Tragedia en el Obelisco: quién era el joven que murió antes de que empezara el partido de la selección

Cuando faltaban pocos minutos para que se jugara la final de la Copa América entre la Argentina y Colombia, Alan Nahuel Frete, de 30 años, falleció trágicamente al caer del llamado Jardín vertical que forma las iniciales de la ciudad de Buenos Aires, en la Plaza de la República, a metros del Obelisco. Estaba sobre la estructura cantando y flameando una bandera argentina.

Frete, que estaba vestido con campera verde, pantalón gris y zapatillas blancas, se encontraba saltando sobre la letra A cuando perdió el equilibrio, cayó al vacío y murió instantáneamente al impactar contra el suelo. El joven vivía en Florencio Varela y estaba acompañado por su hijo de 14 años y su cuñado, de 34.

Según fuentes del gobierno porteño, mediante un megáfono las autoridades lo invitaron a descender del Jardín vertical. Como no obedeció a los agentes que intentaban persuadirlo para que bajara, los bomberos se acercaron al lugar dispuestos a trepar para obligarlo a descender. Sin embargo, Frete perdió el equilibrio antes de que pudieran asistirlo.

Los médicos del SAME intentaron reanimarlo y lo trasladaron de inmediato al Hospital Ramos Mejía, donde se constató su muerte. A su vez, personal del gabinete psicológico asistieron a los familiares de Frete que se encontraban en el lugar y vieron toda la secuencia de los hechos.

Frete trabajaba como albañil y había sido empleado de una constructora hasta mediados del año pasado. Al momento de su fallecimiento, se encontraba desempleado formalmente. Desde la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) indicaron a este medio que él no estaba afiliado al sindicato desde septiembre del año pasado.

El Jardín vertical fue instalado por el Ministerio de Ambiente y Espacio Público porteño con el objetivo de crear conciencia sobre el cuidado del medio ambiente. Según información del gobierno, la estructura está compuesta por 6300 plantas y mide aproximadamente 6,50 metros de altura.

El trágico desenlace del joven en las cercanías del Obelisco ocurrió mientras se mantenía la incertidumbre sobre el inicio del partido de la selección argentina contra Colombia debido a los incidentes en los alrededores del estadio Hard Rock de Miami. En ese momento ya había cientos de hinchas en el centro porteño para alentar a la selección.

Sin embargo, a pesar del trágico incidente, nada impidió que los simpatizantes vestidos de celeste y blanco llegaran a la intersección de la avenida Corrientes y 9 de Julio para celebrar la victoria de Argentina.

Miles de hinchas festejaron hasta las 5 de la mañana, momento en que fueron desalojados por la policía porteña. Desde el final del partido, o incluso antes de la consagración, una multitud se dirigió al punto de encuentro habitual donde se festejan los triunfos deportivos.