Más de una docena de activistas climáticos detenidos por pintar de naranja la puerta de Brandemburgo

Activistas climáticos alemanes del grupo Última Generación realizaron una protesta en la Puerta de Brandemburgo de Berlín, rociando la estructura con pintura naranja para urgir al gobierno alemán a tomar medidas más contundentes contra el cambio climático.

Según un portavoz de la policía las seis columnas se vieron afectadas.

Sus demandas incluyen la eliminación de los combustibles fósiles para 2030 y medidas inmediatas, como imponer un límite de velocidad de 100 km/h en autopistas. La policía detuvo a 14 activistas, mientras que el alcalde de Berlín condenó las acciones diciendo que esas tácticas van más allá de las formas legítimas de protesta.

Los activistas regaron también de pintura en el suelo de la Pariser Platz, al lado de la Puerta de Brandemburgo.

El grupo Última Generación se ha caracterizado por formas de protesta extremas que han incluido bloqueos de tráfico y ha desplazado del foco de la atención pública a las manifestaciones de Fridays for Future.

"Seguiremos con nuestras protestas hasta que haya un giro en la política contra la crisis climática. A más tardar en 2030 tenemos que abandonar el carbón, el petróleo y el gas" dijo la portavoz del grupo, Marion Fabian.

El grupo anunció que la próxima semana volverá a haber bloqueos en las calles de Berlín. Los activistas aseguran haber recolectado donativos por valor de 600 000 euros para sus acciones de protesta.