Selección argentina: cómo ser campeón del mundo y mantener el espíritu competitivo en las Eliminatorias

La selección argentina vuelve a jugar por los puntos en las Eliminatorias para el Mundial 2026 de México, Estados Unidos y Canadá
La selección argentina vuelve a jugar por los puntos en las Eliminatorias para el Mundial 2026 de México, Estados Unidos y Canadá - Créditos: @Aníbal Greco

¿Cómo encarar la siguiente novela después de haber escrito un best seller? ¿Cómo componer otro hit musical luego de haber sido el N° 1 por cuatro años? ¿Cómo mantener el apetito competitivo si ya nada podrá superar lo conseguido? Algo de eso empezará a experimentar el seleccionado argentino en las Eliminatorias para el Mundial 2026.

En otra época, el equipo dirigido por Lionel Scaloni no hubiera tenido que preocuparse por la ruta hacia México, Estados Unidos y Canadá. Los campeones automáticamente se aseguraban un lugar en la próxima competencia. Pero las reglas cambiaron a partir de Alemania 2006. Vale recordar que Brasil, campeón en Japón y Corea del Sur 2002, participó en la clasificación. En la actualidad, sólo los anfitriones tienen seguro el lugar. Así, tras la histórica vuelta olímpica en Qatar, y después de un par de amistosos en el país para celebrar la conquista, la Argentina volverá a competir por los puntos.

La base de Scaloni es sólida y joven. Nadie sabe cuántos de los héroes de Qatar llegarán dentro de tres años al Mundial, aunque se intuye que la mayoría. Ni tampoco cómo será la marcha en busca de una clasificación que no debería traerle sorpresas. Como la próxima cita se ampliará a 48 equipos, seis seleccionados de la Conmebol conseguirán un boleto para la Copa y el séptimo jugará un repechaje.

Lionel Messi, con la Copa del Mundo, en Qatar 2022
Lionel Messi, con la Copa del Mundo, en Qatar 2022 - Créditos: @ARGRA

Una gran diferencia surge entre el pasado y los tiempos actuales. Pero mejor que lo expliquen los campeones del mundo de ayer. Empieza Daniel Bertoni, que levantó la Copa del Mundo en 1978, en una charla con LA NACION. “En nuestra época el campeón iba directo al próximo Mundial, así que nosotros no tuvimos que jugar la eliminatoria. Esa es una gran diferencia. Aunque la mayoría de los muchachos jugábamos en el país, el reencuentro con ellos y con la gente siempre era hermoso. Había una enorme gratitud por haber logrado el campeonato”.

Entre Argentina 78 y España 82, el seleccionado albiceleste jugó 14 amistosos en nuestro país y 10 en el exterior; por la Copa América 79, dos y dos; y otros dos encuentros en Montevideo, por la Copa de Oro de Campeones Mundiales.

Los campeones del mundo de 1978; una buena parte del plantel luego estuvo en España 1982
Los campeones del mundo de 1978; una buena parte del plantel luego estuvo en España 1982

Tiene razón Bertoni. En 1978, el único futbolista del seleccionado que vino del exterior fue Mario Kempes, de Valencia. El resto se desempeñaba en el país. Vaya la diferencia, por ejemplo, con el plantel que actualmente se entrena en Ezeiza a la espera del debut de hoy, frente a Ecuador, en el que solo Franco Armani, de River, proviene del fútbol doméstico.

El DT César Luis Menotti continuó la línea del 78 al 82. Los campeones que repitieron en España fueron 11: Bertoni, Daniel Passarella, Américo Gallego, Ubaldo Fillol, Kempes, Jorge Olguín, Héctor Baley, Luis Galván, Alberto Tarantini, Osvaldo Ardiles y José Valencia.

El capitán Daniel Passarella, en andas, con la Copa del Mundo 1978
El capitán Daniel Passarella, en andas, con la Copa del Mundo 1978

Menotti no tuvo que tocar mucho la estructura porque éramos muchos los que continuábamos. De los nuevos empezaron a interactuar mucho más Diego [Maradona], Barbas [Juan] y Ramón [Díaz]. En ese sentido, Bilardo [Carlos] hizo un recambio más profundo después. Ahora, por lo que vi, creo que Scaloni va a mantener el espíritu competitivo en los muchachos”, prosiguió Bertoni.

Toma la palabra un gladiador del 86, Jorge Burruchaga, también con este medio: “Después de México, Bilardo no cambió en lo más mínimo. Siguió fiel a lo que el pensaba, obsesivo, demandante. Recuerdo una anécdota: había un amistoso en Vélez, frente a Alemania, yo me me recuperaba de una lesión de rodilla y Nantes me dio un permiso especial para venir a ver el partido. Me entrené siempre con los suplentes. Pero Carlos me hacía la cabeza... ‘vos estás bien, tenés que jugar, tenés que jugar... Y lo hizo llamar a Julio Grondona para que el club me autorizara. Jugué e hice el gol en el 1-0. No cambió nunca. Nosotros, los más grandes, teníamos que ser un nexo con los chicos, enseñarles”.

Una de las formaciones de Argentina en el Mundial de México 86, que terminaría con la consagración albiceleste frente a Alemania
Una de las formaciones de Argentina en el Mundial de México 86, que terminaría con la consagración albiceleste frente a Alemania

El pase le llega a Jorge Olarticoechea. “Con Bilardo no cambió mucho por ser campeones del mundo: para él había que seguir demostrando día a día que éramos los campeones. El peso de la camiseta, el respeto a la gloria, Carlos no te dejaba relajar”, resume el Vasco. Giusti, Olarticoechea, Maradona, Burruchaga, Sergio Batista, Nery Pumpido y Oscar Ruggeri siguieron viaje desde México a Italia 1990.

“Llegó una nueva camada y creamos una buena relación, un buen vínculo. Carlos cuidaba ese detalle también cuando elegía jugadores, estaba atento a las relaciones humanas y la conducta. Siempre exigía compromiso y pertenencia. Se armó un nuevo grupo con Troglio [Pedro], Caniggia [Claudio], Sensini [Roberto], entre otros, que eran los pibes que aparecían, y fue un grupo sólido, nos llevábamos muy bien. Por eso, después, en Italia 90, a pesar de tantas dificultades, pudimos llegar a una nueva final”, describió Olarticoechea.

El capitán Diego Maradona, con la Copa del Mundo en México 1986
El capitán Diego Maradona, con la Copa del Mundo en México 1986

El seleccionado dirigido por Bilardo jugó mucho en el exterior y no tanto en el país. Sabido era que al entrenador le había quedado cierta sensibilidad con el rechazo que el equipo había recibido antes de la coronación mundial. La Copa América de 1987 pasó sin pena ni gloria. Pero el doctor tenía una gran tranquilidad: la clasificación para Italia 90 estaba consumada. Otra anécdota describirá a la perfección el sentimiento del DT.

Fuentes cercanas a aquel plantel le contaron a LA NACION cómo fue la despedida del estadio Azteca luego del 3-2 frente a Alemania. “Ya con las valijas hechas, Bilardo entra en la habitación y repite: ‘Dos goles de córner… Nos hicieron dos goles de córner. ¡No puede ser! ¡No puede ser! Lo bueno que tiene esto es que no vamos a tener que jugar las eliminatorias’”. El doctor casi ni celebró la conquista. Sus preocupaciones eran otras.

Tras haber dado la vuelta olímpica en el país azteca y hasta Italia 90, la Argentina jugó en el país dos amistosos y cuatro encuentros por la Copa América 87; en el exterior, en cambio, disputó 11 amistosos, siete cotejos por la Copa América Brasil 89, dos por la Copa Cuatro Naciones (Alemania), cuatro por la Copa de Oro del Bicentenario de Australia y uno por la Copa Hispanidad (Sevilla, España).

De 1978 a 2022. Todos campeones. Distintas recetas. O no tanto.