Congreso de CDMX busca analizar efectos de la gentrificación

CIUDAD DE MÉXICO, julio 24 (EL UNIVERSAL).- El Congreso de la Ciudad de México analizará pedir al Instituto de Planeación Democrática y Prospectiva realizar un estudio integral sobre los efectos de la gentrificación en diversas colonias de la Ciudad.

A petición de la diputada Guadalupe Barrón, la Comisión de Planeación del Desarrollo analizará un Punto de Acuerdo para solicitar que se haga este estudio y que los resultados sean enviados al Poder Legislativo.

La legisladora comentó que este estudio deberá incluir, por lo menos: la recopilación de datos sobre desplazamientos de residentes; cambios en el costo de vida y en los precios de alquiler y propiedad; alteraciones en la composición demográfica y cultural, impactos en los comercios y servicios locales, y recomendaciones para políticas públicas que mitiguen los efectos negativos de la gentrificación.

Recordó que la gentrificación es un fenómeno urbano que implica la transformación de barrios deteriorados, o de clase trabajadora, en áreas de mayor atractivo para personas de ingresos más altos. A medida que las áreas gentrificadas se vuelven más deseables, los precios de la vivienda tienden a aumentar considerablemente.

Este incremento, dijo, puede hacer que las viviendas sean inasequibles para los residentes originales, quienes a menudo son de ingresos bajos o medios. Este fenómeno se observa tanto en el costo de la propiedad como en los alquileres.

"El aumento de los costos de la vivienda y servicios básicos, suele llevar al desplazamiento de los residentes originales, quienes ya no pueden permitirse vivir en su vecindario".

En este sentido, comentó que en el Centro Histórico el aumento significativo de tiendas chinas ha llevado al desplazamiento de comerciantes locales, pues estas tiendas, que ofrecen productos a precios extremadamente bajos, han obligado a muchos negocios tradicionales a cerrar.

Guadalupe Barrón comentó que estas prácticas llevan al desplazamiento de los residentes originales, quienes no pueden competir con los precios de renta más altos ni cumplir con las nuevas demandas de los propietarios.

Subrayó que la preferencia por inquilinos extranjeros también puede cambiar la dinámica social del vecindario, llevando a una pérdida de la identidad y cultura local.

"Los negocios y servicios también se adaptan a los nuevos residentes, lo que puede resultar en la desaparición de comercios tradicionales. Algunas de las alternativas que pueden coadyuvar a combatir estos efectos negativos pueden ser el fomentar políticas que promuevan la inclusión de todos los residentes, independientemente de su capacidad de pago en dólares o su idioma, y adoptar medidas para proteger la identidad y cultura local de la colonia", apuntó.