por la calle…

Quejas para todos los gustos

La lista desvelada por la ASA tiene en segunda posición a un anuncio de Booking en el que se hace un juego de palabras entre el nombre de la compañía y palabrota más popular en el idioma inglés. A 683 personas no les hizo gracia y presentaron una queja formal.

La medalla de bronce de esta controvertida competición recaería en PayPal, gracias a un anuncio en el que dos niños están preocupados porque sus padres no han comprado los regalos de Navidad. Eso de desvelar quién está detrás de la magia navideña no ha gustado precisamente…