Francia prohíbe denominar “jamón” y “bife” a productos de origen vegetal

Francia prohíbe denominar “jamón” y “bife” a productos de origen vegetal; solo serán usados para productos cárnicos
Francia prohíbe denominar “jamón” y “bife” a productos de origen vegetal; solo serán usados para productos cárnicos

En una particular decisión, el gobierno de Francia decidió prohibir los términos jamón, bife y entrecot, entre otros, para denominar productos de origen vegetal. El objetivo es que esas palabras solo hagan referencia específica a los productos cárnicos. El sector de la carne reclamaba esta medida porque consideraba que denominaciones como “jamón vegetal”, “salchicha vegana” o “bacon vegetariano” podía generar confusión entre los consumidores.

De acuerdo al decreto oficializado este martes, entre los términos cuyo uso está prohibido para la designación de productos con proteínas vegetales también figuran solomillo, falda, escalope, bife y paletilla, indica la agencia AFP.

Las palabras “que hagan referencia a los nombres de especies o grupos de especies animales, o a la morfología o anatomía animal” también están prohibidos para comercializar productos vegetales. Algunos términos pueden utilizarse para productos alimenticios “de origen animal que puede contener proteínas vegetales”, siempre que se respete un porcentaje máximo de materia vegetal.

Francia prohíbe denominar “jamón”, “filete” o “bife” a productos de origen vegetal
Francia prohíbe denominar “jamón”, “filete” o “bife” a productos de origen vegetal - Créditos: @Michael Probst

En estos últimos, los ingredientes cárnicos se añaden como “complemento” a los alimentos de origen vegetal, como el chorizo, las salchichas o la andouille (embutido tradicional), entre otros. El intento del gobierno francés por prohibir estas denominaciones -que tuvo su primera aproximación en 2022 - entrará en vigor dentro de tres meses y prevé un año de transición para liquidar existencias, así como multas de hasta 15.000 euros (16.280 dólares) en caso de incumplimiento.

”Los productos legalmente fabricados o comercializados en otro Estado miembro de la Unión Europea o un tercer país” siguen estando autorizados, precisa el decreto. A nivel de la UE, solo están prohibidos nombrar productos vegetales con términos usados tradicionalmente para los lácteos, como “yogur” o “queso”.