¿Son estos Springboks los mejores de todos los tiempos?

Terminó Francia 2023 y Siya Kolisi levanta la Copa del Mundo, la cuarta conquista de Sudáfrica, que lo convirtió en el máximo ganador de mundiales en la historia.
Terminó Francia 2023 y Siya Kolisi levanta la Copa del Mundo, la cuarta conquista de Sudáfrica, que lo convirtió en el máximo ganador de mundiales en la historia. - Créditos: @Christophe Ena

Una vez concluida la final de la última Copa del Mundo en Francia, Eben Etzebeth, uno de los símbolos del poderío físico sudafricano, reunió a sus compañeros, flamantes bicampeones sucesivamente, y les dijo que habían sido parte del mejor equipo en la historia del rugby. ¿Es realmente así? ¿Son estos Springboks los mejores de todos los tiempos? Hay gran parte de razón en lo que argumenta el gigantesco segunda línea, al menos en los números. Este grupo de jugadores y de entrenadores consiguió lo que ninguno: dos campeonatos del mundo consecutivos y una victoria en la serie contra los British & Irish Lions, todo en un proceso de cuatro años. Se puede agregar el Rugby Championship de 2019. Montones de logros que sirven para que los Boks del período 2019-2023 ingresen en la lista de los que hicieron la historia grande en este deporte.

Hasta esta victoria sudafricana en Francia había tres equipos que disputaban el mote de “mejor de la historia”. Salvando las distancias que marcan las épocas y que tornan imposibles las comparaciones, hasta estos Springboks el podio era integrado por los Originales All Blacks (31 victorias en 32 partidos en la mítica gira por las Islas Británicas en 1905-1906), el Gales de la década de 1970 (7 títulos y 3 Grand Slam en el Cinco Naciones en esos 10 años) y los All Blacks bicampeones del mundo en 2011 y 2015.

Eben Etzebeth levanta a Jesse Kriel en la eufórica celebración de la victoria sudafricana sobre Nueva Zelanda (12-11) en la final de Francia 2023; el segunda línea dirá a sus compañeros que integraban el mejor equipo de la historia del rugby.
Eben Etzebeth levanta a Jesse Kriel en la eufórica celebración de la victoria sudafricana sobre Nueva Zelanda (12-11) en la final de Francia 2023; el segunda línea dirá a sus compañeros que integraban el mejor equipo de la historia del rugby. - Créditos: @Thibault Camus

Estos tres equipos marcan algunas ventajas con respecto a los Springboks. Los neozelandeses de comienzos del siglo pasado redefinieron el rugby de aquella época. Fueron los pioneros en el juego de manos por excelencia. Es leyenda aquella corrección de “all backs” por “all blacks”. “The Originals” fueron los fundadores del seleccionado que trascendió al rugby, y en esa gira, en la que cosecharon elogios de todos los colores, hicieron un culto a la búsqueda de los espacios. “Los ingleses veían una aguja; nosotros, su ojo”, se relata en El libro de la fama, del escritor neozelandés Lloyd Jones.

El Gales de los setentas también marcó una era con el sello de aquellos All Blacks. Jugaba el rugby total. Poderoso con sus forwards, de gran obtención y dotados de backs que atacaban desde cualquier lado. Ese equipo, indomable, que también fue la base de los Lions que vencieron a All Blacks y Springboks, tenía jugadores que quedaron en la historia, como Gareth Edwards (quizá el más grande de todos los tiempos), JPR Williams, Phil Bennett, Barry John, Gerald Davies y John Dawes, entre otros.

Compacto de Sudáfrica vs. Nueva Zelanda, final de Francia 2023

Ya en tiempos de mundiales, los All Blacks bicampeones tuvieron algunas ventajas sobre estos Springboks que también lograron dos títulos seguidos. A diferencia de los sudafricanos, que en 2019 y en 2023 perdieron un partido en cada campeonato, los neozelandeses ganaron invictos. Pero el rubro en el que quizá más diferencia sacaron es que en el lapso 2011-2015 fueron una máquina casi perfecta: ganaron 56 de sus 61 compromisos y cayeron en apenas tres (Inglaterra, Sudáfrica y Australia); los otros dos fueron empates (con los Wallabies). En Inglaterra 2015 se impusieron con amplitud en todos sus encuentros, salvo en la semifinal con los Boks (20-18).

Estos Springboks, que en 2023 ganaron los tres mano a mano por apenas un punto, que perdieron contra Irlanda en la rueda inicial de Francia y que tampoco arriesgaron (su base estuvo en su enorme defensa y su impacto físico desde el banco), quedarán en la historia no sólo por sus números, sino también porque como ningún otro seleccionado defendieron una identidad propia, un orgullo de país que siguió el legado de Nelson Mandela y que, además, no tuvo extranjeros en el plantel. Fue Sudáfrica 100 por ciento. Llegaron a Francia para hacer historia, para superar a Nueva Zelanda en cantidad de coronas, para dejar a la camiseta verde en lo más alto de todo, y lo consiguieron.

La defensa, el impacto desde el banco de suplentes y el orgullo nacional fueron características identificarias de este Springboks que llegó a la final del Mundial gracias a un penalazo acertado por Handré Pollard.
La defensa, el impacto desde el banco de suplentes y el orgullo nacional fueron características identificarias de este Springboks que llegó a la final del Mundial gracias a un penalazo acertado por Handré Pollard. - Créditos: @ANNE-CHRISTINE POUJOULAT

Quizá a estos Springboks les falte un par de casilleros para ser el mejor equipo de todos los tiempos, pero, sin dudas, este grupo de jugadores y entrenadores bicampeones del mundo quedará en la historia por siempre.