Tensión con Pyongyang: Estados Unidos realiza su primer ejercicio con una bomba de precisión en 7 años sobre Corea

Bombardero estadounidense B-1B en una imagen de archivo
Bombardero estadounidense B-1B en una imagen de archivo

SEÚL.- Un bombardero de largo alcance B-1B de Estados Unidos sobrevoló la península de Corea en sus primeras maniobras con armas guiadas de precisión en siete años en la zona, dijo Corea del Sur el miércoles.

El B-1B realizó ejercicios aéreos conjuntos con otros aviones de combate estadounidenses y surcoreanos, explicó el Ministerio de Defensa de Seúl en un comunicado.

Bombardero estratégico B-1B Lancer de la USAF
Bombardero estratégico B-1B Lancer de la USAF

El ejercicio tenía como objetivo demostrar el compromiso de seguridad de Estados Unidos con Corea del Sur y fortalecer la postura de defensa conjunta de los aliados, en un momento en el que aumentan las tensiones con Corea del Norte por los recientes lanzamientos de globos cargados de basura hacia su vecino del sur y otras provocaciones.

Durante el ejercicio, el B-1B arrojó municiones de ataque directo conjunto (JDAM, por sus siglas en inglés), que incluyen “destructores de búnkeres” guiados de precisión, mientras era escoltado por aviones surcoreanos, el primer ejercicio de bombardeo de este tipo para un bombardero estadounidense desde 2017, según comunicó el ministerio.

El ministerio señaló que aviones de combate surcoreanos también realizaron ejercicios con fuego real para demostrar la disposición del país a castigar a Corea del Norte si es provocado.

JDAM es un sistema de guía que convierte bombas convencionales no guiadas en armas más precisas guiadas por GPS. Todos los aviones de combate, bombarderos y drones estadounidenses pueden utilizar JDAM, y las municiones se encuentran entre los sistemas de armas que Estados Unidos ha estado proporcionando a Ucrania para ayudarla a combatir la invasión rusa.

Hostilidad

Un B-1B es capaz de transportar una gran carga útil de armas convencionales. Corea del Norte ha calificado anteriormente el despliegue del bombardero como prueba de la hostilidad estadounidense. Corea del Norte ha respondido a vuelos anteriores de B-1B y otros poderosos aviones estadounidenses en Corea del Sur con sus propias pruebas de misiles.

Las maniobras están consideradas una demostración de fuerza contra Corea del Norte ante las crecientes tensiones por el lanzamiento reciente de globos con basura hacia su vecino del sur.

En la última semana, Pyongyang lanzó cientos de globos de gran tamaño que arrojaron estiércol, colillas de cigarrillos, trozos de tela, pilas gastadas e incluso, al parecer, pañales sucios sobre el territorio surcoreano. En respuesta, Seúl prometió medidas de represalia “insoportables” y suspendió un frágil acuerdo militar que buscaba aliviar las tensiones con su rival.

En esta imagen proporcionada por el Ministerio de Defensa de Corea del Sur, un bombardero B-1B de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, centro, vuela en formación de combate con jets F-35A de la Fuerza Aérea Surcoreana, abajo, y jets F-16 de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, arriba, sobre la Península de Corea del Sur durante un ejercicio aéreo conjunto, el domingo 19 de febrero de 2023.

La suspensión del acuerdo intercoreano de 2018 permite a Corea del Sur reanudar actividades militares como ejercicios con fuego real o transmisiones de propaganda anti norcoreana a través de altavoces en zonas fronterizas. Es probable que tales medidas impulsen a Corea del Norte a tomar medidas provocativas en respuesta.

Recientemente, Corea del Norte lanzó un cohete en un intento de poner en órbita un segundo satélite espía en violación de las resoluciones de la ONU, pero explotó poco después del despegue. También probó armas con capacidad nuclear para un simulacro que simulaba un ataque preventivo contra Corea del Sur y supuestamente interfirió las señales de navegación GPS en Corea del Sur.

Desde 2022, Corea del Norte ha acelerado drásticamente el ritmo de las pruebas de misiles en lo que los expertos extranjeros llaman un intento de construir un arsenal nuclear más grande y aumentar su influencia en la diplomacia futura con EE.UU. Las negociaciones sobre desarme nuclear entre Pyongyang y Washington permanecen inactivas desde 2019.

Agencia AP