Marcos Rojo, la bandera de Boca ante River: cómo le fue en los superclásicos, la pelea con Enzo Pérez y el llamado de Gallardo

Marcos Rojo con Darío Herrera y Enzo Pérez en la antesala de un superclásico que Boca le ganó 1 a 0 a River en la Bombonera con gol de Darío Benedetto
Marcos Rojo con Darío Herrera y Enzo Pérez en la antesala de un superclásico que Boca le ganó 1 a 0 a River en la Bombonera con gol de Darío Benedetto - Créditos: @Daniel Jayo

El 20 de marzo de 1990, Carlina Arellano, hincha fanática de River, y Faustino Marcos Rojo, hincha fanático de Boca, cele­braron la llegada al mundo de su segundo hijo varón. Unas horas después, Boca recibía a Unión en la Bombonera y River visitaba a Chaco For Ever en un partido clave por el título, por lo que Carlina y Titi barajaron la posibilidad de que Faustino Marcos Jr., el nuevo integrante de la familia, adoptara los colores del equipo que resultara ganador.

Pese a la derrota del Xeneize en casa y a la victoria 1-0 del Millonario, la puja entre mamá y papá se mantuvo varios años. Ella, admiradora de Enzo Francescoli, soñaba con ver a su hijo con la 9 de la banda roja. Crack de la liga platense, en la que jugaba con la 10 en la espalda, llevó a Marcos al club Malvinas de San Carlos para que diera sus primeros pasos con la pelota y empezara a familiari­zarse con la camiseta azul y oro. Dos décadas des­pués, la dis­puta por Marcos Rojo tendría como protagonistas a Juan Román Riquelme y a Marcelo Daniel Gallardo, quienes buscaron con­vencer al ex Es­tudiantes y Manchester United de defender el escudo de su club. Este sábado, con Riquelme en el palco y Gallardo de regreso al ban­co visitan­te, el zaguero de 34 años disputará el décimo superclásico de su carrera y estirar su racha triunfal ante el rival de ¿toda? la vida.

Rojo debutó en Boca en un encuentro vs. River y además disputó otros nueve encuentros frente al conjunto de Núñez, con un saldo a favor de tres victorias, tres empates y una sola derrota, en la que solo permaneció en cancha los primeros 16 minutos. Además, acumula dos rojas y una tercera expulsión en el último clásico disputado en la Bombonera, tras reclamar desde un costado del campo de juego un supuesto codazo de Paulo Díaz a Marcelo Weigandt en la acción anterior al 2-0 del Millonario.

Pero el historial de Rojo contra River incluye además dos goles en su etapa en Estudiantes, una pelea “a muerte” con Enzo Pérez y declaraciones rimbombantes contra el público riverplantese. Un compendio de condimentos que lo convierten, sin dudas, en uno de los grandes personajes de este nuevo superclásico.

Chiquito Romero, Marcos Rojo, Cristian Lema y Tomás Belmonte, en la primera fila camino a un entrenamiento de Boca
Chiquito Romero, Marcos Rojo, Cristian Lema y Tomás Belmonte, en la primera fila camino a un entrenamiento de Boca - Créditos: @Prensa Boca

A comienzos de 2021, Rojo concluyó su etapa en la Premier League y concretó su segunda vuelta al fútbol argentino luego de su frustrado paso por Estudiantes de La Plata. Tras acordar su salida, Juan Sebastián Verón, Juan Román Riquelme y Marcelo Gallardo fueron los primeros en contactar al jugador. Sin embargo, Rojo privilegió el interés de Boca por encima del de River y Estudiantes y su primer partido fue justamente ante el conjunto de Gallardo (ingresó 17 minutos). Aquella decisión le valió, además del malestar de la Bruja, el enojo de su amigo Enzo Pérez, que también lo había seducido para incorporarse al Millonario.

“Una persona me llamó y me dijo que vaya a River porque iba a ganar todo, pero no ganó todo porque acá ganamos nosotros”, contó Rojo en agosto de 2021, cuando Boca eliminó al River de Gallardo en octavos de final de la Copa Argentina. Nunca se supo si la referencia era para el Muñeco o para el propio Enzo Pérez, con el que Rojo tuvo varios cruces a lo largo del partido.

El defensor, que debió ser expulsado por un planchazo en la espalda de Julián Álvarez, convirtió el primer penal de la serie y el Xeneize avanzó en los penales. Antes de eso, Rojo había jugado su primer Súper de titular en la victoria de Boca en la Copa de la Liga de ese año, también por penales, frente a un River diezmado por las bajas por Covid que tuvo en el arco al debutante Alan Leonardo Díaz.

Marcos Rojo, un pieza de Boca que aspira a ser clave ante River, en la Bombonera
Marcos Rojo, un pieza de Boca que aspira a ser clave ante River, en la Bombonera - Créditos: @Marcos Brindicci

La única caída de Rojo contra River (el rival que más veces enfrentó con la camiseta de Boca, junto con Estudiante) se dio recién en el Campeonato de 2021, en su primer superclásico en Núñez. Fue una tarde negra para Marcos porque vio la roja a los 16 minutos del primer tiempo por dos infracciones aisladas contra el lateral (uno sobre Brian Romero, el segundo a Agustín Palavecino) y el equipo, afectado por la expulsión, volvió a perder con River después de cuatro partidos.

Por ese episodio, su regreso al Monumental volvió a tener condimentos especiales. Reprobado desde la entrada en calor, Rojo portó la cinta de capitán por la ausencia de Carlos Izquierdoz y sostuvo desde el fondo un triunfo de Boca épico, con Agustín Rossi sacando todo y una gran solidez defensiva. “En un momento los dejamos en silencio. Dentro de la cancha no me daba cuenta, pero cuando salí vi a la gente que estaba callada. Tenían tensión y se veía en equipo”, disparó tras la victoria.

Más adelante llegaría el 1-0 con gol de Darío Benedetto, en el que Rojo vio la roja en el final por un patadón a la cabeza de Nicolás de la Cruz, y el 3-2 en Córdoba en la Copa de la Liga de este año, en la que tuvo cierta responsabilidad en el primer gol de Miguel Borja: retrocedió de espaldas al ataque de River y perdió la marca del colombiano.

Aunque su presente no es el mejor, Rojo tendrá un lugar asegurado en el Súper de este sábado. Aquejado por una molestia muscular, fue preservado ante Talleres y Racing y esta semana redobló esfuerzos para poder estar presente frente a River. Diego Martínez, de hecho, probó con un esquema con tres zagueros y otra con dos, y en ambos casos Rojo se mantendrá entre los 11 a pesar del buen momento de Cristian Lema y, fundamentalmente, de Aaron Anselmino. “Por más que esté rengo, se pelee o lo echen, tiene que estar, es el mejor defensor de Boca”, lo defendió Hugo Gatti, símbolo de la historia xeneize.

Rojo aún no pudo convertirle a River con la camiseta de Boca, aunque sí le marcó con la de Estudiantes. De hecho, su primer grito como profesional lo anotó en el Monumental, en una victoria del Pincha 2-1 en el Clausura 2009, y luego repitió a la temporada siguiente en el triunfo 4-2 de los platenses en el Antonio Vespucio Liberti. Este sábado, tal vez, logre romper el maleficio.