Marco Odermatt y Federica Brignone serán coronados en Sun Valley
El suizo Marco Odermatt, que ya certificó matemáticamente su cuarta victoria seguida la pasada semana, y la italiana Federica Brignone, que podría hacerlo este mismo sábado, serán coronados como ganadores de la Copa del Mundo de esquí alpino en las finales de la competición de la regularidad, que hasta el próximo jueves se disputarán en la estación de Sun Valley (Estados Unidos).
Odermatt ya tiene asegurado, a los 27 años, su cuarto gran Globo de Cristal, ya que los 590 puntos que le saca al noruego Henrik Kristoffersen (1.596 frente a 1.006) son insalvables en las cuatro carreras que quedan. Brignone, de 34, le saca 382 (1.454-1.072) a Lara Gut-Behrami; a la que sucederá en el historial de la competición en el momento que sume 19 puntos: cantidad suficiente para neutralizar unos hipotéticos y poco probables cuatro triunfos de la suiza en el cierre del curso.
Salvo el muy improbable giro de guión final, Brignone, que este curso batió todos los récords de veteranía -se convirtió en la ganadora en Copa del Mundo y (en la cita de Saalbach, Austria) en la medallista y en la campeona mundial de más edad- capturará su segunda gran Bola de Cristal, después de que hace cinco años, en el certamen de la pandemia, se convirtiera en la primera mujer italiana en ganarla.
Odermatt puede repetir los cuatro globos de 2024
Odermatt, que también tiene garantizadas los Globos de Cristal de gigante -también por cuarto año seguido- y supergigante, puede repetir el 'pleno' que firmó el año pasado si vuelve a añadir al de la general los triunfos en las tres disciplinas que disputa. Eso pasaría por asegurarse este mismo sábado la victoria en la Copa del Mundo de descenso, que también lidera claramente. El único que lo podría evitar es su compatriota Franjo von Allmen, que el mes pasado capturó oro mundial en Saalbach y al que 'Odi' supera en 83 puntos (605-522).
La única disciplina que está algo más abierta en hombres es el eslalon, que, al igual que el femenino, se resolverá durante la jornada de cierre del próximo jueves. El noruego Henrik Kristoffersen, de 31 años, que lidera con 612 unidades, la puede ganar por cuarta vez si defiende 47 ante el suizo Loic Meillard, flamante campeón mundial; y 86 ante el francés Clement Noel campeón olímpico de la disciplina.
Brignone también puede lograr pleno: lidera dos copas y es segunda en otra
Brignone ya está completando una temporada sensacional. Pero ésta aún podría ser de auténtico ensueño, porque nadie duda de que ganará la general, pero también lidera las clasificaciones de descenso y supergigante; y es segunda en la de gigante.
En mujeres no hay ninguna modalidad resuelta. Brignone se juega este sábado la Copa del Mundo de descenso con la austriaca Cornelia Hütter y con su compatriota Sofia Goggia.
La campeona milanesa lidera esa clasificación con 384 puntos: 16 más que Hütter y con 34 sobre Goggia, así que el arranque de las finales de la competición de la regularidad que alberga la estación del estado de Idaho promete emoción.
Abren el descenso y el 'super'; la próxima semana habrá pruebas técnicas
Una vez se resuelvan las Copas de descenso, el domingo Brignone se jugará la de supergigante con Lara Gut (con 46 victorias en esta competición, una más que su compatriota Odermatt; que, sin presión, ese día recogerá la Bola de Cristal de esa modalidad).
'Fede' suma 570 puntos, sólo cinco más que la 'gran dama' del esquí suizo; que, unos días antes de cumplir 34, intentará aguarle la fiesta a la italiana y ganar su tercera Copa del Mundo seguida de 'súper'. Disciplina en la que Gut -ganadora de todo- buscará su sexto Globo. El tercero seguido.
El lunes será día de descanso o jornada de hipotéticas pruebas pospuestas. Y el martes, Brignone le discutirá la Copa de gigante a la neozelandesa Alice Robinson, que comanda con 520 unidades, veinte más que ella.
Las copas del mundo de eslalon, por decidir; Kristoffersen, a por la cuarta
El miércoles se correrá el gigante masculino y el jueves tendrán lugar en Sun Valley las dos últimas carreras de la temporada. Las de eslalon. Dos clasificaciones que aún están por decidir, en una disciplina que no disputan ni Odermatt, ni Brignone.
Cierra el curso el eslalon masculino, en el que Kristoffersen busca su cuarta Bola ante el campeón del mundo y el campeón olímpico. Pero antes, ese día se disputará el femenino, la Copa que se resolverá con mayor número de aspirantes; cuatro en total.
La croata Zrinka Ljutic comanda esa clasificación con 515 puntos, 41 más que la suiza Camile Rast -oro mundial en Saalbach- y con 51 sobre la austriaca Katharina Liensberger. Con (muy lejanas) posibilidades matemáticas también está otra helvética, Wendy Holdener, a la que sólo le vale ganar la carrera y esperar un descalabro de las tres anteriores.
Shiffrin, sin opciones, busca su victoria 101; Suiza, primera potencia mundial
La estadounidense Mikaela Shiffrin, la mejor esquiadora de todos los tiempos, afrontaba este curso con miras a igualar el récord histórico de victorias globales en esta competición (seis) de la austriaca Annemarie Moser-Pröll, que 'arrasaba' en los años 70. Pero una lesión la apartó de las pistas durante dos meses, por lo que se conformó con elevar a cien su récord absoluto de triunfos, al anotarse el eslalon de Sestriere.
Con 30 años recién cumplidos, la súper-campeona de Vail (Colorado) no se llevará a casa ningún Globo este año -cuenta 16, en total-, pero tendrá la ocasión de sumar, ante su afición, su victoria número 101, en unas finales sin ningún deportista de 'SpainSnow'. El único español presente en Sun Valley es el andaluz José Luis Alejo, que, después de triunfar los años anteriores al lado de Lara Gut, este curso pasó a ser entrenador del nuevo rey, Odermatt, del que indicó a Efe que es "un campeón sencillo, un 'disfrutón' y un gran compañero".
Pase lo que pase las próximas jornadas, Suiza, que volvió a arrasar este curso, confirmará su condición de primera potencia mundial. La Confederación Helvética se anotará de nuevo, y con enorme ventaja, la Copa de las Naciones; que lidera con 10.020 puntos, 3.242 más que a Austria: a la que ya relevó hace un par de años como nación hegemónica en el deporte rey invernal.
Adrián R. Huber
(c) Agencia EFE