Descubren una terrible característica del plástico que lo hace aún más peligroso

Botellas de plástico esperando su reciclado en una planta de procesamiento de residuos. (Imagen gratuita vista en Pixabay).
Botellas de plástico esperando su reciclado en una planta de procesamiento de residuos. (Imagen gratuita vista en Pixabay).

Es un hecho, el siglo XX vio nacer la era del plástico, un material barato y resistente que fabricamos en cantidades ingentes desde hace 70 años, y que para nuestra desgracia se ha convertido en un enorme problema medioambiental que ha inundado nuestros océanos con su perniciosa presencia. Con el paso del tiempo, el plástico que flota en los océanos se descompone en pequeñas esferas que acaban siendo ingeridas por los peces. A medida que se asciende por la cadena trófica, hay más probabilidades de que estas minúsculas bolas, terminen por llegar a nuestro organismo. Y no tenemos ni idea de los efectos que esto puede tener en nuestra salud.

¿Pero sabéis qué? Parece que el plástico presenta también otra amenaza para el planeta con la que inicialmente no contábamos. Un equipo de investigadores del Centro de Oceanografía Microbiana de la Universidad de Hawái acaba de publicar en PLOs ONE un trabajo en el que hablan de un descubrimiento inesperado: cuando está en contacto con la luz del sol, el plástico libera gases que contribuyen potencialmente al calentamiento del planeta a través del efecto invernadero. Entre esos gases figuran el metano y el etileno.

En plena ola de calor en España el descubrimiento provoca una preocupación considerable, ya que parece obvio que los veranos en el hemisferio norte están haciéndose más cálidos y húmedos, lo cual concuerda con los efectos predichos por el cambio climático. Es más, en un informe publicado esta misma semana en el Reino Unido, las autoridades británicas advierten que las muertes por golpes de calor se cuadruplicarán para la década de 2080 si no se hace nada para atajar las emisiones de gases invernadero.

En palabras de uno de los autores del trabajo, David Karl: “considerando las cantidades de plástico que bañan nuestras costas, nuestro descubrimiento aporta más pruebas que indican que necesitamos detener la producción de plástico, especialmente aquel que es de un solo uso”.

Louise Edge, veterano activista de Greenpeace, ha afirmado: “La ONU ha descrito la contaminación de los océanos por plástico como una ‘bomba tóxica de relojería’ y este nuevo estudio sugiere que cuando este material se degrada al sol, emite gases de efecto invernadero que son dañinos para nuestra clima. Este es otro ejemplo de por qué hacen falta más estudios científicos sobre los riesgos totales que representa el plástico para el medio ambiente”.

Para añadir aún más preocupaciones a los daños que provoca el plástico, los investigadores descubrieron que la tasa de emisión de los gases de los pellets vírgenes de plástico se incrementó durante el experimento (que duró 212 días) y que los desechos de polietileno de baja densidad (o LDPE) encontrados en el océano también emitieron gases de efecto invernadero cuando se les expuso a la luz solar.

Para más INRI, una vez que la radiación solar inicia esta reacción, la emisión de estos gases invernadero continúa incluso en la oscuridad.

Sarah-Jeanne Royer, investigadora principal de este trabajo, comentó: “atribuimos el aumento en la emisión de gases de efecto invernadero (a partir de los pellets vírgenes) que observamos con el paso del tiempo, a la foto-degradación del plástico y también a la formación de una capa superficial marcada con fracturas, microfisuras y hoyos.”

“Con el tiempo, estos defectos incrementan el área superficial disponible (lo cual genera una mayor degradación fotoquímica) y por lo tanto contribuyen a una aceleración de la tasa de producción de gas”, aclaró.

Sin duda pésimas noticias. Por el bien de nuestros hijos, espero que aún estemos a tiempo de revertir el problema.

Me enteré leyendo Inews.co.uk.