Lula celebra la "normalidad democrática" de Brasil en la apertura del año judicial

Brasilia, 1 feb (EFE).- El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, participó este jueves en la inauguración del año judicial y celebró que el país haya recuperado la "normalidad democrática", tras el intento de golpe de Estado del 8 de enero de 2023.

El mandatario afirmó que, tras los sucesos de esa fecha, cuando una horda de activistas de ultraderecha asaltó las sedes de los tres poderes del Estado, "todas las instituciones y la propia democracia salieron fortalecidas".

Sostuvo que la sociedad brasileña enfrentó ese día a "una de las peores amenazas de la Humanidad, el fascismo", que "no pudo cerrar ni la Corte Suprema, ni el Parlamento, ni la Presidencia" y cuyo "discurso de odio" fue "derrotado por la democracia".

El líder progresista instó a que ahora el Estado brasileño en su conjunto se concentre en "lograr el crecimiento económico", a fin de poder "reducir todas las desigualdades" que persisten en el país.

El presidente de la Corte Suprema, Luis Barroso, dijo a su turno que, "afortunadamente", ya no necesitan "gastar mucho tiempo hablando de democracia, porque ahora las instituciones funcionan con la más plena normalidad, en una convivencia armoniosa y pacífica".

También valoró que hoy tampoco hay que "hablar de separación de poderes", pues el Ejecutivo, el Legislativo y la Justicia "ahora conviven de manera civilizada y respetuosa", se "tratan con respeto, consideración, educación y, siempre que es posible, con cariño".

Esas consideraciones fueron interpretadas como una alusión a la gestión del expresidente de ultraderecha Jair Bolsonaro (2019-2022), que mantuvo durante esos cuatro años un constante pulso con las instituciones democráticas.

Bolsonaro está investigado en el juicio abierto por el violento asalto a las sedes de la Presidencia, el Parlamento y la Corte Suprema del 8 de enero de 2023, que tenía la intención de forzar un golpe contra el Gobierno de Lula.

Por ese atentado contra la democracia, el Supremo ya ha aceptado denuncias contra unas 1.500 personas y dictado sentencias de hasta 17 años de prisión contra treinta de ellas.

La investigación continúa y la intención de la Justicia es identificar a quienes financiaron el movimiento que intentó derrocar a Lula ocho días después de su investidura.

Además de Lula, asistieron a la sesión el presidente del Congreso Nacional, Rodrigo Pacheco, y otras autoridades del país.

También asistieron el exmagistrado del Supremo y desde hoy nuevo ministro de Justicia, Ricardo Lewandowski, y su antecesor Flávio Dino, quien deja el Gobierno pues el próximo 22 de febrero se integrará como juez al máximo tribunal.

(c) Agencia EFE