Ex diplomático de EEUU se declarará culpable de actuar como agente secreto del gobierno cubano

El ex diplomático estadounidense Víctor Manuel Rocha dijo el jueves en un tribunal federal que él aceptó declararse culpable de ser un agente ilegal del gobierno cubano mientras defraudaba a Estados Unidos en un acuerdo de culpabilidad que se dará a conocer el 12 de abril, cuando será sentenciado.

El abogado defensor de Rocha y los fiscales federales reconocieron el acuerdo de culpabilidad en una audiencia en el tribunal federal de Miami que inicialmente iba a tratar sobre el manejo de documentos clasificados en su caso, pero que rápidamente se centró en sellar el destino del acusado.

Rocha, quien fue arrestado a principios de diciembre y se declaró inocente de un encausamiento de 15 cargos a mediados de febrero, dijo a la jueza de distrito Beth Bloom que entendía los términos y que estaba dispuesto a cambiar su declaración original a culpable.

“Señoría, estoy de acuerdo”, dijo Rocha, de 73 años, a la jueza.

Los fiscales Jonathan Stratton y John Shipley y la abogada defensora Jacqueline Arango dijeron que llegaron a un acuerdo con una sentencia predeterminada para sus dos delitos: conspiración para ser un agente ilegal y actuar como agente ilegal de un gobierno extranjero, que conllevan hasta cinco y 10 años, respectivamente, para un posible total de 15 años de prisión. Ambas partes, sin embargo, no revelaron la pena de prisión recomendada conjuntamente.

En la breve audiencia del jueves, Arango calificó la sentencia recomendada de “justa y razonable”, sin revelar detalles.

Bloom dijo que aún ordenaría un informe de investigación previo a la sentencia y lo usaría como guía para imponer el castigo a Rocha en abril.

Arrestado en Miami

Rocha, que estaba esposado y vestía un uniforme caqui de detención, es ex embajador de Estados Unidos en Bolivia. Pasó dos décadas en el Departamento de Estado estadounidense hasta que dejó el servicio diplomático en 2002, y luego trabajó en el sector privado durante dos décadas más antes de ser arrestado en Miami a principios de diciembre.

Rocha está acusado de violar la Ley de Registro de Agentes Extranjeros, que exige a quienes trabajan bajo el control de un gobierno extranjero que lo notifiquen al Departamento de Justicia de Estados Unidos. Rocha enfrenta cargos de conspiración, actuar como agente extranjero, fraude electrónico y realizar declaraciones falsas para obtener y usar un pasaporte estadounidense, según el encausamiento. Todos los cargos del encausamiento, salvo dos, serán desestimados cuando se declare culpable y se dicte sentencia en abril, dijeron los fiscales.

Stratton, el fiscal, dijo que ambas partes han “ultimado los documentos” y “un acuerdo sobre la sentencia que se impondrá”, sin revelar detalles concretos. Stratton hizo esta revelación al tiempo que informaba a la jueza de que no se revelarían documentos clasificados a la defensa antes del juicio, fijado para el 25 de marzo.

El inusual retraso de la comparecencia de Rocha hasta mediados de febrero hizo pensar a los expertos en derecho que su final sería un acuerdo con la fiscalía.

Desde su arresto, Rocha ha permanecido en el centro de detención federal, tras acceder a las exigencias de los fiscales de que se le retuviera antes del juicio. Alegaron que es un peligro para la comunidad y que existe riesgo de fuga.

Trasferencias de condominios en Brickell City Centre

Tras ser acusado en diciembre, Rocha transfirió las escrituras de cuatro lujosos condominios en el Brickell City Centre que compró con su esposa, Karla Wittkop Rocha, exclusivamente a ella, según los registros presentados el 8 de febrero en la oficina del secretario del Condado Miami-Dade. Los documentos se firmaron originalmente en enero.

Las transferencias de escritura de renuncia fueron reportadas por primera vez por la estación local de habla hispana América TV.

Las dos unidades de los Rocha en la torre Rise y las dos unidades en la torre Reach, situadas en el Brickell City Centre, en el downtown de Miami, están valoradas en más de $4 millones en total, según el sitio web inmobiliario Zillow.

Arango, la abogada de Miami del bufete Akerman que representa a Rocha y que trabajó durante muchos años como fiscal federal, firmó las transferencias de las escrituras como testigo. Cuando se le preguntó después de la comparecencia si las transferencias de las escrituras podían ser fraudulentas, Arango se negó a responder.

Según el encausamiento federal, si Rocha es declarado culpable, el gobierno confiscaría cualquier propiedad “derivada de cualquier producto obtenido, directa o indirectamente de la comisión de dicho delito”.

“Si hizo eso para impedir cualquier intento del gobierno de quitarle su interés en la propiedad si es hallado culpable, no creo que tenga éxito porque no puede transferir su interés equitativo en la propiedad porque está casado”, dijo Nelson Rodríguez Varela, un abogado de Miami especializado en derecho penal e inmobiliario,

La gente que conocía a Rocha lo describía como alguien preocupado por el dinero. Decía a sus conocidos que había dejado el gobierno federal para buscar puestos mejor pagados en el sector privado. Trabajó como asesor principal de negocios en el bufete de abogados de Miami Foley & Lardner, vicepresidente sénior de Xcoal, una empresa exportadora de carbón, y vicepresidente sénior para América Latina de la empresa canadiense Barrick Gold Corp.

Aunque Rocha no fue acusado de espionaje, el Departamento de Justicia de Estados Unidos lo acusó de trabajar como agente encubierto de la Dirección General de Inteligencia de Cuba. En el encausamiento se le acusa de usar su cargo para obtener información sensible y transmitirla a Cuba, aunque no se dan detalles sobre el daño que pudo causar o el tipo de secretos que reveló. Un documento adjunto al encausamiento ha sido sellado por el tribunal.

El caso causó conmoción en las comunidades diplomática y de inteligencia, donde Rocha gozaba de gran prestigio como experto en Cuba y en asuntos latinoamericanos. En los círculos de Miami, era conocido como un ferviente republicano y admirador del ex presidente Donald. Trump, aunque el encausamiento dice que Rocha fue grabado por un agente encubierto del FBI afirmando que su personalidad “derechista” era parte de su tapadera como agente cubano.