DeSantis y los republicanos de Florida celebran victoria anticipada a las elecciones de noviembre

Los republicanos de Florida están dando una vuelta de la victoria anticipada.

Con una gran ventaja en el registro de votantes y un control total sobre el gobierno estatal, el Partido Republicano de Florida reunió a donantes y partidarios adinerados en el Seminole Hard Rock Hotel and Casino Hollywood el sábado por la noche. La reunión, denominada “cena de la victoria”, sirvió como una celebración anticipada de lo que los republicanos de Florida predicen que será una elección histórica en noviembre, cuando el expresidente Donald Trump se enfrentará a la vicepresidenta Kamala Harris.

Florida, que en su día fue el estado más disputado en el que republicanos y demócratas luchaban con uñas y dientes por los cargos públicos en todos los niveles, ha dado un giro hacia la derecha en los últimos años. La cena del sábado, en la que pronunciaron discursos pesos pesados republicanos como el gobernador Ron DeSantis y el senador estadounidense Rick Scott, se centró más en la contienda presidencial que en la necesidad de que el Partido Republicano consiga victorias en las elecciones de menor nivel.

“La victoria está en nuestras manos. El futuro de Estados Unidos está en nuestras manos. El destino de Estados Unidos está bajo nuestro control y la prosperidad de Estados Unidos está en nuestros corazones y almas”, dijo Kimberly Guilfoyle, una de las principales defensoras de la campaña de Trump, quien estaba comprometida con el hijo mayor del expresidente, Donald Trump Jr.

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, quien se postuló sin éxito para la nominación presidencial republicana y ahora busca impulsar la candidatura de Trump, promocionó a Florida como una “banda de batalla para los candidatos republicanos”, argumentando que la ventaja de casi 1 millón de personas registradas para votar del Partido Republicano sobre los demócratas hace que el estado sea una victoria fácil para su partido.

“En las elecciones presidenciales, estaríamos en una situación muy delicada en lo que respecta al estado de Florida”, dijo DeSantis. “Ahora tenemos más de un millón de republicanos registrados que los demócratas”.

En un momento dado de la noche, la fiscal general del estado, Ashley Moody, se autodenominó la “anti-Kamala” y presentó a Florida como un baluarte contra la candidatura de la vicepresidenta.

Si bien DeSantis expresó poca preocupación sobre el resultado final de la carrera presidencial, utilizó la mayor parte de su discurso para atacar dos enmiendas constitucionales propuestas que estarán en la boleta electoral de Florida en noviembre: una que legalizaría el uso recreativo de la marihuana y otra que salvaguardaría el acceso al aborto hasta la viabilidad del feto o si se considera médicamente necesario.

DeSantis calificó ambas propuestas como amenazas al tejido político y moral de Florida. Dijo que la propuesta sobre la marihuana, llamada Enmienda 3, sería en la práctica una concesión a las corporaciones poderosas. Dijo que la otra propuesta, la Enmienda 4, que anularía en la práctica la prohibición del aborto a las seis semanas de embarazo en Florida y ampliaría el acceso al procedimiento, era demasiado amplia e instó incluso a los defensores del derecho al aborto a oponerse a ella.

“Esta es una mala enmienda”, dijo DeSantis. “No debería estar en la constitución. Y eso es cierto si eres pro vida, pero honestamente, incluso si no lo eres”.

Esas dos propuestas pueden ser las mayores preocupaciones de los republicanos en Florida este año. Las encuestas muestran que ambas cuentan con el apoyo de la mayoría de los votantes. Sin embargo, hay razones para que los republicanos de Florida se sientan confiados. En los últimos años, los republicanos han acumulado una gran ventaja en el registro de votantes sobre los demócratas en el estado y tienen un control prácticamente total sobre el gobierno estatal.

Aun así, el sábado los republicanos intentaron evitar la complacencia entre sus votantes. Evan Power, el presidente del Partido Republicano estatal, instó a los republicanos a “correr como si estuviéramos 10 puntos por detrás”. DeSantis advirtió a sus partidarios que no creyeran que las victorias del Partido Republicano en Florida son un hecho consumado.

“No den esto por sentado”, dijo DeSantis. “Con la misma rapidez con la que hemos avanzado en esta dirección, pueden ver cómo se desmorona”.