Nahuel Guzmán pasó de mago y mimo a equilibrista en un penal, pero no pudo evitar que Tigres quede eliminado de la Leagues Cup

Nahuel Guzmán busca distraer a Sergio Canales
Nahuel Guzmán busca distraer a Sergio Canales "haciendo equilibrio" en la línea del arco de Tigres, antes del penal sobre el final del partido - Créditos: @Captura de t

Otra vez, un penal. Y nuevamente, el arquero rosarino Nahuel Guzmán brindando un show antes de la ejecución con la intención de distraer al pateador. Pasó de hacer un truco de magia y de mimo en la definición favorable de la noche del viernes pasado ante Vancouver Whitecaps a simular ser un equilibrista sobre la línea del arco previo al disparo del español Sergio Canales. Pero esta vez, el Patón no pudo evitar la eliminación de Tigres, su equipo, frente a Monterrey, el único equipo mexicano que accedió a los cuartos de final de la Leagues Cup.

El duelo de conjuntos aztecas que clausuró la etapa de octavos de final, jugado en la noche estadounidense del martes en el estadio que es la sede del Houston Dynamo, iba camino a otra definición desde los doce pasos, sin goles en los 90 minutos. Sin embargo, en el séptimo minuto de los nueve adicionados, un penal para Monterrey puso a los Rayados de cara a la oportunidad de superar la instancia. El encargado de patear fue Canales, que hacía su debut en ese club. Delante suyo, Guzmán y sus tretas para burlarse de la regla reconocida en el mundo del fútbol como “Anti-Dibu”.

Después de pasar por Racing de Santander, Real Madrid, Valencia, Real Sociedad y Betis, el jugador español se encontró ante la situación de un arquero haciendo movimientos para ponerlo nervioso en la acción que podía definir el partido, como sucedió. No tuvo efecto en este caso, pero el exjugador del seleccionado argentino hizo como que se caía hacia adelante, primero, y luego comenzó a caminar sobre el sector pintado con sus brazos estirados hacia los costados, como si estuviera haciendo equilibrio sobre una soga en el aire.

Advertido por el árbitro para que no continúe con eso, le hizo señas que había algo tirado en el piso, se acercó unos pasos hasta allí y lo arrojó afuera del campo, antes de volver al medio del arco, casi tambaleando. Nada perturbó a Canales, que volvió a tomar distancia de la pelota y resolvió a la izquierda del exNewell’s, mientras el arquero se arrojaba hacia el otro lado. Así, al filo del pitazo final, Monterrey logró el 1-0 que le dio la victoria y el pasaje a la siguiente instancia, donde se encontrará este viernes con Los Angeles, en el Rose Bowl de Pasadena, por el otro lado del cuadro que tiene a Inter Miami, con Lionel Messi, también en cuartos.

“Él hace muy bien. Intenta poner nervioso al rival, pero yo estaba muy tranquilo, lo conocía por los penales anteriores”, dijo más tarde Canales, que había visto la actuación de Guzmán en el encuentro anterior en Canadá.

La cuenta oficial de Tigres, club en el que está hace casi 10 años tras seis temporadas en Newell’s, se había sumado a lo ocurrido el viernes pasado: “No trates de entender el Nahuelismo, solo disfrútalo”. Esta vez, no hubo ninguna mención tras indicar que había terminado el partido y agradecer a los hinchas por “pintar Houston de amarillo”.

Lo sucedido con Guzmán se produce en medio de las repercusiones por las declaraciones de Emiliano Martínez, el arquero del seleccionado argentino que tanto en la Copa América de Brasil como en el Mundial de Qatar 2022 apeló a situaciones psicológicas para distraer a los adversarios. “Yo a mi familia y a mi gente cercana les decía que da igual, ya somos campeones. La hicieron tarde. Los delanteros se pueden frenar, pueden hacer todo y nosotros no podemos ni hablar. Me parece que está mal... Yo atajé lo que tenía que atajar”, sentenció en Urbana Play, al ser consultado sobre la reglamentación que se puso en marcha en julio de este año.

Esta vez, a Guzmán no le alcanzó con su show. Los que festejaron fueron sus rivales, para sostenerse como el único equipo de la Liga de México que continúa en carrera. Ya no hubo margen para dar vuelta la historia.