Gustavo Alfaro, antes de su debut contra la Uruguay de Bielsa: el arco en cero y una advertencia
Hace apenas tres semanas, Gustavo Alfaro fue presentado como nuevo entrenador de la selección de Paraguay, después de desvincularse de Costa Rica. El DT argentino tendrá la misión de recuperar a un conjunto guaraní que, por el momento, está afuera del repechaje de las eliminatorias, ubicado en el octavo escalón, con apenas un triunfo en seis jornadas, un 1-0 sobre Bolivia como local en octubre del año pasado. Ese gol de Antonio Sanabria fue el único que convirtió Paraguay en los seis partidos jugados por la clasificación sudamericana al próximo Mundial. Como contraparte, sólo le anotaron tres.
“Paraguay es un país muy pasional y futbolero, pero la selección nacional gestiona, aglutina y, en definitiva, encolumna a todos detrás de un objetivo. Cuando uno sabe que recibe este mandato, no solo recibe el privilegio que da estar al frente de este tipo de desafíos, sino que maneja las pasiones de un pueblo entero. En ese sentido, la responsabilidad es muy grande”, había expresado Alfaro, de 62 años, en el momento de presentarse como DT de la Albirroja, tras la salida de Daniel Garnero, destituido después de una pobre actuación en la Copa América de Estados Unidos.
El estreno no será nada sencillo: este viernes, en el Centenario de Montevideo, Paraguay intentará sumar ante la Uruguay intensa y agresiva de Marcelo Bielsa, en un interesante choque de estilos, que tendrá otro argentino como protagonista en el campo de juego: el árbitro Darío Herrera.
La Celeste es, con margen, el equipo más goleador de la Eliminatoria: 13 tantos en la cuenta, con lo que se ubica segundo, con 13 puntos, dos por debajo de la Argentina. Alfaro tomó nota del poder de fuego charrúa y advirtió: “El arco en cero es una necesidad”. Y en una conferencia de prensa amplió: “Intentamos acomodarnos de la mejor manera posible. Implantar una idea de juego en dos días es absolutamente imposible. Trato de interpretar, de hablar con ellos, de analizar las cosas desde el plano futbolístico”.
Por el momento, Alfaro señaló que apelará “a dos o tres cosas básicas, al ADN paraguayo, al fútbol ordenado y aguerrido. Recuperar el ADN paraguayo es luchar hasta el cansancio”. Y aceptó que el debut será difícil, porque se enfrentará con un adversario que llega bien rodaje, mientras que él recién está conociendo a los jugadores de la Albirroja. “Uruguay es un equipo intenso. Tenemos que jugar con la misma intensidad, tenemos que presionar con intensidad y salir de la presión con intensidad”, advirtió el entrenador a los futbolistas paraguayos durante uno de los entrenamientos.
Para expresar su concepto de la defensa, el entrenador nacido en Rafaela contó: “Estaba dirigiendo a Ecuador. Después de la Copa América, el equipo era uno de los que más índice tenía en eficacia en ofensiva, un promedio de gol muy alto. Éramos el equipo que más alto presionaba, junto con Brasil, y el que más rápido recuperaba la pelota tras pérdida. Pero no podíamos mantener el arco en cero. Y yo veía a Argentina y Brasil, que jugaban con intensidades altas también, y analizando las estadísticas, dije ‘el problema está acá’. Y les dije a los jugadores: ‘Muchachos, el arco en cero nos lleva a la Copa del Mundo’. Para eso, tenemos que trabajar el retroceso defensivo. Si presionamos alto, somos el equipo que más alto recuperamos, pero de cada 10 ataques en cinco nos patean al arco, quiere decir que retrocedemos mal. Mejoremos el retroceso defensivo, y el arco en cero nos lleva a la Copa del Mundo. Cuando lo dije, en Ecuador me querían matar. Empezamos las Eliminatorias justo con Paraguay, un partido que lo ganamos al final 2-0. De los ocho siguientes partidos, el equipo mantuvo seis arcos en cero. ¿Cómo terminó la historia? Fuimos a la Copa del Mundo”.
Gustavo Alfaro: “El potencial que tiene este equipo es muy bueno, se puede armar un buen equipo. Ahora, ¿Lo voy a formar en estas dos fechas? No muchachos. Para mí este equipo con un año de trabajo, es de puta madre”.#EliminatoriasSudamericanas pic.twitter.com/k1etEv5AkL
— Tigo Sports (@TigoSportsPY) September 5, 2024
Eso sí: Alfaro es consciente de que no le espera una tarea sencilla. “Lo que a mí más me preocupa tratar de revertir una tendencia negativa. Toto (Berizzo) dirigió 32 partidos (a Paraguay), Guille (Barros Schelotto) 17, Dani (Garnero) 10... ¿Yo cuántos dirijo? ¿6? Entonces, si no tiramos esa curva negativa, nos destruimos. Parecemos Misión Imposible, en cinco minutos nos destruimos. Esta tendencia hay que cambiarla. No es fácil. Van seis fechas, empieza la séptima y va a ser el tercer entrenador que tienen. No es fácil eso. Si uno analiza los estadísticas, son pocos los equipos que tuvieron éxito con tantos cambios. Esto lo supe antes de venir acá. Para se puede formar un buen equipo. El potencial que tiene este equipo es muy bueno, se puede armar un buen equipo. Pero, ¿lo voy a formar en estas dos fechas? No, muchachos. No les voy a mentir, va a costar horrores, pero hay que sacarlo adelante aunque sea con el pecho, recuperar el ADN paraguayo, correrlos a todos, luchar todo”, remarcó el DT.