Ecuador sella un canje récord de 'deuda por naturaleza' con bono para las Galápagos

FOTO DE ARCHIVO: Una tortuga nada junto a un turista en la isla San Cristóbal en la Reserva Marina de Galápagos

Por Marc Jones y Rodrigo Campos

LONDRES/NUEVA YORK (Reuters) - Ecuador selló el martes la mayor conversión de "deuda por naturaleza" del que se tiene constancia, al vender un nuevo "bono azul" que destinará al menos 12 millones de dólares anuales a la conservación de las islas Galápagos, uno de los ecosistemas más valiosos del mundo.

El ministro de Asuntos Exteriores ecuatoriano, Gustavo Manrique Miranda, afirmó que la biodiversidad es ahora una "moneda" valiosa, tras haber recomprado a finales de la semana pasada cerca de 1.600 millones de dólares de la deuda del país con un descuento cercano al 60% con la ayuda de Credit Suisse.

Los 656 millones de dólares del "Bono Galápagos", como ha sido bautizado, tendrán vigencia hasta 2041 y ofrecerán a los inversores que lo compren un "cupón" o tasa de interés del 5,645%, según sus banqueros.

Los bonos soberanos de Ecuador rinden actualmente entre el 17% y el 26%, pero el nuevo cuenta con una "garantía crediticia" de 85 millones de dólares del Banco Interamericano de Desarrollo y un seguro frente a riesgos políticos de 656 millones de dólares de la Corporación Financiera Internacional para el Desarrollo estadounidense, lo que en la práctica lo hace menos arriesgado.

Los canjes de "deuda por naturaleza" han tenido éxito en Belice, Barbados y las Seychelles en los últimos años, pero el acuerdo de Ecuador es con mucho el mayor hasta la fecha, ya que reduce la deuda del país en más de 1.000 millones de dólares una vez que se tienen en cuenta los 450 millones de dólares de gasto total en conservación.

El motor han sido las remotas Islas Galápagos, a unas 600 millas (970 kilómetros) de la costa continental de Ecuador, que inspiraron la Teoría de la Evolución de Charles Darwin.

Aunque Quito se embolsará más de 1.000 millones de dólares de ahorros procedentes de la recompra para otros fines, el principal atractivo han sido los beneficios medioambientales y la esperanza de que sirva de catalizador para otros países altamente endeudados pero ricos en naturaleza.

Giuseppe Di Carlo, director del Pew Bertarelli Ocean Legacy, uno de los grupos implicados en el acuerdo, afirmó que los 12 millones de dólares anuales destinados a la conservación, más otros 5 millones de dólares anuales que se destinarán a un fondo que debería durar décadas, constituyen una "victoria extraordinaria".

Un organismo de reciente creación supervisará periódicamente las labores de protección y los buques de pesca con redes de cerco y palangre. Los fondos para la conservación protegen ahora un radio de 322 kilómetros alrededor del archipiélago.

Se esperan resultados similares de una nueva reserva ecuatoriana de 30.000 kilómetros cuadrados creada el año pasado entre las Galápagos y la frontera marítima de Costa Rica, utilizada como corredor migratorio por tiburones, ballenas, tortugas marinas y mantarrayas.

Scott Nathan, director general de Corporación Financiera Internacional para el Desarrollo de Estados Unidos (DFC por sus siglas en inglés) afirmó que había que "estar atentos" a acuerdos similares en otros países y que el de las Galápagos se había hecho esperar, tras plantearse por primera vez hace más de tres años y haber enfrentado turbulencias políticas en el país.

(Reporte de Marc Jones; Editado en español por Aida Peláez-Fernández)