Murátov dedica el premio a Politkóvskaya pero se lo hubiera dado a Navalni

Moscú, 8 oct (EFE).- El director del periódico independiente ruso "Nóvaya Gazeta", Dmitri Murátov, galardonado con el Nobel de la Paz, dedicó hoy el premio a la asesinada periodista Anna Politkóvskaya, aunque él se lo hubiera dado al encarcelado opositor Alexéi Navalni.

"Yo no soy el beneficiario directo del premio. Es un reconocimiento a los compañeros caídos que dieron su vida por la profesión", dijo Murátov en su primera comparecencia ante la prensa frente a la redacción de su periódico en Moscú.

Murátov, que ha dirigido "Nóvaya Gazeta" durante casi un cuarto de siglo, destacó que, "como el Nobel no se da de manera póstuma (...) ellos decidieron que lo recibiera Ana a través de un viejo amigo".

Repitió ante los numerosos reporteros congregados los nombres de los cinco periodistas -Ígor Dómnikov, Yuri Shekochijin, Anna Politkóvskaya, Asatasia Baburova y Natalia Estemírov-, y del abogado del periódico, Stas Markélov, asesinados desde su fundación en 1993.

"Se lo dedico a los que cayeron, a los fundadores y a la gente joven que trabaja en la tercera planta de la redacción", subrayó.

Al mismo tiempo, reconoció que, "si él hubiera sido el comité que eligió al Nobel de la Paz, habría votado por el que lideraba las apuestas", en alusión a Navalni, que cumple dos años y medio de prisión.

"Pero considero que esa persona tiene todo por delante. Navalni tiene un gran futuro en Oslo", dijo.

Murátov negó, en todo caso, que se plantee renunciar al premio. "No soy (Borís) Pasternak", afirmó, en alusión al gran poeta ruso que rechazó el Nobel de Literatura en 1958 bajo presiones de las autoridades soviéticas.

Denunció la censura y la persecución de los nuevos medios de comunicación digitales, y adelantó que "parte del premio" se dedicará a apoyar a la prensa independiente rusa.

Murátov calificó el periodismo como "la mejor profesión del mundo" y consideró llamativo que, mientras el Gobierno declara "indeseables" y "agentes extranjeros" a muchos medios -hoy mismo incluyó a nueve más- hay colas para hacer prácticas en "Nóvaya Gazeta".

"Me pregunto por qué y para qué la gente está dispuesta a arriesgarse. Quizás esos reporteros jóvenes quieren estar más cerca para que la vida cambie a mejor. Lo que puedo decir es que no doy consejos. Que vengan y vean cómo trabajamos", apuntó.

Y mencionó su frase preferida, la del legendario fotógrafo Robert Cappa: "Si una foto no es suficientemente buena es porque no estaban suficientemente cerca".

También se beneficiarán del premio los niños que sufren enfermedades graves y organizaciones caritativas, según explicó.

Murátov se convirtió hoy en el primer ruso que recibe el Nobel de la Paz desde la caída de la Unión Soviética en 1991.

Antes lo recibieron el disidente y creador de la bomba de hidrógeno Andréi Sájarov (1975) y el último líder de la URSS, Mijaíl Gorbachov, patrocinador y durante muchos años accionista de "Nóvaya Gazeta".

(c) Agencia EFE