Novak Djokovic buscará su título 100 en el Masters 1000 de Miami, tras su última resurrección
A sus 37 años, y tras superar un preocupante inicio de temporada, Novak Djokovic ha vuelto a resurgir y está a un solo paso de llegar al centenar de títulos en la final del Masters 1000 de Miami.
El único que puede impedir en esta ocasión este nuevo hito de la extraordinaria carrera del serbio es el checo Jakub Mensik, un talento emergente en el circuito y reflejo también de la longevidad de Djokovic. De 19 años, tenía seis meses de vida cuando su ilustre rival del domingo jugó su primer partido del torneo de Miami, que después conquistaría en seis ocasiones.
Djokovic, el último coloso en pie del ‘Big 3′ que formó con Roger Federer y Rafael Nadal, ya posee el récord de los récords en el tenis, sus 24 coronas de Grand Slam, pero su apetito sigue sin encontrar fin. El pasado agosto, dos meses después de retirarse por lesión de Roland Garros, se colgó su primer oro olímpico en los Juegos de París.
La ansiada medalla lo colocó a un escalón del título 100, que se le escapó en octubre en la final del Masters 1000 de Shanghai frente a Jannik Sinner, gran ausente en Miami por estar atravesando su suspensión por dopaje.
Ya en 2025, el astro de Belgrado hizo un nuevo intento en el Abierto de Australia, donde avanzaba decidido tras tumbar a Carlos Alcaraz cuando el cuerpo lo frenó otra vez, con un abandono por lesión muscular en plenas semifinales ante Alexander Zverev.
Las dudas sobre la resistencia y fiabilidad de Djokovic al máximo nivel se acentuaron al enlazar dos inusuales derrotas en sus estrenos del ATP 500 de Doha y el Masters 1000 de Indian Wells. “Obviamente, las cosas son diferentes para mí en los dos últimos años”, reconoció el balcánico tras caer este mes en Indian Wells ante Botic van de Zandschulp, entonces número 85 de la ATP.
“He estado luchando para jugar al nivel deseado. La mayor parte del tiempo es realmente un desafío, una lucha para mí”, agregó. Pero en su feudo de Miami, donde no competía desde 2019, Djokovic fue recuperando sus mejores sensaciones y despachando rivales sin dejarse un solo set armado con el servicio más afilado que se le recuerda.
Con su contundente triunfo sobre Grigor Dimitrov del viernes, Nole le arrebató a Federer la condición de finalista más veterano de un Masters 1000 y este domingo tendrá la oportunidad de recortarle distancia en el número total de títulos: el suizo, retirado en 2022 con 103 trofeos, y el estadounidense Jimmy Connors, con 109, son los únicos que siguen por delante de Djokovic en ese registro. Lionel Messi estuvo en la tribuna y luego se encontraron en los vestuarios.
An honor to meet the greatness and his whole family. Gracias Leo. Asta pronto 🙌💪 pic.twitter.com/E6NnuHJSv0
— Novak Djokovic (@DjokerNole) March 28, 2025
“Después de los Juegos Olímpicos sabía que cada torneo que jugaba iba a ir por el 100″, reconoció Djokovic el viernes. “No he sido capaz de conseguirlo hasta ahora, pero ojalá pueda el domingo. Estoy jugando mi mejor tenis en mucho tiempo y voy a ir a por todas”, aseguró.
En un torneo que vivió las salidas tempranas de favoritos como Alcaraz y el ruso Daniil Medvedev, el último obstáculo de Djokovic hacia el récord centenario es Jakub Mensik, un joven talento que tomó la raqueta para emular al serbio. “Es mi mayor ídolo. Si no fuera por él, no estaría aquí”, declaró el checo, número 54 del ranking hasta hoy, en una entrevista con la ATP el año pasado.
Tercer finalista más joven de Miami tras Alcaraz y Nadal, Mensik entrenó en 2022 en Belgrado con Djokovic por una invitación que recibió y el año pasado ambos vivieron su primer duelo, saldado con triunfo del serbio en Shanghai, en tres sets. Novak aseguró el viernes que tendrá ahora enfrente a un jugador completamente diferente, hambriento también por estrenar su palmarés en su segunda final profesional.
En Florida ha ratificado que dispone de un servicio temible (25 ‘aces’ en la semifinal ante Taylor Fritz) y que no le tiembla el pulso frente a las mayores figuras, con un registro de siete victorias en 12 duelos contra miembros del Top-10 de la ATP. “Ahora es diferente a Shanghai. Soy mejor jugador y voy a disfrutarlo. Será un partido emocionante y veremos qué pasa”, avisó.
AFP