El Barcelona, al límite: vence y no convence con un polémico penalti

Madrid, 17 feb (EFE).- Otra vez al límite, al borde del desastre, el Barcelona salió este sábado adelante en Balaídos gracias a Robert Lewandowski, autor de un doblete ganador que incluyó un tanto polémico desde el punto de penalti en el minuto 97 con el que el conjunto de Xavi Hernández superó 1-2 al Celta.

El Barcelona se resiste a tirar definitivamente la Liga por el sumidero. Con un partido más y a siete puntos de distancia del Real Madrid, colocar el trofeo en sus vitrinas es casi un milagro. Y si este domingo no llega a ser por el acierto de Lewandowski, bien arropado por Yamine Lamal, el equipo de Xavi estaría fuera de cualquier quiniela a trece jornadas para el final.

El cuadro azulgrana venció pero no convenció ante un equipo necesitado de puntos para escapar del descenso. Y lo hizo con polémica, gracias a una pena máxima en el tiempo añadido que tuvo que repetir Lewandowski después de que Guaita detuviera su primer intento.

El portero del Celta se adelantó antes del lanzamiento del atacante polaco, que después pudo incurrir en una ilegalidad al ejecutar el segundo con una paradinha, sancionada con tarjeta amarilla y falta a favor del equipo rival, en este caso el Celta, tal y como se señaló en un precedente que sufrió Isak con la Real Sociedad en 2022 durante un partido ante el Elche. Además, Guaita volvió a adelantarse y Raphinha, en el momento del lanzamiento, estaba dentro del área.

El gol subió al marcador y el Barcelona sumó tres puntos ausentes de brillo. Xavi, desde que anunció su salida en junio por el bien de su club, sigue sin encontrar la fórmula de la excelencia. Más bien todo lo contrario.

En esta ocasión, el Celta, con el regreso al once de Iago Aspas (gol incluido) después de brillar en el Coliseum, puso contra las cuerdas a un equipo que vive continuamente en el alambre y que en ocasiones sobrevive gracias a individualidades. Y es que, Lewandowski, además de su polémico tanto de penalti, firmó un golazo en la primera parte con el que abrió el marcador. Por los pelos no fue suficiente.

El Atlético, lanzado a San Siro

En el Cívitas Metropolitano Diego Simeone jugó a conservar a sus mejores piezas de cara al choque ante el Inter y triunfó. Salió por la puerta grande. El técnico argentino sentó en el banquillo a Griezmann, De Paul, Hermoso y Witsel. Hermoso y Griezmann ni siquiera jugaron. De Paul, Memphis y Witsel entraron en la media hora final. Y el Atlético no se resintió. Goleó 5-0 y contestó al Inter, que a su vez ganó 4-0 a la Salernitana.

Los menos habituales cumplieron con buena nota. Con una presión brutal arriba anularon por completo el parsimonioso juego de toque, posesión y control de Las Palmas. Y, con una pegada imparable, en la que Marcos Llorente se mostró muy certero en su regreso a la delantera, acabó con uno de los equipos más atractivos de lo que va de temporada.

Y es que, los hombres de Francisco Javier García Pimienta no pudieron hacer nada para frenar al Atlético de Madrid, que a los veinte minutos ya mandaba en el marcador con un doblete de Llorente. Después, en la segunda parte, Correa, que no marcaba dos tantos en un mismo partido desde abril de 2021, se unió a la fiesta rojiblanca en la segunda parte en la que Depay puso la guinda en el minuto 87.

Casi todos acabaron felices en el Cívitas Metropolitano: los que menos cuentan para las alineaciones, triunfaron; los más habituales, descansaron; además, el Atlético llegará como un cohete a San Siro; y en la Liga, el conjunto rojiblanco se asentó en la cuarta plaza. Las Palmas, sin embargo, se llevó un chasco: se quedó sin la opción de presionar al Betis en su pelea por jugar en Europa el próximo curso. No todos podían terminar satisfechos.

Budimir alarga la crisis del Cádiz

En Pamplona, Ante Budimir agudizó la crisis del Cádiz. El delantero croata, en plena ebullición las últimas jornadas, firmó un doblete con el que el cuadro andaluz se arrodilló ante Osasuna (2-0) para alcanzar los 170 días sin ganar un partido de LaLiga EA Sports. De su última victoria, el pasado 1 de septiembre (3-1 al Villarreal), han pasado 21 jornadas. Desde entonces, apenas ha tenido un par de alegrías frente al Badaloana Fitur en la Copa del Rey (0-1) y en un amistoso contra el Atlético Sanluqueño (0-2).

La llegada de Mauricio Pellegrino para sustituir a Sergio González en el banquillo, de momento no ha surtido efecto. El técnico argentino no ha dado con la tecla y en sus primeros cuatro encuentros en el Cádiz suma dos empates y dos derrotas con los que se ha instalado peligrosamente como un asiduo inquilino de la decimoctava y última plaza con un billete hacia la Segunda División.

En esta ocasión fue Osasuna el que se encargó de rebajar las opciones de salvación del Cádiz. Con un partido serio, y, sobre todo con el acierto de Budimir, sacó adelante tres puntos con los que se asentó cómodamente en la undécima plaza. El delantero croata abrió el marcador a falta de media hora con un gran cabezazo a centro de Rubén García y lo cerró en el tiempo añadido tras acertar en un mano a mano ante Jeremías Ledesma.

Ya son 13 los tantos que ha marcado en Liga el atacante balcánico. Sólo tiene por delante e Dovbyk (14), Borja Mayoral (15) y Jude Bellingham (16). Además, se acerca a su mejor curso como profesional. Acumula 14 goles en partidos oficiales y sólo le separan 3 de los 17 que firmó en el Crotone en la temporada 2015/16. Budimir, con sus aciertos, se encargó de hundir al Cádiz, que la próxima jornada recibirá al Celta en un enfrentamiento vital para ambos.

Cerró la jornada del sábado el Valencia-Sevilla con un protagonista: el portero noruego Orjan Nyland, que frenó las intentonas más claras del conjunto ché por hacerse con la victoria. Yaremchuk, en dos ocasiones y Sergi Canós sufrieron sus intervenciones. El 0-0 no se movió del marcador, el Sevilla sobrevivió, sumó un punto interesante para escaparse del descenso y el Valencia, que también pidió un penalti no pitado sobre Foulquier, sigue a las puertas de Europa.

Juan José Lahuerta

(c) Agencia EFE