PMA advierte que Sudán corre el riesgo de ser la peor crisis de hambruna del mundo

El Cairo, 6 mar (EFE).- La directora ejecutiva del Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas, Cindy McCain, afirmó este miércoles que la guerra de Sudán, iniciada hace once meses, corre el riesgo de convertirse en la mayor crisis de hambruna del mundo.

Al término de una visita en Sudán del Sur, donde se reunió con familias que huyen de la violencia y de una emergencia de hambre cada vez mayor en Sudán, la responsable alertó de que "la guerra en Sudán corre el riesgo de desencadenar la mayor crisis de hambruna del mundo", según un comunicado de la agencia de la ONU.

"Hace 20 años, Darfur fue la mayor crisis de hambruna del mundo y el mundo se movilizó para responder. Pero hoy, el pueblo de Sudán ha sido olvidado. Están en juego millones de vidas y la paz y estabilidad de toda una región", aseveró.

Más de 25 millones de personas en Sudán, Sudán del Sur y Chad están atrapadas en una espiral de deterioro de la seguridad alimentaria, y el PMA no puede hacer llegar suficiente ayuda alimentaria de emergencia a las comunidades desesperadas de Sudán, atrapadas por los combates, debido a la incesante violencia y a la injerencia de las partes beligerantes, alertó.

En estos momentos, el 90 % de las personas que se enfrentan a niveles de emergencia por hambre en Sudán están atrapadas en zonas que son en gran medida inaccesibles para el PMA.

Los desplazados recién llegados a Sudán del Sur constituyen el 35 % de los que se enfrentan a niveles catastróficos de hambre -el nivel más alto posible- a pesar de representar menos del 3 % de la población, y además, uno de cada cinco niños en los centros de tránsito del principal paso fronterizo está desnutrido.

"Hoy hago un llamamiento urgente para que cesen los combates y se permita a todos los organismos humanitarios realizar su labor de salvar vidas", señaló.

Las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) entraron en una guerra abierta con el Ejército sudanés el 15 de abril del año pasado y desde entonces han podido controlar importantes áreas en Jartum y la vecina ciudad de Omdurman.

Alrededor de 13.900 personas murieron y 8,1 millones abandonaron sus hogares por la guerra en Sudán, según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA).

(c) Agencia EFE