Lesiones y derrota, los Marlins de Miami tienen poco que mostrar en el Día de la Herencia Cubana

Desde cualquier punto que se mire, el Día de la Herencia Cubana no dejó nada bueno para los Marlins. Desde una segunda derrota ante los Rojos, pasando por lesiones de dos figuras importantes en los jardines y una actuación mediana de Sandy Alcántara, la jornada dejó más dudas que certezas.

No se trata ya de que los peces fueron vencidos 6-5 el sábado en la tarde, sino que perdieron a Jesús Sánchez y a Jazz Chisholm en acciones defensivas, mientras que Alcántara se fue con cuatro carreras a su cuenta y cargó con la cuarta derrota de la temporada.

Alcántara sigue en su búsqueda de aquel que ganó el Cy Young. Todavía no ha llegado a ese punto y las señales todavía no alcanzan a definir el momento del lanzador dominicano que no acaba de pasar la página y encontrar su mejor versión.

El astro de la rotación de Miami laboró sin problemas durante cuatro entradas, pero en la quinta permitió un cuadrangular de tres carreras que cambió la decoración del juego y sentaría el tono del triunfo de los Rojos delante de 11,170 aficionados en el loanDepot park.

Alcántara parecía haber pasado la página de los problemas que enfrentó en las primeras salidas de la temporada, porque la actuación previa en Chicago, dejó buenas impresiones cuando caminó ocho episodios de dos carreras, pero ahora no pudo continuar por ese camino.

Jake Fraley -el mismo que pegó dos jonrones en el choque del viernes- le sacó una bola del parque con dos en circulación en el quinto episodio para borrar una ventaja tempranera de Miami gracias a un sencillo de Yuli Gurriel que remolcó a Bryan De La Cruz.

Una vez más, Fraley colocó en problemas a Alcántara en el octavo tramo al impulsor otra con sencillo y liderar un rally de tres anotaciones que pondría punto final a la actuación del dominicano, quien se fue con seis rayitas a su cuenta y ahora su efectividad se muestra en 5.91.

Si los peces contemplaron preocupados la salida de Sánchez debido a un recurrente problema con el tendón de la corva derecho en el mismo primer inning al lanzarse de cabeza para realizar un gran fildeo, experimentaron algo similar cuando Chisholm se incrustó en el jardín central al tratar de capturar un batazo que dio contra la cerca.

Los Marlins tuvieron un último chance de empatar e irse arriba en el marcador cuando un doble de Luis Arráez remolcó la quinta y el equipo llenó las bases con dos outs, pero Gurriel se ponchó, sellando el triunfo de los Rojos.

A pesar de ciertos momentos positivos como un jonrón del propio De La Cruz, no hay mucho bueno para decir de una jornada como esta en que se perdió no solo el partido sino la serie contra Cinncinnati, un conjunto aparentemente asequible. Si no se les gana a estos, qué pasará cuando vuelvan los mejores.