Acapulco sin agua, electricidad ni combustible tras el paso del huracán Otis

Sin electricidad, agua, telefonía o combustible.

Los ciudadanos de Acapulco sobreviven sin apenas recursos desde hace tres días, cuando el huracán Otis, de categoría 5, llegó a la costa de México.

Las cifras oficiales afirman que ha habido 27 muertos, pero este es un número que lleva desde el miércoles sin actualizarse.

Mientras la población busca alimentos entre los escombros de las tiendas, los sectores público y privado han acordado un plan de acción para impulsar la reconstrucción de la infraestructura básica.

Tras una reunión en Ciudad de México, la Secretaría de Economía (SE) informó en un comunicado que "los empresarios se comprometieron a no encarecer o especular" con los productos y materiales indispensables en medio de la recuperación.

"Las dependencias del Gobierno de México están trabajando estrecha e intensamente para que el estado de Guerrero, y especialmente el puerto de Acapulco que fue la zona más dañada, puedan ser rehabilitados en el menor tiempo posible", apuntó la nota.

Además, el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha enviado a 13 500 miembros de seguridad y a más de 1300 electricistas para evitar el colapso.

Durante su conferencia matutina, el presidente aseguró que su Gobierno que tiene como prioridad “poner de pie” lo más pronto posible a Acapulco, ciudad de cerca de un millón de habitantes y uno de los destinos turísticos más importantes de México.

El jueves, el Gobierno de México garantizó que cuenta con financiamiento y activará dos fondos por más de 600 millones de dólares para afrontar los daños que dejó el huracán.