El líder supremo de los talibanes defiende la sharía en su mensaje de Eid

Kabul, 14 jun (EFE).- El mulá Haibatullah Akhundzada, líder supremo de los talibanes, reivindicó este viernes la implementación en Afganistán de la sharía o ley islámica, en un mensaje previo a la festividad musulmana de Eid al-Adha o "celebración del sacrificio", prevista el próximo lunes.

Con la llegada del Emirato Islámico, como se denomina el régimen de facto de los talibanes, "el sistema de la sharía se ha establecido en todo Afganistán. Se está aplicando la sagrada sharía islámica y se han adoptado medidas importantes para elevar las prácticas religiosas y ampliar y fortalecer los centros religiosos", dijo Akhundzada, en un comunicado publicado por el portavoz del Gobierno fundamentalista.

Akhundzada también elogió la labor de los tribunales de la sharía a la hora de promocionar "la reforma social".

"A través del funcionamiento de los tribunales de la sharía (...) el gran deber de ordenar el bien y prohibir el mal se está cumpliendo en la práctica", afirmó.

Con su regreso al poder, en agosto de 2021, los talibanes implementaron una rígida interpretación de la ley islámica, un conjunto de normas y preceptos aplicables en ámbitos religiosos, morales, legales, económicos o políticos.

La ejecución, la flagelación, y los castigos físicos son parte de la implementación de esta norma en Afganistán.

El Gobierno talibán ha ejecutado a cinco personas y ha "castigado" a otras 450, con penas como la flagelación pública o el encarcelamiento, desde que se hicieron con el poder en Afganistán en agosto de 2021, según el Tribunal Supremo afgano.

La imposición de la estricta interpretación de los talibanes de la ley islámica también ha conllevado restricciones al movimiento de las mujeres, su exclusión de los espacios sociales y la prohibición de la educación superior femenina.

La interpretación de este código legal no monolítico es considerado uno de los más rígidos en vigencia.

Akhundzada es una figura elusiva que generalmente se comunica a través de mensajes escritos o grabaciones de voz. Rara vez se le ve en público. Es el tercer líder supremo de los talibanes, nombrado en 2016 después de la muerte de su predecesor, Akhtar Muhammad Mansour, en un ataque con aviones no tripulados estadounidenses en Pakistán.

(c) Agencia EFE