Miembro de la RAF detenida, llevada ante el juez del Supremo para conocer los cargos

Berlín, 7 mar (EFE).- La Fiscalía Federal alemana llevó este jueves ante el juez de instrucción del Tribunal Supremo para informarle de los cargos que se le imputan a la antigua terrorista de la Fracción del Ejército Rojo (RAF) Daniela Klette, detenida el lunes de la semana pasada en Berlín tras treinta años en busca y captura.

Según el comunicado de la Fiscalía, se le imputan dos intentos de asesinato, así como del intento y de consumación en complicidad de la detonación de material explosivo.

El escrito de acusación establece que Klette pertenecía a la llamada tercera generación de RAF y participó en tres atentados de la organización terrorista entre febrero de 1990 y marzo de 1993.

En la mañana del 25 de febrero de 1990, la acusada y otros miembros de la RAF, como "Unidad de combate Fede Elisabeth", intentaron detonar material explosivo en el edificio administrativo del Deutsche Bank en Eschborn.

Para ello, aparcaron un VW Golf con 45,05 kilogramos de explosivos en el maletero, en la zona de acceso al edificio, aunque la explosión no se produjo por un fallo en el detonador.

De haber explotado, la onda expansiva habría alcanzado el recinto de seguridad, donde en esos momentos se encontraba tres miembros del personal de seguridad de Deutsche Bank AG, que podrían haber muerto.

En la noche del 13 de febrero de 1991, Klette y otros miembros de la RAF llevaron a cabo como "Comando Vincenzo Spano" un ataque con armas de fuego contra la embajada estadounidense en Bonn-Bad Godesberg.

Los miembros del comando efectuaron al menos 250 disparos con armas largas automáticas contra el edificio de la embajada desde la orilla opuesta del Rin, de los cuales 65 impactaron en el edificio, en el que se encontraban al menos diez personas.

En la madrugada del 27 de marzo de 1993, el comando "Katharina Hammerschmidt" de la RAF llevó a cabo un ataque con explosivos contra la recién construida prisión de Weiterstadt, que todavía no contaba con reclusos.

Formaban parte del comando, además de Klette, Ernst-Volker Staub y Burkhard Garweg, que siguen en busca y captura.

Los miembros del comando escalaron el muro de la cárcel, sorprendieron al personal de seguridad y a algunos funcionarios de prisiones y se los llevaron en una furgoneta VW.

Posteriormente, el comando detonó varios artefactos explosivos en el centro penitenciario, que dejaron daños en el edificio administrativo y en cuatro edificios de celdas por un valor total de 123 millones de marcos alemanes (unos 63 millones de euros).

Paralelamente, Klette está siendo investigada en el estado federado de Baja Sajonia por robos a vehículos de transporte de efectivo y a supermercados.

Tras su comparecencia ante el juez de instrucción del Supremo, Klette iba a ser conducida de nuevo a Baja Sajonia, donde se encuentra en prisión preventiva.

Tras décadas de incertidumbre sobre su paradero, la policía localizó a Klette, de 65 años, gracias a un soplo recibido el pasado noviembre y detuvo a la última mujer de la RAF en busca y captura hace diez días en Berlín.

La fugitiva vivía desde hace más de 15 años en el centro de la capital alemana bajo una identidad falsa y aparentemente estaba bien integrada en el barrio, donde ayudaba a sus vecinos y participaba en actividades de danza.

(c) Agencia EFE