Los diez años de una “angustiante espera” entre los familiares de los desaparecidos en el misterioso vuelo MH370

Una mujer escribe un mensaje en un panel durante un acto para conmemorar los 10 años de la desaparición del vuelo MH370 de Malaysia Airlines, en un centro comercial en Subang Jaya, en las afueras de Kuala Lumpur, Malasia
Una mujer escribe un mensaje en un panel durante un acto para conmemorar los 10 años de la desaparición del vuelo MH370 de Malaysia Airlines, en un centro comercial en Subang Jaya, en las afueras de Kuala Lumpur, Malasia - Créditos: @FL Wong

KUALA LUMPUR.- En la última década, Grace Subathirai Nathan se licenció en derecho, se casó, abrió un estudio y tuvo dos hijos. Pero una parte de ella está congelada en el tiempo, todavía en negación por la pérdida de su madre en un avión de Malaysia Airlines desaparecido en 2014, el vuelo MH370.

Como ella, son muchos los familiares que aguardan respuestas aun tantos años después, y esta semana se abrió una nueva ventana a la ilusión con la probable reapertura de la investigación, tras un ofrecimiento de la empresa robótica submarina Ocean Infinity al gobierno malayo.

El vuelo partió de Kuala Lumpur con 239 personas a bordo el 8 de marzo, pero desapareció de los radares poco después y nunca llegó a Pekín, su destino, para transformarse en uno de los mayores enigmas de la aviación. Los investigadores afirman que alguien desconectó deliberadamente el sistema de comunicaciones del avión y lo desvió de su ruta.

Un póster con los tripulantes del vuelo MH370 puesto para acompañar una oración colectiva en una escuela de Petaling Jaya (Archivo)
Un póster con los tripulantes del vuelo MH370 puesto para acompañar una oración colectiva en una escuela de Petaling Jaya (Archivo) - Créditos: @MOHD RASFAN

Grace, abogada penalista, se convirtió en uno de los rostros clave de Voice 370, un grupo de apoyo a los familiares más cercanos, al canalizar su dolor para mantener viva la búsqueda de respuestas en la desaparición del vuelo MH370 de Boeing que desgarró a las familias.

“Progresé en mi carrera, en mi vida familiar... pero sigo intentando presionar para que continúe la búsqueda del MH370. Intento presionar para que se encuentre el avión, así que en ese sentido no he seguido adelante”, dijo Grace en una entrevista. “Lógicamente, en mi cerebro sé que probablemente nunca la volveré a ver, pero no he sido capaz de aceptarlo del todo, y creo que emocionalmente, hay una brecha que no se ha superado debido a la falta de cierre”.

Según los datos obtenidos por satélite, se cree que el avión se precipitó en una zona remota del sur del océano Índico, pero la búsqueda masiva fue infructuosa. No se encontraron restos ni cuerpos, salvo presuntos fragmentos del avión que llegaron a la costa africana y a islas del océano Índico.

Las familias de las personas que viajaban a bordo, muchas de ellas procedentes de China, encontraron diferentes formas de sobrellevar el dolor, pero una cosa es constante: su misión de justicia y respuestas. El dolor sigue atormentando a algunas familias que se muestran escépticas ante las teorías sobre el destino del avión y se aferran a la esperanza de que sus seres queridos puedan regresar.

Al igual que Grace, el agricultor chino Li Eryou tampoco ha celebrado un funeral o servicio fúnebre por su único hijo. Tiene una pizarra en casa en la que cuenta cada día que pasa desde la desaparición del MH370. Li Yanlin, de 27 años, tenía una prometedora carrera como ingeniero en una empresa de telecomunicaciones que se vio truncada. El dolor aparece con facilidad, desencadenado por un sonido, un objeto, incluso una flor, dijo Li.

“Todos estos años he ido a la deriva en la vida como un fantasma”, dijo Li en una entrevista en la ciudad china de Handan. “Cuando me reúno con mis amigos y familiares, tengo que poner una sonrisa. Por la noche, puedo ser fiel a mí mismo. Cuando todo está tranquilo en plena noche, lloro sin que la gente se entere”.

Recortes amarillentos

Li se ha trasladado recientemente a vivir con su hija debido a su mal estado de salud. En su antigua residencia, aún cuelgan de la pared recortes de diario del avión desaparecido que se amarillearon con el tiempo y la habitación de su hijo se mantiene prácticamente intacta. “Creo que mi hijo sigue en el vuelo, que sigue por aquí. O está viviendo en una isla remota como Robinson Crusoe”, dijo Li, en referencia al libro favorito de su hijo.

Li y su esposa no suelen viajar, pero han hecho varios viajes a Malasia en busca de respuestas y a Madagascar, donde han aparecido restos del avión en las playas. La falta de respuestas no hace sino agravar su agonía.

Forman parte de las cerca de 40 familias chinas que han rechazado un pequeño pago compasivo de la aerolínea. Han demandado a cinco entidades, entre ellas Malaysia Airlines, Boeing y el fabricante de motores aeronáuticos Rolls-Royce, en busca de mayores indemnizaciones y respuestas sobre quién debe responder. Las vistas judiciales comenzaron en Pekín en noviembre y el veredicto podría tardar meses.

Un evento organizado por familiares de los pasajeros para marcar el décimo aniversario de la caída del vuelo MH370, en Subang Java
Un evento organizado por familiares de los pasajeros para marcar el décimo aniversario de la caída del vuelo MH370, en Subang Java - Créditos: @ARIF KARTONO

Cuando se cumplieron 100 días de la desaparición del avión, Li escribió su primer poema en el que expresaba su añoranza por su hijo. Desde entonces, escribió unos 2000, que le han ayudado a sobrellevar el dolor.

Ahora hay nuevas esperanzas de cerrar el caso. Durante un acto conmemorativo en Kuala Lumpur el domingo pasado, el gobierno de Malasia dijo que considerará una propuesta para una nueva búsqueda por parte de la empresa estadounidense de robótica marina Ocean Infinity, que llevó a cabo una búsqueda “sin hallazgo no hay honorarios” en 2018.

El primer ministro malasio, Anwar Ibrahim, dijo durante un discurso en la Universidad Nacional de Australia en Canberra que se inclinaba a apoyar la reapertura de una investigación sobre lo que le sucedió al MH370, pero que la decisión debe basarse en hechos convincentes.

Si las pruebas son creíbles, dijo Ibrahim, pedirá la aprobación del gabinete para firmar un nuevo contrato que reanude la búsqueda.

Mejor tecnología

El CEO de Ocean Infinity, Oliver Punkett, dijo al New Straits Times que la compañía había mejorado su tecnología desde 2018. “Ahora nos sentimos en condiciones de poder volver a la búsqueda del MH370″, dijo Punkett. “Hemos estado trabajando con muchos expertos, algunos fuera de Ocean Infinity, para continuar analizando los datos con la esperanza de reducir el área de búsqueda a una en la que el éxito se vuelva potencialmente alcanzable”.

“Una vez que sepamos lo que ocurrió, sólo entonces podrá comenzar una verdadera forma de curación... hasta que no se responda a esas preguntas, por mucho que intentes seguir adelante o por mucho que intentes cerrar ese capítulo, nunca desaparecerá”, dijo Grace.

En un principio, su madre no iba a viajar en ese vuelo. Iba a volar una semana antes, pero retrasó su viaje para cuidar de la abuela enferma de Grace, que murió meses después de la desaparición del avión.

Grace Nathan, familiar de uno de los desaparecidos en el vuelo MH370, en Damansara, Selangor. (Arif Kartono / AFP)
Grace Nathan, familiar de uno de los desaparecidos en el vuelo MH370, en Damansara, Selangor. (Arif Kartono / AFP) - Créditos: @ARIF KARTONO

“Quiero que todo el mundo sepa que el vuelo MH370 no es historia. Es el futuro de la seguridad aérea, porque hasta que no encontremos el MH370, no podremos evitar que algo así vuelva a ocurrir”, declaró Grace.

Jacquita Gomes, cuyo marido Patrick era supervisor de vuelo en el avión, dijo que se escribieron 126 libros y se rodaron numerosos documentales sobre el MH370, pero que gran parte de ellos han sido especulaciones sin respuestas reales.

“Mantenemos vivo su recuerdo y hablamos constantemente de él. Puede que se haya ido, pero no olvidado, y nunca lo será, así que instamos a que continúe la búsqueda”, afirmó. “Tenemos que asegurarnos de que los vuelos vuelvan a ser seguros. No olvidemos a todos los que iban a bordo”.

Eileen NG