Las duchas con yodo pueden provocar infecciones: es falso que curen el Ovario Poliquístico

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Las duchas vaginales pueden ser dañinas para la salud, aunque una publicación en Instagram –que ya ha alcanzado los 7 mil likes–  asegura que colocarse yodo en la vagina reduce la producción de estrógeno, cura el Síndrome de Ovario Poliquístico (SOP) y reduce la aparición de miomas.

Instituciones como la Secretaría de Salud, Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos(CDC) y la Organización Mundial de la Salud, advierten que colocarse sustancias en la vagina sin las indicaciones y supervisión médica adecuada provoca infecciones que pueden llegar a ser graves y aumenta la posibilidad de contraer enfermedades de transmisión sexual (ETS). Por lo tanto, la información en el video es falsa y seguirla podría tener repercusiones negativas en la salud.

El Síndrome de Ovario Poliquístico afecta entre el 8% y el 13% de las mujeres en edad reproductiva, de acuerdo con las cifras de la OMS, sin embargo también estiman que el 70% de las mujeres que lo padecen no están diagnosticadas. Este síndrome provoca desequilibrios hormonales, menstruaciones irregulares, niveles excesivos de andrógenos y quistes en los ovarios. Si has sido diagnosticada con Síndrome de Ovario Poliquístico, la indicación de instituciones de salud como la OMS y la Clínica Mayo, es seguir las instrucciones de tu médico y no automedicarse.

De acuerdo con la Clínica Mayo, los tratamientos son variados y pueden incluir cambios en la alimentación, incrementos de actividad física, terapias con progestina y píldoras anticonceptivas. También para quienes están intentando quedar embarazadas los médicos pueden recetar reguladores hormonales como clomifeno, letrozol y metformina.

La publicación viral explica que se debe de colocar yodo lugol, llamado así por el reactivo en el que se estabiliza el yodo, en el interior de la vagina con un hisopo tres veces por semana para curar esta afectación. Sin embargo, estudios como este de la Escuela de Salud Pública Johns Hopkins Bloomberg y este de la Escuela de Medicina Mount Sinai en Nueva York, comprobaron que practicar duchas vaginales con sustancias como yodo, provoca efectos adversos de salud, entre ellos infecciones.

De acuerdo con la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud, una infección “ocurre cuando microorganismos (bacterias, hongos o parásitos) que no forman parte habitual de la flora vaginal ingresan, lo que provoca un desequilibrio entre las bacterias “buenas” y las “dañinas”. 

En caso de una infección vaginal las medidas preventivas recomendadas por la Secretaría de Salud, son las siguientes:

Lavar el área vaginal con agua y jabón neutro.

Evitar el uso de ropa demasiado ajustadas y sintéticas (lycra o nylon), debido a que favorecen la humedad.

No utilizar duchas vaginales, aerosoles o toallitas higiénicas perfumadas.

En conclusión, es falso que las duchas vaginales de yodo curan el Síndrome de Ovario Poliquístico. Introducir sustancias como yodo o bicarbonato de sodio, cambian el ecosistema bacteriano de la vagina, provocando un desequilibrio y creando un ambiente propenso a infecciones. Estudios médicos han demostrado que estas prácticas incrementan el riesgo de contraer una ETS o una vaginosis bacteriana.