Inestabilidad laboral, entre los 5 problemas de los periodistas de Nicaragüa, según ONG

San José, 11 jul (EFE).- La ONG Fundación por la Libertad de Expresión y Democracia (FLED), luego de sostener varias conversaciones con periodistas nicaragüenses, identificó cinco problemas que afectan a los comunicadores que ejercen la profesión dentro y fuera de Nicaragua, como la dificultad de conseguir nuevas oportunidades laborales y el acceso a fuentes e información.

La FLED, que forma parte de la red regional Voces del Sur, llamó a la reflexión y al análisis de cada una de ellas para impulsar acciones que permitan disminuir sus efectos sobre la industria de los medios de comunicación independientes y sus periodistas.

1. Retos del periodismo en el exilio

Las principales dificultades de los periodistas en el exilio están relacionadas al acceso a oportunidades laborales dentro de su campo de especialidad.

Costa Rica, nación a la que han llegado la mayoría y donde algunos decidieron establecerse, registra un alto índice de inseguridad, alto costo de vida, bajos salarios y pocas oportunidades laborales.

Gran parte de los comunicadores han tenido que recurrir a otros oficios para poder cubrir sus gastos y los de su familia. Esto ha provocado que en muchos casos haya desmotivación y falta de tiempo para continuar en la profesión y sostener relaciones con su gremio.

Además, varios periodistas que tuvieron que salir de Nicaragua sin sus documentos tienen dificultades para regularizar su situación migratoria y comprobar sus estudios, lo que los ubica en desventaja para acceder a mejores oportunidades laborales y académicas.

2. Dificultad para acceder a fuentes e información

Periodistas y directores de medios han señalado con preocupación que cada día existe mayor dificultad para acceder a fuentes especializadas y a temáticas diversas, debido a que en Nicaragua no existe información pública y que los funcionarios públicos solo brindan datos e información con un enfoque propagandístico, a favor del partido de Gobierno.

Apuntan además que la mayoría de las fuentes consultadas evitan referirse a temas que cuestionen a los diferentes poderes estatales, incluso si están fuera del país y aunque se les ofrezca proteger su identidad.

3. Afectaciones a la salud mental y preocupación por la seguridad

Los profesionales que continúan en Nicaragua como los que están en el exilio enfrentan problemas de ansiedad, depresión y angustia. A esto debe sumarse que la gran mayoría no están incorporados a la seguridad social, porque no cuentan con los recursos económicos para afiliarse.

Quienes están en el exilio extrañan su país, casa y familia. También temen por el aumento de inseguridad en los países que los han acogido, especialmente Costa Rica. Asimismo se mantienen en alerta por la integridad de sus seres queridos en Nicaragua.

Los que permanecen en Nicaragua comparten que se enfrentan al temor de ser encarcelados o verse obligados a salir del país, muchos de ellos se aferran a sus creencias religiosas y/o sus medidas de protección para sobrellevar de la mejor manera estas preocupaciones.

Algunos de ellos lamentan que tras seis años del inicio de la crisis sociopolítica todavía no se visualicen avances para recobrar los derechos a informar y ser informado de forma profesional.

4. Inestabilidad laboral y bajos ingresos

Los periodistas que colaboran con los medios de comunicación de Nicaragua enfrentan constante preocupación por la inestabilidad laboral.

En general los contratos o acuerdos laborales que logran obtener los comunicadores son temporales y sin los beneficios de ley.

Los montos de los honorarios que reciben por su labor son bajos y la mayoría no compensa el riesgo de ejercer la profesión, ni reconocen los estudios, experiencia y/o horas extras que realizan los comunicadores. Realizan su trabajo más bien motivados en aportar al país y a la ciudadanía.

5. Programa de Movilidad Segura

El Programa de Movilidad Segura impulsado por la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) están facilitando que los nicaragüenses que se encuentran en calidad de refugiados en Costa Rica puedan reasentarse en Estados Unidos o España, y eso también representa que poco a poco los periodistas de Nicaragua que aplican y son aceptados deben dejar a un lado el periodismo y dedicarse a otras labores para subsistir en esos países.

Entre abril y junio de 2024 al menos 15 periodistas que se encontraban en Costa Rica fueron beneficiados con este programa.

Según el testimonio de tres periodistas nicaragüenses reasentados bajo ese programa, ellos aplicaron y aceptaron la Movilidad Segura: "porque económicamente no estaban sobreviviendo en Costa Rica"; porque "el salario que teníamos era solo para pagar la renta y comprar comida”; "por asunto de seguridad"; y para dedicarse a otra actividad laboral que permita "desconectarme o desintoxicarme sobre Nicaragua".

(c) Agencia EFE