Los Dolphins pescan a río revuelto y se ubican al tope de su conferencia

Aprovechando los altibajos de los poderosos Bengals de Cincinnati y Buffalo Bills, los Dolphins de Miami no solo se han encumbrado en la División Este, sino que se encuentran al tope de la Conferencia Este, al lado del campeón reinante de la NFL, los Chiefs de Kansas City.

Cuando se lleva jugado más de un cuarto de la temporada regular, el escuadrón surfloridano marcha con un récord 4-1, al igual que los Chiefs, pero con mejor producción ofensiva y mayor hermetismo en la defensiva.

Los Bengals son subcampeones de la conferencia y los Bills han tomado la dictadura de la división luego que Tom Brady dejara los Patriots de Nueva Inglaterra al final de la campaña del 2019.

Con 2,568 yardas, los Dolphins son el equipo más explosivo de la NFL en ataque.

Esa producción se explica por la calidad de los hombres que integran su ofensiva como los wide receivers Tyreek Hill y Jaylen Waddle y los running backs De’Von Achane y Raheem Mostert.

“Nos divertimos muchísimo”, explicó Hill.

“Y demostramos que no somos un equipo que depende de un solo jugador. En toda la cancha tenemos hombres que pueden hacer la diferencia. Y disfruto todos los días con ser el hombre más rápido del grupo”.

El entrenador de los Dolphins, Mike McDaniel, también expresó su orgullo de ser parte de esta ofensiva.

“Los números hablan de lo que nuestro grupo es capaz de lograr y uno se siente honrado de pertenecer a él”, expresó el estratega.

“Y es mejor que continuemos así porque las exigencias van a aumentar conforme vengan los próximos compromisos. Cualquier cosa que pasa en cinco semanas no es definitivo”.

Luego de la rotunda caída 48-20 contra los Bills hace dos semanas, los Dolphins reaccionaron y vencieron 31-16 a los Giants de Nueva York, el domingo último en el Hard Rock Stadium.

Ayudó enormemente a los de casa la reaparición del center Connor Williams, quien estabilizó la línea ofensiva y dio tiempo al quarterback Tua Tagovailoa, permitió que los wide receivers corrieran su ruta y que los acarreadores encontraran los huecos en la ofensiva rival.

“Connor Williams hizo un trabajo fenomenal”, afirmó McDaniel.

“Tuvo enorme impacto en el partido. Su mayor habilidad es en la protección al quarterback”.

Contra los Giants, los Dolphins volvieron a ser el equipo que barrió en los tres primeros partidos, al punto que muchos se atrevieron a hablar por adelantado del Super Bowl.

“Durante toda la semana estuvimos hablando sobre la necesidad de rehabilitarnos”, declaró el linebaker Andrew van Ginkel.

“Cuando te hacen 48 puntos te dejan un mal sabor en la boca. Esta vez trabajamos como una unidad”.

Lo interesante de los Dolphins es que se trata de un equipo joven con enorme potencial. Una de las sorpresas más agradables de la franquicia en esta campaña es el novato Achane, quien lleva 460 yardas y cinco touchdowns en cinco partidos con un espectacular promedio de 12.1 yardas por acarreo.

“Uno no espera esto tan pronto”, afirmó el corredor. “Hay que darle el crédito a la línea ofensiva. Ellos me facilitan las cosas. Solo espero poder mantener este ritmo”.

La única preocupación es que Achane terminó el choque contra los Giants con una dolencia en la rodilla y luego de conocer los resultados de las pruebas se determinará el alcance de su lesión.

El próximo domingo, los Dolphins deberán seguir su carrera ascendente porque recibirán a los Panthers de Carolina (0-5), que vienen de caer 42-24 contra los Lions de Detroit