Lionel Messi fue elegido como el atleta del año por la revista Time: el hecho “surrealista” y la “histeria absoluta”
Lionel Messi continúa sumando galardones, desde adentro y también desde afuera del ámbito del deporte. TIME, la prestigiosa e influyente revista estadounidense que se publica desde 1923, eligió al capitán del seleccionado campeón del mundo en Qatar 2022 como el Atleta del Año. La portada de diciembre, de un tono rosado (el color de la camiseta de Inter Miami), está construida con tres ilustraciones del astro rosarino jugando para el equipo estadounidense.
TIME publica un largo artículo sobre la Pulga escrito por Sean Gregory, corresponsal deportivo de la revista. El periodista comenzó su nota citando lo que ocurrió el 21 de julio pasado, en Fort Lauderdale, un hecho que todavía le parece “surrealista”. Aquella noche, Messi debutó en Inter Miami y anotó un gol agónico (en el cuarto minuto de descuento) de tiro libre: el equipo dirigido por Gerardo Martino triunfó 2-1 ante Cruz Azul, de México, en la Leagues Cup. Ya nada fue igual para Inter Miami.
“Antes del tiro, el defensor del Inter Miami DeAndre Yedlin se fue al banco con un calambre en la pantorrilla derecha. Advirtió a su entrenador, Gerardo Martino, que no lo eligiera para ejecutar un tiro penal después de que el tiempo reglamentario inevitablemente terminara en un empate 1-1 entre Inter Miami y Cruz Azul en la Leagues Cup, un torneo en el que participan equipos de la MLS y la Liga MX de México. Martino, que conocía la magia de Messi al dirigirlo para Argentina y Barcelona, le dijo a Yedlin que no se preocupara: Messi iba a meter este tiro al fondo de la red y terminar el partido. ‘Pensé, está bien’, dice Yedlin, nada convencido”, escribe Gregory en su artículo.
Y prosigue: “Messi colocó el balón en el césped. Kim Kardashian y LeBron James estaban entre la multitud esa noche, pero nadie los miraba. El balón salió del pie izquierdo de Messi y cuando el disparo comenzó a rodear una pared de media docena de jugadores de Cruz Azul, Yedlin, que estaba parado en el campo detrás de Messi, abrió los brazos en pose de victoria. El disparo de Messi continuó doblándose, doblándose, pasando los brazos extendidos del arquero de Cruz Azul, enviando a los más de 20.000 fanáticos en el estadio DRV PNK y a millones más que miraban en todo el mundo, a la histeria absoluta. El copropietario del Inter Miami, David Beckham, se emocionó hasta las lágrimas. ‘Recuerdo que me subí al auto en el camino de regreso y le dije a Victoria: Ni siquiera estoy seguro de poder conducir a casa’, le dice Beckham a TIME”. Aquel comienzo de la aventura de Messi en el fútbol de los Estados Unidos no podía haber sido mejor imaginado. Y sucedió.
En el mismo artículo, Messi reconoció que, luego de su experiencia en París Saint-Germain, “afortunadamente tenía varias opciones sobre la mesa que eran interesantes, y tuve que analizarlas y pensar, incluso sopesarlas con mi familia, antes de tomar la decisión final de venir a Miami”. El argentino confirmó que volver a Barcelona fue una consideración real. “Mi primera opción era volver a Barcelona, pero no fue posible”, dijo Messi. “Traté de regresar y no sucedió”, agregó. Y Arabia Saudita estuvo muy presente: “También es cierto que después estuve pensando mucho en ir a la liga saudita, donde conozco el país y han creado una competición muy potente que puede convertirse en una liga importante en un futuro próximo (...) Como embajador de turismo del país fue un destino que me atrajo, sobre todo porque he disfrutado de todo lo que he visitado, por cómo está creciendo el fútbol en el país y por el esfuerzo que están poniendo en crear una competición de primer nivel”.
Messi le contó a TIME que “era Arabia Saudita o la MLS, y ambas opciones me parecieron muy interesantes”. El número 10 “conmocionó al mundo al rechazar un contrato de un club saudita que supuestamente valía cientos de millones de dólares al año y al anunciar en junio que firmaría con el Inter Miami”, según la revista estadounidense. Y prosiguió: “No fue sólo la medida lo que fue sorprendente, sino el tamaño y el alcance del acuerdo. Además de los más de 20 millones de dólares al año que le pagaría el Inter Miami, se le concedería una participación en la propiedad del equipo al retirarse y un recorte sin precedentes de los ingresos obtenidos por un socio de medios de la liga, en este caso, Apple. Fue un acuerdo que no sólo reflejó el talento inmaculado de Messi en el campo, sino que también estableció un nuevo estándar para la influencia y el empoderamiento de los atletas”.
Messi ya dejó una huella en el fútbol de los Estados Unidos al anotar 10 goles en siete partidos de la Leagues Cup y llevar a Inter Miami al título. “Una persistente lesión ralentizó su ritmo en la MLS en septiembre, pero eso apenas importó. A los 36 años, dos décadas después de su incomparable carrera, Messi proporcionó un estímulo singular al fútbol en Estados Unidos. La asistencia, los precios de las entradas, las ventas de mercancías y la audiencia se dispararon. Sus juegos adquirieron la sensación de un renacimiento religioso. Después de que Messi anotara un gol contra los New York Red Bulls en agosto, el rapero Fat Joe publicó en Instagram un vídeo de él mismo, casi llorando, gritando ‘¡Messi! ¡Messi! ¡Messi!’”, escribió Time, rendido ante el capitán del seleccionado nacional.