Yahoo Noticias Una dura caída, pero aún hay vida. ¿Cuál es el panorama de los quarterbacks de los Dolphins para la prueba final ante Jets?
El final del libro de cuentos estaba casi escrito para estos Dolphins que han resistido una docena de lesiones importantes y un desmayo continuo en la segunda mitad de la temporada, y aún así, fueron este domingo a Foxborough, Massachusetts, con la oportunidad de asegurar un lugar en los playoffs.
Teddy Bridgewater, el niño que nació en Miami y creció soñando con jugar para los Dolphins, fue el quarterback que sustituyó al lesionado Tua Tagovailoa y con una victoria, una sorpresa menor, pero ciertamente realista, habría terminado potencialmente con una sequía de postemporada de su equipo por siete años.
Incluso tuvo a su club a punto de lograrlo durante el tercer cuarto en el Gillette Stadium. Con un pase de touchdown a Raheem Mostert colocó a los Dolphins delante en el marcador y con un buen drive más, contando la anémica ofensiva de su rival hasta ese momento, podría haber sido suficiente.
En cambio, un tiro convirtió un escenario de ensueño en una pesadilla: un intento de Bridgewater en tercera oportunidad se convirtió en un touchdown que le dio ventaja a los Patriots cuando Kyle Dugger interceptó el ovoide y corrió para anotar.
Peor aún, Bridgewater no pudo volver a salir al terreno para tratar de redimirse porque se lesionó un dedo de la mano derecha en la jugada y nunca pudo regresar.
Con la derrota 23-21 en New England ahora Miami tiene la necesidad de una victoria y un poco de ayuda el próximo fin de semana cuando hay menos claridad que nunca sobre quién podría ser el quarterback para el último partido ante los Jets.
“Eso es algo que descubriremos en los próximos días”, comentó el entrenador de Miami Mike McDaniel cuando se le preguntó sobre la lesión de Bridgewater.
Tagovailoa está en el protocolo de conmociones cerebrales por segunda vez esta temporada y no hay un calendario para su regreso.
Los primeros indicios de la lesión de Bridgewater indican que está roto, informó ProFootballTalk.
El novato quarterback Skylar Thompson, una selección de séptima ronda en el Draft de la NFL de 2022, tampoco inspiró confianza, incluso con un el pase de touchdown que le dio al tigth end Mike Gesicki con 1:04 por jugar.
Bridgewater completó 12 de 19 pases para 161 yardas, un touchdown y una costosa intercepción.
Thompson completó 12 de 21 pases para 104 yardas, con un touchdown y una intercepción también.
El escenario más probable, salvo algún cambio con el estado de Tagovailoa, es que uno de ellos debe buscar el triunfo ante los Jets el próximo domingo en el Hard Rock Stadium y los Patriots tendrán que perder o empatar con Buffalo Bill para que los Dolphins (8-8) avancen a los playoffs y eviten uno de los colapsos más grandes en la historia de la franquicia.
“Cualquiera que comience como quarterback lo apoyaremos’’, argumentó el wide receiver Tyreek Hill.
Hasta la intercepción, Bridgewater estaba haciendo el trabajo que necesitaba Miami.
Después de que la serie inicial de los Dolphins se estancó y terminó con un despeje, Bridgewater lideró a Miami en un conteo de 13 jugadas y 75 yardas que culminaron con un touchdown y el empate 7-7 en la pizarra.
Bridgewater daba seguridad en lo que venía haciendo y Miami entró en el rango de gol de campo cuando este convirtió un tercer intento crucial con un pase de 25 yardas al running back Raheem Mostert, pero el kicker Jason Sanders falló el intento de 51 yardas.
En la segunda mitad, Bridgewater incluso le dio a los Dolphins su única ventaja con un pase de touchdown de dos yardas a Mostert.
Los Dolphins estaban arriba 14-7 al comienzo del tercer cuarto y luego 14-10 con el balón antes del error de Bridgewater.
“Estábamos moviendo la pelota arriba y abajo en el terreno’’, acotó Hill.
Con Thompson, la ofensiva se estancó aunque Hill asumió la culpa por la única intercepción del joven quarterback que golpeó al receptor en las manos.
Miami solo tuvo 25 yardas en las primeras 10 jugadas de Thompson antes de que los Patriots (8-8) se fueron encima 23-14 con 4:37 por jugar.
La intercepción de Bridgewater, que puso fin a su labor y permitió que New England jugara con ventaja, fue el momento en que cambió el panorama.
Después de correr en 24 de sus 50 jugadas con Bridgewater, los Dolphins apenas lo hicieron tres de sus últimas 19 veces y una de ellas la hizo el propio Thompson.
“Es la situación del juego”, proclamó Wilson.
“Suceden cosas inesperadas o que no esperas y tienes que modificar ese plan de juego para mantener el ritmo del partido. Eso es lo que sucedió y creo que no pudimos levantarnos”.
La capacidad de Miami para manejar la adversidad se ha puesto a prueba durante todo el último mes y ahora, con una victoria necesaria para evitar el colapso, se someterá a la prueba definitiva.
Los tres quarterbacks han sido titulares este año, pero los Dolphins solo han ganado con Tagovailoa y Thompson, quien ni siquiera estaba garantizado para ser parte de la nómina en el campo de entrenamiento, podría ser el favorito para ese crucial partido ante los Jets.
“Voy a dar todo lo que tengo y voy a luchar para ganar”, anunció Thompson.
“Seguiré trabajando, me apegaré a lo que he estado haciendo y simplemente confiaré en el proceso. Eso es lo que tiene que hacer este equipo. Sé que es frustrante. Es difícil, pero tenemos que tener un recuerdo corto de esto, regresar y estar listos para terminar en alto la temporada regular la próxima semana en casa”.
