Los Pumas: una marea de 20.000 argentinos frente a los abucheos de los franceses, la Marsellesa y la simpatía local con All Blacks

Los argentinos fueron más que los neozelandeses en el Stade de France, pero el público local no los acompañó y terminaron apagados, como los Pumas frente a All Blacks en la primera semifinal del Mundial de Francia.
Los argentinos fueron más que los neozelandeses en el Stade de France, pero el público local no los acompañó y terminaron apagados, como los Pumas frente a All Blacks en la primera semifinal del Mundial de Francia. - Créditos: @FRANCK FIFE

SAINT-DENIS, Francia.– De un clima esperanzador, con la ilusión de una hazaña de los Pumas, a la debacle y una superioridad abrumadora de los All Blacks, del minuto 1 al 80 y en casi todas las facetas del juego. La euforia argentina, que se palpó en los alrededores y en los bares en Saint-Denis, fue apagándose ante cada incursión de unos neozelandeses implacables y arrolladores. Casi sin errores y sin fisuras. Un seleccionado al que no le pesan estas instancias y que el sábado 28 intentará recuperar el título de campeón del mundo que se le escapó en Japón 2019.

Fue un día clásico en el otoño parisino. El sol asomaba al mismo tiempo que una suave lluvia regaba las elegantes plazas de la capital francesa. El arcoíris decoró la imponente Torre Eiffel en un día que marcó el inicio de las semifinales de la Copa del Mundo. Sin Francia, el local, eliminado frente a los Springboks hace cinco días, de alguna manera se apagó parte del clima mundialista. Sin embargo, en una noche de alrededor de 15°, con humedad, los argentinos y los neozelandeses crearon un clima de fiesta, acompañados por los locales en un Stade de France que contó con poco menos de 80.000 espectadores.

Hubo mucho entusiasmo en los hinchas albicelestes al principio; en el final, ya irreversible la paliza, agradecieron al equipo su buena campaña en la disputa de la Copa del Mundo.
Hubo mucho entusiasmo en los hinchas albicelestes al principio; en el final, ya irreversible la paliza, agradecieron al equipo su buena campaña en la disputa de la Copa del Mundo. - Créditos: @ANNE-CHRISTINE POUJOULAT

En un grupo de Whatsapp de más de 500 personas, los hinchas albicelestes se autoconvocaron al puente principal que da acceso al Stade de France para vivir lo previo a la tercera semifinal en la historia del seleccionado argentino de rugby, la segunda en ese mismo escenario. Camisetas de los Pumas, de la selección argentina de fútbol y de clubes pusieron color a una noche espesa y nubosa. A las 19.50 se agudizó la lluvia y, entre corridas, todos se refugiaron en los techos del estadio imponente de las afueras de París. “Queremos agradecer muchísimo a los hinchas que se acercaron. Sabemos el esfuerzo enorme que hacen para estar acá y venir a Europa para vernos. Estamos muy orgullosos de ser argentinos y vestir esta camiseta”, resaltó el capitán Julián Montoya en una conferencia de prensa.

En el Stade de France se hicieron presentes Pumas de todas las épocas para atestiguar una jornada de tinte histórico: Pepe Constante, Rodrigo Crexell, Gonzalo Quesada (futuro head coach de Italia); varios Pumas de Bronce, como Manuel Contepomi, Rodrigo Roncero, Esteban Losada, y otros más recientes, semifinalistas en Inglaterra 2015, como Joaquín Tuculet, Ramiro Herrera y Leonardo Senatore. También, contemporáneos que no quedaron en el plantel de 33, como Facundo Bosch e Ignacio Calles.

Con una asistencia de 77.653 espectadores, predominó el público local por sobre los espectadores de los países involucrados. A los 20 segundos del kick-off sonó con furia La Marsellesa. Los franceses mostraron su simpatía en buena parte con los neozelandeses: mientras los equipos entraban en calor y el presentador anunciaba a los dos seleccionados, hubo abucheos cuando se mencionó a la Argentina.

La inmensidad del Stade de France, que esta vez no fue amigable para con los Pumas; la Argentina derrotó a Francia dos veces en el Mundial de hace 16 años y en la final de Qatar 2022 en fútbol.
La inmensidad del Stade de France, que esta vez no fue amigable para con los Pumas; la Argentina derrotó a Francia dos veces en el Mundial de hace 16 años y en la final de Qatar 2022 en fútbol. - Créditos: @FRANCK FIFE

El público albiceleste, calculado en alrededor de 20.000 personas, empezó entusiasmado con el primer penal de Emiliano Boffelli, pero se cayó mientras el equipo no encontraba respuestas. Sin embargo, sobre el final, volvió a gritar en agradecimiento a un seleccionado que había vuelto a poner a la Argentina entre los mejores cuatro de un mundial. “Agradecemos mucho el apoyo que tuvimos en el Mundial. Estamos muy agradecidos a todos los que nos apoyan acá y en Argentina, que saben del esfuerzo que hacemos para estar acá. Estamos en un camino y un proceso que a la larga va a terminar pagando; desde dentro se siente”, expresó Juan Cruz Mallía.

Por cierto, se espera una mayor afluencia en el Stade de France en el encuentro de este domingo entre Inglaterra y Sudáfrica, sobre todo del lado de los británicos, que cruzarán el Canal de la Mancha el propio sábado e inundarán de camisetas blancas los alrededores de la mole de Saint-Denis. Además del local, Irlanda, Gales y Escocia son los que más color otorgaron a esta Copa del Mundo, a la que le quedan apenas tres partidos. Los Pumas procurarán cerrar con una medalla de bronce. Dieciséis años después intentarán repetir la historia.