Máxima preparación: las exigencias físicas a las que se somete Franco Colapinto en la Fórmula 1

Franco Colapinto con una toalla para la sudoración en los hombros y el chaleco refrigerante, elementos tradicionales a los que apelan los pilotos para mantener la temperatura corporal en el agobiante Gran Premio de Singapur de Fórmula 1.
Franco Colapinto con una toalla para la sudoración en los hombros y el chaleco refrigerante, elementos tradicionales a los que apelan los pilotos para mantener la temperatura corporal en el agobiante Gran Premio de Singapur de Fórmula 1. - Créditos: @Jayce Illman

Exhausto, casi sin energía, con fuertes dolores en el estómago… En un video en las redes sociales, la Fórmula 1 reflejó las dificultades que tuvieron varios pilotos, entre ellos Franco Colapinto, para salir del auto en el circuito callejero de Marina Bay, después de un gran premio de 62 vueltas y con una temperatura y una humedad agobiantes. La carrera más desgastante y salvaje del año quedó atrás en el calendario para el joven piloto argentino y para el resto de los integrantes de la grilla, que padecen cada vez que el Gran Circo visita el trazado de Singapur.

El pilarense sometió a su cuerpo a un escenario nuevo y feroz, aunque desde hace un tiempo lleva adelante una preparación que se ajustaba a un plan que contemplaba un objetivo: capturar una de las 20 butacas más selectas del automovilismo mundial. Carreras de autos o uno de los deportes que requieren de mayor destreza técnica y resistencia extrema del físico y la mente para completar una tarea que no superará las dos horas, pero que en ocasiones deja secuelas a lo largo del día.

Colapinto hidratándose en Singapur, donde la temperatura en el cockpit alcanzó los 60 grados centígrados; el argentino ensaya sesiones de una hora, tres veces por semana, para fortalecer el cuello y soportar las fuerzas G.
Colapinto hidratándose en Singapur, donde la temperatura en el cockpit alcanzó los 60 grados centígrados; el argentino ensaya sesiones de una hora, tres veces por semana, para fortalecer el cuello y soportar las fuerzas G. - Créditos: @NurPhoto

Uno de los pioneros en la preparación física fue Ayrton Senna, que en 1984 contrató al preparador físico paulista Nuno Cobra. El tricampeón del mundo no superó el primer desafío que le impusieron: correr a pie cuatro kilómetros en menos de 20 minutos. Durante los siguientes diez años, el entrenamiento resultó una obsesión: 100 kilómetros semanales y varias horas diarias de gimnasio. El muelle Petrobras de Angra dos Reis y las playas de alguna isla fueron espacios para recorrer 22 kilómetros en 90 minutos. Reproducían la frecuencia cardíaca y la temperatura externa de una carrera de F. 1.

Fue un adelantado: poco más de tres décadas atrás, Nigel Mansell y Nelson Piquet, dos campeones del mundo, finalizaron carreras al borde del desmayo por cansancio. “Nunca vieron un gimnasio desde adentro y algunos hasta fumaban. No estaban lo suficientemente en forma”, recordaba Franz Tost, exdirector de Alpha Tauri.

En los primeros años del nuevo milenio, los pilotos de Renault viajaban a Kenia, donde Flavio Briatore tenía una residencia –Lion In The Sun–, para hacer una pretemporada: mountain bike, trekking en las dunas, footing en arena compacta, piragüismo y musculación constituían la parte dura; waterpolo, voléibol y buceo, la relajación.

Resistencia, fuerza, flexibilidad, reacción, coordinación… Son múltiples los ejercicios que los pilotos desarrollan según un plan. “Franco tiene un grupo de trabajo y la parte física está a cargo de una empresa en la que se alistan varios pilotos de primer nivel mundial. Tiene una rutina física y de alimentación: la información de lo que come y cómo está mentalmente se envía a Williams en reportes semanales, donde se lo evalúa. Para elegirlo lo analizaron mucho y evaluaron que estaba preparado en ese aspecto, porque el entrenamiento físico es superlativo: hace cuello tres veces por semana, una hora de ejercicios por cada sesión. Este año dio un salto gigante en nutrición; tiene la rutina de todo lo que debe comer y tomar después de cada entrenamiento para recuperarse. Además, un fisioterapeuta que está en todos los detalles. Es un deportista de elite”, comentó Lucas Benamo, el primer coach que tuvo el pilarense, en una charla con ESPN.com.

Lewis Hamilton y Max Verstappen, campeones del mundo en el desgastante circuito de Marina Bay; el piloto británico contó que pueder perder hasta cuatro kilos en un gran premio.
Lewis Hamilton y Max Verstappen, campeones del mundo en el desgastante circuito de Marina Bay; el piloto británico contó que pueder perder hasta cuatro kilos en un gran premio. - Créditos: @Vincent Thian

Puedo perder hasta cuatro kilos en una carrera de 1h45m, y los circuitos de Singapur y Malasia [no se corre desde 2017] son los peores por el calor y la humedad. El peso es muy importante: si estoy con un kilo de sobrepeso, puedo perder hasta dos segundos en una vuelta; si fuera muy musculoso de hombros mi peso sería más alto, pero hay que tener una buena estabilidad, un centro de gravedad bajo, y por esa razón no se puede tener un gran volumen muscular. La F. 1 es increíblemente física: la fuerza G que recibimos es como ir sobre rieles a 240 o 290 km/h, y al girar, el cuerpo quiere ir en la dirección contraria”, señaló hace un par de meses Lewis Hamilton (Mercedes).

El británico, en el Gran Premio de la Toscana 2020, registró 4,9G, 5,6G y 5,2G en las curvas 6, 7 y 8 del circuito de Mugello; ese año, Valtteri Bottas alcanzó los 5,2G en la curva Parabólica, de Monza, pista donde debutó Colapinto y en la que el neerlandés Nick de Vries reemplazó a Alexander Albon en Williams en 2022; el europeo necesitó asistencia del equipo para salir del auto.

En la próxima cita, en Austin, los autos llegarán a una curva a 325 km/h y en 104 metros la velocidad rebajará a 81km/h, con una fuerza G de frenado de 5,5. Los accidentes también imponen una desaceleración brutal: el golpe de Romain Grosjean que terminó en incendio en Bahréin 2020 tuvo el equivalente a 67 fuerzas G. También milagroso, aunque no debió escapar de lenguas de fuego, fue el accidente que protagonizó el polaco Robert Kubica en el GP de Canadá 2007: sobrevivió a un impacto de 75G. ¿Cómo se simula la presión que genera la fuerza G en el cuello? Tareas con poleas y cargas que varían entre los 20 y los ¡80 kilos!

El polaco Rubert Kubica (Williams) se accidentó contra las protecciones del circuito de Montreal en 2007: la fuerza del impacto fue de 75G.
El polaco Rubert Kubica (Williams) se accidentó contra las protecciones del circuito de Montreal en 2007: la fuerza del impacto fue de 75G.

Hamilton, hasta hace unos años, relativizaba las cuestiones físicas, restaba importancia a la preparación y hasta señaló que los autos no eran severos con el cuerpo del piloto. “Me subía al auto y manejaba, sentía que los autos no eran exigentes y que por eso los jóvenes de 18 años los manejaban sin problema. Creía que para tratarse de un deporte, un piloto debía terminar físicamente destrozado después de una carrera”, apuntaba un lustro atrás el ahora séptuple campeón, que sí resaltaba un aspecto para él decisivo: “Es importante tener un buen sistema cardiovascular, porque el ritmo cardíaco es de entre 160 y 170 latidos por minuto en carrera y en la prueba de clasificación puede ascender a 190 latidos”. En su preparación combinó boxeo y muay Thai –arte marcial tailandesa que utiliza puños, piernas, rodillas y codos– con pilates.

Calor y espacio reducido, una combinación que pone a prueba la resistencia física de los pilotos de Fórmula 1.
Calor y espacio reducido, una combinación que pone a prueba la resistencia física de los pilotos de Fórmula 1.

En alimentación, Hamiton es el primer piloto vegano de la grilla. Una dieta de un piloto se compone de carbohidratos de combustión lenta, ricos en fibra, procedente de cereales, arroz integral y legumbres, en lugar de pastas. Son fuentes de potasio y de magnesio para ayudar a la mente, los músculos y el sistema nervioso. Las frutas y las verduras son bajas en grasa y ricas en energía, vitaminas y minerales; la barra de ensaladas es de acceso ilimitado.

Cinco a siete raciones de fruta y verdura al día son un mínimo que se aconseja cumplir. Dos gramos de proteína por cada kilo de peso corporal para mantener la masa se replican en una dieta que incluye pollo y pescado, mientras que el tofu y las legumbres son perfectos para los veganos, como el heptacampeón del mundo. ¿Tienen “permitidos” los pilotos? La mayoría elige la hamburguesa con queso; Max Verstappen, la sopa de tomates –plato favorito en la infancia–; la pizza y la pasta cautivan a Yuki Tsunoda. Los de Colapinto son variados: milanesa con puré, asado, fugazzeta y, entre las golosinas, el alfajor.

En el Gran Premio de Malasia 2005, Fernando Alonso estuvo a punto del desmayo por un golpe de calor; el piloto asturiano detesta hidratarse durante las carreras.
En el Gran Premio de Malasia 2005, Fernando Alonso estuvo a punto del desmayo por un golpe de calor; el piloto asturiano detesta hidratarse durante las carreras. - Créditos: @Sergei Grits

El calor y el espacio reducido del cockpit –en carrera la temperatura alcanza los 60° en ocasiones– son otros obstáculos. El aire que reciben los pilotos no es fresco y sí bastante húmedo. La hidratación es fundamental, aunque no siempre ocurre. “Casi nunca tomo agua durante la carrera, me olvido, y por eso a veces Bono [el ingeniero Peter Bonnington] me recuerda que debo hacerlo. En Singapur tenía ganas de tomar algo, pero el mecanismo no funcionaba”, reveló Hamilton sobre la reciente carrera en Marina Bay.

El mexicano Sergio Checo Pérez (Red Bull Racing) tampoco consumió líquido y Fernando Alonso (Aston Martin) tuvo un calambre en el pie izquierdo mientras conversaba con los medios, debido a que no se hidrató: “Casi nunca bebo y tampoco tenía agua. Odio beber en carrera, no puedo conducir con el pitorro en la boca”, relató el asturiano, que, durante el infierno de Malasia, en 2005, sufrió un golpe de calor durante la ceremonia de premiación. Mientras sonaba el himno español apoyó las manos en las rodillas; más tarde, con la Marsellesa –por Renault–, se puso en cuclillas. Sin fuerza, no descorchó la botella de champagne Mumm.

Alonso es el piloto que más grandes premios protagonizó en la historia de la Fórmula 1, 396; Hamilton es el tercero, y en Singapur cumplió su largada Nº 350. Dentro de tres semanas, Colapinto tendrá en Estados Unidos su cuarta experiencia en el Gran Circo; tomará ese tiempo para recuperarse de Marina Bay y progresar con el equipo Williams.