Irlanda vs. Escocia: peleas e incidentes en el partido que decidió el grupo B

Se sabía que el partido entre Irlanda y Escocia decidiría el grupo D. Por eso se jugó con dientes apretados en el césped del Stade de France, una de las catedrales del deporte francés. El primer tiempo tuvo a los irlandeses, primeros en el ranking mundial, como dominadores absolutos: se fueron al vestuario con una ventaja de 26-0. En el segundo, los escoceses salieron a todo o nada. Y la adrenalina les jugó una mala pasada: apenas habían transcurrido dos minutos cuando jugadores de ambos equipos se trenzaron a golpes.

Todo comenzó cuando Ollie Smith se tomó con el irlandés Johnny Sexton. El árbitro, sin miramientos, decidió aplicar al escocés (que había ingresado desde el banco de suplentes) una tarjeta amarilla. Escocia, que estaba quedándose fuera del Mundial, tenía un hombre menos durante diez minutos.

Shoeman vs. Sheehan: a las manos en Escocia vs. Irlanda

En uno de esos encontronazos colectivos se formó una pareja: quedaron juntos el escocés Pierre Shoeman y el irlandés Dan Sheehan. Pero el hooker verde terminó contra las vallas publicitarias luego de un empujón de su rival. El juego se reinició y Sheehan tuvo revancha: un minuto más tarde, apareció libre de marca y consiguió el quinto try de los irlandeses.

La jugada terminó siendo una imagen del partido: Irlanda fue bien sólido en todas sus líneas y aprovechó cada ventajas que le dio el adversario. Nunca, ni aun cuando estuvo 26-0, dio por segura la victoria. Siguió buscando, con la misma intensidad mental y física que mostró desde el comienzo y terminó imponiéndose por 36 a 14. Hizo méritos como para coleccionar tries (seis en total) y conseguir el triunfo, el punto de bonus y el primer puesto del grupo B. Irlanda, número 1 del ranking mundial, terminó invicto en la zona y se medirá en los cuartos de final con Nueva Zelanda, el próximo sábado a las 16, nuevamente en Saint-Denis. Puede ser un enfrentamiento histórico para los celtas: jamás pasaron esa barrera, la de cuartos, en una disputa de la Copa del Mundo. Escocia, por su parte, volverá a casa sin nada, más allá de que fue más en la segunda parte: el parcial fue 14-10.

“Nunca antes, ciertamente, los irlandeses llegaron a las instancias eliminatorias de un Mundial de Rugby tan al galope”, escribe el diario inglés The Guardian. Y continúa: “Los All Blacks demandarán respuestas mucho más desafiantes que los escoceses, pero la energía verde con la que los irlandeses dominaron el juego y dejaron en el camino a sus oponentes fue asomborosa”. The Guardian detalla que aunque el marcador muestre cierta paridad, los irlandeses estaban 36-0 arriba luego de 60 minutos. Fue gracias a los dos tries de Hugo Keenan y las conquistas de James Lowe (que entró a la historia al anotar el try más tempranero en una Copa del Mundo para Irlanda), Iain Henderson, Dan Sheehan y Garry Ringrose.

En la cancha sonó Zombie, de la banda irlandesa Cranberries. Es una suerte de himno del Trébol en este Mundial. Mientras los hinchas festejaban en las tribunas, Peter O’Mahony paseaba por el césped del Stade de France con sus hijos. La sonrisa pintada, en la celebración de su centésima presencia internacional.

“Creía que la atmósfera no podía ser mejor después del partido con Sudáfrica, pero los hinchas probaron que estaba equivocado otra vez. Fue increíble y ellos siguen apoyándonos en las tribunas”, dijo el veterano Johnny Sexton, de 38 años, en declaraciones a ITV. Y agregó: “Es importante que demos la cara por ellos. Nos han dado los mejores días de nuestras vidas y necesitamos brindarles algo similar; estoy seguro. Estamos encantados de ganar el grupo y éste es el lugar en el que queremos estar ahora: en los cuartos de final, contra el rival más duro que podíamos tener. La forma en que el fixture se hizo hace tres días fue algo injusta, pero así se dio y tendremos que estar listos para los All Blacks la semana próxima”, completó Sexton.

Compacto de Irlanda 36 vs. Escocia 14

Para Escocia es una nueva decepción. Se ha vuelto en la etapa de grupos en tres de los últimos cuatro mundiales: la última vez que se clasificó para los cuartos de final fue en Inglaterra 2015, cuando perdió a manos de los neozelandeses por 35-34 en Twickhenham.