Los Pumas tuvieron sus últimas horas de descanso y ya se enfocan en su próximo rival: un Chile golpeado y enojado

Agustín Creevy y Eduardo Bello: optimismo en Los Pumas tras la victoria ante Samoa
Agustín Creevy y Eduardo Bello: optimismo en Los Pumas tras la victoria ante Samoa

LA BAULE-ESCOUBLAC, Francia.- Un domingo a pleno sol, con temperatura cálida, con gente en la playa, corriendo por la costanera o colmando el centro que se cierra hasta las 13 alrededor del “Marché”, el mercado que vende pescado, frutas y quesos, sirvió de escenario para un día de relax y recuperación para Los Pumas. La escenografía esta vez contó con los jugadores argentinos paseando a pie o en bicicleta por las calles de La Baule, generalmente acompañados por algún familiar. Fueron las últimas horas de descanso antes del comienzo a fondo de la preparación del test que se viene y para el cual el seleccionado argentino sólo se moverá de esta ciudad para trasladarse en micro el sábado, el día del partido con Chile, hasta los 50 minutos que separan de Nantes, escenario también del último encuentro del Grupo D, con Japón, ya en el otro mes, el domingo 8.

El test del próximo sábado, en el que los argentinos deben ganar y con bonus para llegar dependiendo de ellos al cruce con Japón, tendrá dos equipos que llegan con ánimos opuestos. Por el lado de los Pumas, la victoria ante Samoa descomprimió la tensión y ahora se mira el cuadro con otra cara. Chile, en cambio, llega golpeado y enojado. El entrenador de Los Cóndores, Pablo Lemoine, estalló ante las cámaras de televisión no bien concluyó la estrepitosa caída por 71-0 contra los ingleses: “Al final y con el resultado, es como un show donde por un lado estamos los payasos y por el otro, los dueños del circo. Y la verdad es que me tiene un poco saturado el tema”.

El gesto de frustración del chileno Benjamin Videla, después de la paliza sufrida ante Inglaterra, por el Grupo D
El gesto de frustración del chileno Benjamin Videla, después de la paliza sufrida ante Inglaterra, por el Grupo D - Créditos: @Themba Hadebe

El capitán chileno, Martín Sigren, consideró que la derrota “fue una dura lección”, pero recordó dónde estaba Chile cuatro años atrás, cuando Canadá los goleó en la clasificación al Mundial 2019. Volviendo al pasado, antes de que asuma Lemoine, a fines de 2018, Chile había perdido de local 73-0 con los Maorí All Blacks.

Chile le jugó mano a mano a Japón en el debut en este Mundial y recién se cayó físicamente en los últimos minutos. Luego, complicó durante un tiempo a Samoa, pero el duro golpe lo recibió con los ingleses, a los que sólo les pudo oponer resistencia en los primeros 20 minutos. Michael Cheika, por ejemplo, resaltó la actitud de los Cóndores en su primera presentación en una Copa del Mundo.

El uruguayo Lemoine, que tomó la conducción de Chile en 2018, hizo hincapié en cómo llegó su equipo al Mundial: con nulo roce internacional. Es el mismo problema que sufre Uruguay. La competencia regional, la SAR, antes la SLAR, más los planes de preparación, les dieron un impulso que significó que por primera vez en la historia haya tres países sudamericanos en un Mundial de rugby. Pero en el camino hacia el Mundial, ninguno de los dos pudo toparse con algún grande. “Estamos hace años pidiendo lo mismo, de tener estas experiencias antes de jugar un Mundial”, completó Lemoine tras la goleada en Lille.

Jack Walker apoya para el try durante el encuentro entre Inglaterra y Chile, que afirmó a La Rosa como líder del Grupo D
Jack Walker apoya para el try durante el encuentro entre Inglaterra y Chile, que afirmó a La Rosa como líder del Grupo D - Créditos: @THOMAS SAMSON

El problema de los sudamericanos tiene un espejo en los países europeos de segundo orden, como Portugal y Rumania, que también llegan a una Copa del Mundo sin competencia en el primer nivel internacional. Sí juegan entre ellos el 6 Naciones B. Japón, en cambio, con más categoría y, sobre todo, más dinero, ha conseguido en estos últimos años codearse con las potencias en las ventanas de julio y noviembre. Francia fue a Japón el año pasado y en noviembre a los nipones los recibió Inglaterra en Twickenham.

De todos modos, los inconvenientes en el rugby de Chile van un poco más allá de lo que señala Lemoine. Meses antes de viajar a Francia, los jugadores se quejaron del poco apoyo que recibían de la dirigencia y de lo solos que se sentían. Ir a un Mundial es una gran posibilidad para expandir a un deporte, pero si no hay un trabajo de base que aproveche ese impacto, en cuatro años Chile lo puede estar viendo de nuevo desde afuera.

Las principales críticas de Agustín Pichot a la World Rugby vienen por ese lado. “¿Cómo hacen Chile y Uruguay para crecer?”, se preguntó antes del inicio del Mundial. El ex capitán de los Pumas, que fue vicepresidente en el período 2016-2020, no les pudo torcer el brazo a los europeos del 6 Naciones que no quisieron un torneo anual con ascensos y descensos, que les permitieran a las naciones con menos poder e historia codearse con las potencias.

Chile también puede sufrir a los Pumas en el test del sábado, aunque se supone que los entrenadores reservarán a algunos de los titulares y les darán minutos a los que todavía no jugaron. Aun así, las diferencias son notables. De hecho, antes de viajar a Francia, Chile perdió con Argentina XV.

Una escena del duelo entre Argentina XV y Chile
Una escena del duelo entre Argentina XV y Chile

El seleccionado chileno –no así el rugby de Chile- creció notablemente en estos cuatro años. Cuando hizo referencia a la goleada sufrida ante los Maorí All Blacks en 2018, Lemoine fue contundente: “Más bajo no se podía caer. Desde ahí arrancamos. Ese fue el kilómetro 0″.

Lemoine también había marcado el “elitismo” y el “desorden” que había en el rugby chileno, pero que el trabajo para llegar al Mundial había cambiado ese escenario. Incluso, el gobierno de Gabriel Boric prometió ayuda estatal para el rugby que, a diferencia del fútbol, sí se clasificó para el Mundial. Quizá en un futuro, los Pumas jueguen tests en las ventanas con sus vecinos y eso les sirva para llegar mejor preparados. Ambos, Uruguay y Chile, deberán volver a jugar las clasificaciones para Australia 2027. Pero ahora, en este presente, el encuentro entre argentinos y chilenos hará historia, por ser el primero entre dos países de Sudamérica.

Para ese partido del sábado, los Pumas retornarán hoy a los entrenamientos. Joel Sclavi ya está recuperado de su lesión en las costillas, mientras que Tomás Lavanini estaría disponible para jugar en Nantes. Por lo cual, la tropa Puma está completa. El jueves, Michael Cheika dará el equipo aquí, en la coqueta y tranquila La Baule.