DeSantis, la industria del cáñamo y el Partido Republicano forman alianza para aniquilar esfuerzo de legalizar la marihuana en la Florida

El gobernador Ron DeSantis, el Partido Republicano del estado y la floreciente industria del cáñamo de la Florida están uniendo fuerzas para derrotar una propuesta en la boleta de este noviembre para legalizar la marihuana recreativa.

A principios de junio, DeSantis vetó un proyecto de ley que habría sacado del negocio a grandes franjas de la industria del cáñamo, en parte, al hacer ilegales los cannabinoides clave. Y, ahora, la industria está contribuyendo tanto al comité político de DeSantis como al Partido Republicano de la Florida para trabajar contra la propuesta de marihuana recreativa que está respaldada en gran medida por la empresa de marihuana más grande del estado y del país, Trulieve.

Pero la alianza es menos un esfuerzo coordinado y más una ocurrencia natural, dijo J.D. McCormick, presidente de uno de los grupos de cáñamo más grandes del estado, Florida Healthy Alternatives Association.

“Sin el gobernador DeSantis, la industria del cáñamo ahora mismo sería ilegal en la Florida. Y luego Trulieve pasaría a desarrollar un monopolio” si se aprobara la enmienda sobre la marihuana, dijo McCormick. “Es solo el curso natural de los acontecimientos. Ahora que estamos vivos y todavía aquí, vamos a tratar de luchar contra ellos” en cuanto a la enmienda.

Florida Healthy Alternatives está luchando en gran medida contra la enmienda de la marihuana mediante la recaudación de dinero para la campaña Vote No del Partido Republicano del estado, dijo McCormick. Es una alianza natural: Tanto el presidente como el director ejecutivo del Partido Republicano estatal son cabilderos de Florida Healthy Alternatives.

McCormick describió la dinámica entre la industria del cáñamo y Trulieve como una especie de situación de David y Goliat, en la que su grupo representa sobre todo a pequeñas empresas amenazadas por Trulieve. Dijo que la aprobación de la enmienda de la marihuana recreativa probablemente “expulsaría” del negocio a la industria del cáñamo, que vende productos relacionados con la marihuana como porros delta-8, gomitas y vaporizadores.

McCormick dijo que Trulieve apoyó la aprobación del proyecto de ley sobre el cáñamo, el cual igualmente perjudicó a la industria del cáñamo. DeSantis dijo lo mismo en una conferencia de prensa en junio. Los registros de la Cámara estatal muestran que Capital City Consulting presentó una declaración de que podrían cabildear sobre el proyecto de ley de la Cámara en nombre de Trulieve, pero Nick Iarossi, copropietario de la empresa de consultoría, dijo que nunca tomaron una posición sobre el proyecto de ley ni cabildearon sobre él. Dijo que es común que cabilderos se registren en un proyecto de ley que están monitoreando.

“Trulieve está muy enfocada en llevar marihuana segura y legal a los adultos en la Florida”, dijo el portavoz de Trulieve, Steve Vancore, en un comunicado. “Nuestro objetivo es poner fin a los arrestos criminales por simples cargos de posesión y eliminar los productos peligrosos y no regulados del mercado. Punto”.

La oficina de DeSantis dijo en un correo electrónico que el gobernador vetó el proyecto de ley sobre el cáñamo porque “impondría cargas regulatorias debilitantes a las pequeñas empresas, como dejó claro en su carta de veto”, no porque el gobernador hiciera algún tipo de trato con la industria del cáñamo.

Evan Power, presidente del Partido Republicano de la Florida y cabildero de Florida Healthy Alternatives, dijo lo mismo.

“No hubo acuerdo sobre la legislación. Obviamente, estábamos tratando de trabajar para conseguir el veto del proyecto de ley para proteger a las pequeñas empresas y nos alegramos de que el gobernador lo vetara”, dijo Power.

El Partido Republicano de la Florida adoptó una posición formal en contra de la enmienda de la marihuana y Power dijo que la campaña Vote No está en marcha: “Hemos enviado material a nuestros condados para oponernos a ella y estaremos activos en la oposición”.

SURGE UNA ALIANZA

Florida Healthy Alternatives contrató a Power y al director ejecutivo del Partido Republicano de Florida , Bill Helmich, en enero para que cabildearan en favor de la organización del cáñamo durante el reciente período de sesiones legislativas.

Cuando los legisladores aprobaron el proyecto de ley que restringe los productos de cáñamo este año, algunos argumentaron que no habían previsto que la industria se desarrollara de la manera en que lo ha hecho. (La Ley Agrícola de 2018 legalizó el cáñamo al eliminarlo de la definición de marihuana en la Ley de Sustancias Controladas, y en 2019 la Legislatura dio luz verde a su regulación).

El patrocinador del proyecto de ley de la Cámara, el representante Tommy Gregory, republicano de Lakewood Ranch, dijo que él y sus colegas habían sido “engañados” al creer que el mercado del cáñamo se usaría principalmente para fines industriales como la fabricación de textiles.

En cambio, dijo Gregory, “están usando productos de cáñamo para hacer sustancias intoxicantes”.

Después de que la Legislatura aprobara la medida sobre el cáñamo, SB 1698, Power organizó una reunión entre McCormick y la oficina del gobernador en abril, dijo McCormick.

“Fue una reunión informativa”, dijo McCormick. “Expuse todas mis preocupaciones”.

McCormick también encabezó una campaña que culminó con los consumidores de cáñamo, distribuidores, agricultores y minoristas enviando al gobernador 14,000 cartas escritas a mano pidiéndole que vetara el proyecto de ley, dijo. La oficina del gobernador dijo que también recibieron 7,651 correos electrónicos oponiéndose al proyecto de ley, y solo 65 apoyándolo.

El mes pasado, DeSantis vetó el proyecto de ley, afirmando en su carta al secretario de Estado de la Florida, Cord Byrd, que “introduciría una disrupción dramática y perjudicaría a muchas pequeñas empresas de fabricación al por menor en la Florida, empresas que han surgido debido a la reciente legislación que allana el camino para el uso comercial del cáñamo”.

DeSantis se explayó sobre su veto al proyecto de ley en una conferencia de prensa en junio en Miami.

“La industria de la marihuana quería este proyecto de ley del cáñamo. Querían restringir esa industria y quieren poder aprobar esta Enmienda 3 [sobre la marihuana recreativa]”, dijo DeSantis. “El problema con eso es que todo el estado olerá a marihuana si eso se aprueba”.

DeSantis continuó sobre la enmienda de la marihuana: “Esta cosa tiene que caer. Pero yo no diría que fue la principal [razón para vetar el proyecto de ley de cáñamo]. Diría que la [razón] principal fue que sentí la obligación de proteger a las pequeñas empresas de la Florida”.

Después de que DeSantis vetó el proyecto de ley, ejecutivos del cáñamo se comprometieron a recaudar $5 millones para luchar contra la enmienda de la marihuana, informó CBS News el jueves. El reporte se basó en mensajes compartidos en un grupo de mensajes de WhatsApp conocido como Save Florida Hemp.

El 25 de junio, el productor de cáñamo Patrick O’Brien, con sede en Apopka, donó $100,000 al comité político de DeSantis establecido, en parte, para luchar contra la enmienda de la marihuana recreativa, según muestran los registros de financiamiento de campaña. O’Brien no pudo ser contactado para hacer comentarios.

McCormick, el presidente del grupo de cáñamo Florida Healthy Alternatives, dijo que O’Brien no era miembro de la asociación, pero era un conocido suyo.

“Parece que tiene un negocio de cáñamo que está luchando por sus vidas”, dijo McCormick. “La mayoría de los miembros de nuestra asociación por los que luchamos tienen una historia muy similar”.